Seguramente tienes o has tenido en tu clóset alguna bolsa que después del paso del tiempo se ha agrietado. Tal vez tu primer pensamiento sea tirarla a la basura y comprar una nueva, pero detente.
¿Se dañó tu bolsa de piel sintética? No la tires, te decimos cómo arreglarla
Por:
Sofia Hernandez.
La piel sintética, normalmente fabricada con poliuretano, es una excelente opción para remplazar la piel animal y crear hermosos accesorios como las bolsas o zapatos, pero a veces se maltrata y se pela.
No te preocupes, aquí está una forma de salvar tu bolsa y no tener que gastar en otra. Pero primero algunas recomendaciones para cuidarla mejor.
Evita que se deforme
Si tienes una bolsa escondida al fondo de tu clóset seguramente está doblada, para evitar esto simplemente rellénala con papel al guardarla. Y no pongas una bolsa encima de otra o se aplastarán.
Guardarla en un lugar seco y sin sol para que la luz no la dañe y provoque que se agriete.
Límpiala de vez en cuando
Incluso si no la ves sucia, límpiala cada cierto tiempo para que no se acumule el polvo o la suciedad. Para ello utiliza un paño no abrasivo, por ejemplo, de microfibras, y un poco de jabón de trastes disuelto en agua.
Primero, prueba en esta mezcla en una pequeña porción para comprobar que no descolora tu bolsa. Si ya la probaste y no pasó nada, límpiala gentilmente, después sécala con una toalla suave.
Rótala con otras bolsas
Todo se desgasta con el uso, así que no es recomendable utilizar la misma bolsa todos los días. Ten al menos otra con la que puedas estar rotando.
Además, no la sobrecargues, el peso extra también daña la bolsa. No necesitas llevar todo tu cuarto adentro.
Ahora sí, aquí está la forma de salvarla si ya tiene grietas. Necesitarás:
- Dos pinceles
- Pegamento blanco
- Jabón de trastes
- Un paño de microfibras
- Pintura para cuero o betún para cuero y calzado (que sea del color exacto de la bolsa)
- Guantes
Primero ponte los guantes para proteger tus manos, después limpia la zona que quieres arreglar con el jabón de trastes disuelto en agua y el paño. Una vez limpia, seca la zona. Con un pincel aplica el pegamento blanco en las grietas. Espera a que se seque y coloca otra capa.
Ya que esté secó el pegamento, agarra otro pincel y pinta la parte dañada con la pintura o el betún. Déjalo secar y tu bolsa estará lista.
Esta técnica también la puedes aplicar con zapatos o chamarras, así que tampoco los tries. ¿Qué te pareció este truco? ¿Ya lo conocías? Platícanos si salvaste tus bolsas.
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