Este mousse de chocolate blanco con salsa de fresas es el apapacho que necesita tu corazón

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No hay nada mejor que los postres. Bueno sí, pero tenemos que aceptar que estos deliciosos y dulces alimentos son de las cosas que más agradecemos que existan. Sobre todo en esos días tristes y nublados en los que nuestro corazón necesita un apapacho.

Y como nunca es mal momento para preparar un postre –y menos para comerlo-, qué te parece si te animas a preparar un delicioso mousse de chocolate blanco con salsa de fresas.

Ingredientes

Para la salsa de fresa

• ½ taza de puré de fresas
• 1 cucharadita de harina de maíz
• 4 cucharaditas de azúcar
• ½ cucharadita de jugo de limón

Para el mousse de chocolate blanco

• 1 taza de chocolate blanco, en pedazos
• 1 taza de leche
• 1 taza de crema batida
• 1 cucharadita de esencia de vainilla
• 1 cucharadita de azúcar
• ½ cucharadita de jugo de limón

Para la guarnición

• 2 cucharadas de crema batida
• 2 fresas (o las que gustes) cortadas por la mitad

Preparación

Salsa de fresa

1. Combina las fresas, la harina de maíz y la mezcla del azúcar con un poco de agua en un sartén antiadherente. Revuelve bien y cocina a fuego medio durante dos o tres minutos, moviendo continuamente.

2. Añade el jugo de limón y mezcla bien.

3. Retira del fuego, aparta y deja que la mezcla enfríe.

Mousse de chocolate blanco

1. Combina el chocolate y la leche en un recipiente para microondas y caliéntalo en él a temperatura alta durante dos minutos.

2. Retira del microondas y mezcla bien hasta que no queden grumos. A continuación, cuela la mezcla para deshacerte de cualquier residuo.

3. Agrega a la mezcla la crema batida y revuelve suavemente.

4. Añade la esencia de vainilla y el azúcar, mezcla nuevamente.

Para servir

1. Vierte cantidades iguales del mousse de chocolate en vasos individuales y nivélalo con una cuchara plana.

2. Vierte dos cucharadas de la salsa de fresa sobre el mousse en cada vaso.

3. Coloca una cucharada de crema batida en el centro de cada vaso y las fresas encima.

4. Refrigéralos por al menos dos horas. Come el mousse frío.

Este mousse de chocolate blanco con salsa de fresa es perfecto para cualquier momento que lo desees, así que consiente a tu corazón y a tu paladar.

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