Luego de meses y meses de espera finalmente llegó el día en el que te entregan tu primer auto. Subís una foto de tu nueva máquina a Facebook y 5 minutos más tarde tu celular explota con mensajes de todos tus amigos que de pronto se acordaron cuántas ganas tenían de verte y hacer algo con vos.
¿Sos el único de tu grupo que tiene auto? Seguro padeciste alguna de estas avivadas
Por:
Fiat Argentina.
Entusiasmado, vos decís que sí a todo. 2 horas más tarde, estás a las corridas porque en 5 minutos tenés que pasar a buscar a un amigo que tiene que ir a hacer unos trámites a Mar Chiquita y ahí es cuando te das cuenta: oficialmente te convertiste en el taxi de tus amigos.
Si ya tenés tu auto te vas a sentir muy identificado con estas 7 situaciones, y si estás a punto de comprarlo... ¡mejor estar preparado! ¿No?
Cuando alguien se pasa de emoción y te rompe algo
Imagen NBC
Sacaste el registro, estuviste varios meses practicando y manejando como un abuelo hasta que ya te sentís preparado. Te subís al auto (que todavía tiene ese olorcito a nuevo) y llevás a tus amigos a un recital de tu banda favorita.
Más tarde, cuando ya dejaste a todos en su casa, ves en el espejo retrovisor lo peor: uno de los parlantes de la luneta... roto. ¿Quién fue? Pensás, te querés hacer el Sherlock Holmes pero no te sale. Mandás un mensaje al grupo de Whatsapp y nadie responde: ya están todos dormidos.
Quizá haber permitido que tus amigos hagan un pogo en la parte de atrás no fue la mejor idea...
Cuando uno de tus amigos le dice que se suba a alguien que no te cae bien
Te invitan a un cumpleaños lleno de gente que no conocés. Tu única salvación en ese mar de desconocidos es alguien de tu grupo, que te va presentando a cada uno... incluso a esa persona que no sabés muy bien quién es pero tiene la risa más irritante del mundo.
Durante 2 horas, soportás las carcajadas histéricas de esa persona que no te deja tener una conversación en paz. Cuando todos se están por ir, tu amigo (como si acaso fuera el dueño del auto) pregunta: "¿Alguno quiere que lo alcancemos?". Entre risas, el único que dice que sí, es él: el muchacho de la risa insoportable.
¡Alegría!
Cuando uno te pide si no lo podés ayudar con la mudanza...
Estás en tu casa muy tranquilo un fin de semana hasta que de pronto te habla un excompañero del curso que hiciste 6 meses atrás. "¿Todo bien?", te tira el muchacho, y antes de que atines a responder te dice "che, no sé si sabés pero me estoy por mudar. ¿Me das una mano llevando algunas cosas?"
Hacés una pausa, contemplás horrorizado la pantalla y solo pensás en una cosa: Adios. Para. Siempre.
Cuando tu mejor amigo te quiere usar para salir <<de levante>> con el auto
Te lo dijo apenas te compraste el auto. Te lo repitió cuando te lo entregaron. Te lo volvió a decir cuando se lo mostraste por primera vez. Y ahora no para de mandarte mensajes con la idea fija en la cabeza: salir a hacerse el banana con tu auto.
Le decís que no, no y no, pero él sigue insistiendo con memes de Ricardo Fort y del gigoló. Me parece que alguien vio <
Cuando le pedís a alguien que te cuide el asiento y se pone demasiado cómodo...
Estás manejando y de pronto te acordás de que tenías que pasar por el chino a comprar unas cosas para tu casa. Parás el auto, bajás a las apuradas y le pedís a tu amigo que te espere 5 minutos adentro.
25 minutos más tarde, volvés con más bolsas que manos y lo descubris a tu amigo, en el asiento de conductor, con la música al palo y apoyando las piernas sobre el tablero. Así no, viejo. Así NO.
Cuando tenés un amigo que te dice cómo manejar
Siempre te va a tocar uno que, en medio del viaje, va a sacar la planilla de evaluación y te va a tomar examen. ¿Che, no deberías tener el espejo retrovisor inclinado 45 grados sobre tu hombro? ¡Cuidado que viene un auto!
¿Estás seguro de que podés hacer un sobrepaso acá? Y mil comentarios más que solo dicen una cosa: te tenés que buscar un nuevo amigo.
Cuando sos el conductor designado y le tenés que hacer de remís a todos tus amigos borrachos
La más probable de todas, así que mejor estar preparado para aceptar la cruda verdad: te vas a tener que acostumbrar a tomar agua cuando salgas con tus amigos.
No solo eso, sino que al regreso seguramente tengas que presenciar las conversaciones más ridículas, mientras mirás de reojo el retrovisor para controlar que nadie empiece con náuseas.
¿Te estás por comprar tu primer auto? Bueno, ahora lo sabés: estas avivadas seguro formarán parte de tu rutina diaria. Pero ¿a quién le importa? Serán las primeras de miles de anécdotas inolvidables que vivirás con tus amigos arriba de tu nueva nave. ¡Disfrutalo!
¿Estás listo para conocer a tu primer auto? Fiat entiende tus necesidades y te acompaña en este nuevo camino ¡Conocé un poco más!