9 cosas que le pasaron a mi vida sexual cuando tuve una relación a distancia
Es innegable que sentirás tensión por la ausencia del cuerpo del otro... como una picazón y una leve, constante adrenalina. La vida de la relación a distancia está llena de compromiso... y añoranza.
Cuando no tienes la proximidad física de la persona que amas, tu cuerpo pasa a ser como una antena, salvo que es una antena a la idea de esa persona. A condicionales como "si estuviéramos juntos, estaríamos haciendo esto o esto otro", a estímulos verbales y propuestas que no siempre puedes concretar. Y el sexo... ¿De cuántas formas puede estar presente tu pareja sin estar físicamente ahí?
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1. Hablas de sexo

Es como un telón de fondo, tenue, pero omnipresente. Y si no es sexo, son caricias. Es el contacto con el cuerpo del otro. Su respiración. Sus abrazos por las noches.
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2. ¿Cuáles son las reglas?

¿Cómo definir la exclusividad si la otra persona no está? Quizás prefieran no discutirlo pero con una "permisividad" implícita. Lo importante es que el acuerdo sea claro y los incluya a ambos. Igual, el miedo principal es que el contacto y los sentimientos, por el medio que sea, se mantengan fuertes.
3. Habrá momentos de idealización, de tensión y de mucha realidad

No toda tu relación a distancia vivirá bajo las mismas reglas o el mismo tono. Algunos momentos o etapas serán afectados por la percepción de necesidades cambiantes.
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4. Sentirás la importancia del cariño

Hay un montón de gestos que puedes tener con la otra persona a la distancia. Es como mirar a través de los ojos del otro, en mil instancias, sumergirte desde el otro lado.
5. Habrá alternativas

Sexting más o menos "declarado", quizás con un tono mucho más romántico, pero haciendo alusión a lo físico. Puede que NO quieras hacer nada "por cámara". Puede que te resulte más frustrante o vulgar o innecesario. A veces, solo querrás imaginar y la preponderancia del cariño será notoria.
6. Te sentirás acompañado

La noción de "tener mi espacio" cambiará. Como no hay un espacio tridimensional, quizás hasta te sientas más acompañado. Hablar de lo que sientes: si no lo hacías antes, prepárate.
7. Necesitarás certezas
Sobre todo, en cuanto a "qué es esto". ¿La distancia cambió algo? Permítete descubrirlo... y sorprenderte si todo sigue bien y si están juntos en ese viaje.
8. Querrás teletransportarte

Y también habrá momentos en que estés perfectamente cómodo con la distancia.
9. Aprenderás a conocer el cuerpo del otro de otra forma

Cuando se vean o se vuelvan a ver, el cuerpo adquirirá una mística, si quieres. Y al mismo tiempo, te darás cuenta de todo lo que construyeron a la distancia, estando, compartiendo.
Sobre todo, NUNCA te avergüences de tener una relación a larga distancia. NO ES UNA TONTERÍA. Ni es menos genuina, menos sincera, menos nada.
Miau