Mató a una familia entera y es arrestado por homicidio múltiple casi dos décadas después

El Buró de Investigaciones de Georgia ( GBI, por sus siglas en inglés) arrestó a Jason Michael Walker como el presunto de un asesinato múltiple que se realizó el 22 de marzo del 2002.

Las autoridades creen que Walker le dio un balazo a su pareja Melissa Wideman, quien entonces tenía 20 años y estaba embarazada de su hijo. También habría asesinado a sus padres, Thomas Wideman, de 51 años y Deborah Wideman, de 48.

Por circunstancias que aún no están establecidas, después de matar a sus cuatro víctimas, el sospechoso le prendió fuego a su casa y se dio a la fuga.

El crimen fue descubierto en las primeras horas de la mañana del 22 de marzo de 2002, por un conductor que pasaba por la casa de los Wideman en la autopista 112 Este, en Rebecca, Georgia, a unas 160 millas de Atlanta.

Tras realizar las primeras investigaciones, la Oficina del Sheriff del condado de Turner refirió el caso al GBI en Perry, Georgia que, tras ordenar una autopsia descubrió que los tres adultos habían recibido disparos y habían muerto antes del incendio.

GBI dijo en ese entonces que los detectives realizaron entrevistas, recopilaron y analizaron pruebas hasta que "se agotaron todas las pistas" y que, aunque habían identificado a varios sospechosos, en ese momento no pudieron acusar a nadie, por lo que el caso quedó frío.

Doce años después, en diciembre de 2014, la investigación fue reasignado a un nuevo equipo. Este descubrió un nuevo testigo quien aseguró haber visto a un hombre blanco saliendo de la casa de los Wideman durante el periodo de tiempo en que ocurrieron los asesinatos.

La nueva información, dijo el GBI, corroboró evidencias obtenida durante las primeras investigaciones y finalmente pudieron arrestar a Walker quien, además de feticidio por el asesinato de un bebé no nacido (su hijo), enfrenta cargos de asesinato, agresión agravada e incendio premeditado en primer grado.

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