Sellar un buen corte de carne es un arte. Si eres fan de su sabor sabes que no estoy exagerando. Y es que hacer este procedimiento adecuadamente puede ser la diferencia entre que quieras “lamer” el plato o “dejar espacio para el postre”.
Aprende a sellar la carne con esta guía rápida y sorprende a los paladares más exigentes

Un filete de carne que está bien sellado adquiere un sabor extraordinario: caramelizado por fuera y salado por dentro. Así, probar un solo pedazo permite a cualquiera experimentar una explosión de sensaciones en la boca, ¡qué rico!
Si quieres aprender cómo sellar la carne de forma adecuada y sencilla, necesitas tomar en cuenta algunas cosas importantes. Por eso, te compartimos a continuación una guía rápida que te permitirá sorprender hasta a los paladares más exigentes.
Utensilios
Para que puedas sellar la carne adecuadamente es necesario que te “armes” de los utensilios adecuados. El primero de ellos es un sartén con antiadherente, así no necesitarás usar aceite, tu comida será mucho más saludable, la carne no se pegará y el sartén resistirá las altas temperaturas que esta técnica requiere. También es importante que tengas unas pinzas, porque así podrás voltear los filetes de forma más sencilla.

Paso 1. Descongela
Si la carne estaba en el congelador, asegúrate de que se encuentra completamente descongelada (siempre sacala al menos una hora antes de guisarla), ya que si está muy fría cuando la expongas al calor extremo, se convertirá en un filete difícil.
Paso 2. Revisa la temperatura
Necesitas que la temperatura sea muy alta para que el sellado de la carne sea perfecto. Te será muy útil tener un sartén que cuente con la tecnología para indicarte cuando es el momento para comenzar a cocinar.
Paso 3. Coloca la carne en el sartén
Ahora que sabes que tu sartén está listo, coloca el (o los) filete en él y deja que se dore durante 3 minutos. Aunque tengas la tentación de moverlo, ¡no lo hagas! La carne necesita un tiempo de contacto ininterrumpido para sellarse correctamente -sí, se va a pegar al principio, pero luego se liberará de forma natural cuando se esté cociendo-.

Paso 4. Ahora sí, mueve
Una vez que hayan pasado los 3 minutos, mueve la carne un poco con las pinzas para evitar que se queme. Si lo deseas puedes agregar un chorrito de vino tinto para darle más sabor, este líquido también puede ayudar a prevenir que el filete se queme por la falta de aceite.
Paso 5. Gira la carne
Una vez que la carne esté cocida por el primero de sus lados, girala con la ayuda de las pinzas y repite del procedimiento. Si es un corte grueso, asegúrate de que todos los lados tengan contacto con el calor.
Paso 6. Déjala reposar
Cuando la carne esté perfectamente sellada, retira el sartén del fuego (o el filete en turno si es que son varios pedazos). Antes de cortarla o añadirla a otro platillos, permite que ésta repose por 5 minutos, para que sus jugos se concentren.
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La clave del sellado perfecto de la carne está en que la temperatura del sartén sea muy alta, al igual que tu paciencia. Así que ármate de ambos antes de entrar a la cocina; el resultado fascinará tanto a tu paladar, que no te arrepentirás.
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