Nueva York
Eclipse solar paraliza Nueva York: así lo vivieron residentes de la Gran Manzana
Desde los edificios, miradores y parques, además de poseer todo tipo de cámara para no perder detalles, los neoyorquinos se dieron cita con el eclipse solar. Algunos se acomodaron en sillas y el propio suelo para apreciar el evento astronómico con sus gafas de protección.
Los neoyorquinos tomaron las calles para disfrutar del eclipse solar, que tuvo su momento de mayor oscuridad a las 3:25 de la tarde de este lunes.
La Ciudad de Nueva York ofreció los mejores lugares para disfrutar del eclipse solar, sin obstáculos visuales ni distracciones distintas al fenómeno astronómico.
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El sol se cubrió en un 90% de su totalidad, a las 3:30 de la tarde, dándole a los neoyorquinos una experiencia inolvidable. La NASA se mantuvo atenta a esta imagen desde Tupper Lake.
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En una vista aérea desde los parques, los neoyorquinos parecían hormigas. Todos esperando por uno de los momentos más atractivos del año.
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Alejandro Condis, de Univision 41, aseveró que algunos residentes, entre ellos un puertorriqueño, preferían marcharse a sus casas por temor a los eclipses.
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Miles de neoyorquinos acudieron a edificios, miradores y parques para observar el eclipse solar. Abarrotaron todos los puntos estratégicos en un día que consideran histórico.
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Con sus gafas oficiales para proteger la vista, neoyorquinos de todas las edades se dieron cita para observar el evento astronómico.
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Desde las más pequeñas, hasta las más profesionales, los fotógrafos de prensa y espectadores llevaron sus cámaras para capturar el eclipse solar.
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Sin ningún miedo a las alturas, algunos neoyorquinos trataron de "acercarse" al eclipse lo más que pudieron. Tampoco desaprovecharon la oportunidad de llevarse a casa una foto imborrable.
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Desde las Cataratas del Niágara, la gobernadora Kathy Hochul acompañó a los residentes para disfrutar del eclipse. También destacó que el estado trabajó durante 18 meses para que el eclipse solar transcurriera sin incidentes de seguridad que lamentar.
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Como estaba recomendado por expertos, los neoyorquinos confiaron en sus gafas de protección para observar el eclipse. Aunque la Ciudad de Nueva York las ofreció de manera gratuita, algunas personas las vendieron por $5 y hasta $20 dólares.
Las mascotas tampoco faltaron al eclipse solar, acompañadas de sus dueños. Esta tierna perrita llevó hasta sus propias gafas.
Para pronosticar un eclipse, solar o lunar, los expertos realizan cálculos sobre las órbitas de la luna y la Tierra. Es un campo que está muy manejado por la investigación.
Espectadores del eclipse solar describieron la experiencia de haber presenciado el fenómeno y también mostraron nostalgia, debido al largo tiempo que ahora debe pasar para que un evento similar se repita en la Gran Manzana.
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