SAN ANTONIO; Texas.- La Oficina del Sheriff del Condado Bexar pidió apoyo de la comunidad para identificar a los sospechosos de asesinar a un joven de 17 años durante una fiesta clandestina.
Adolescente de 17 años muere en tiroteo durante una fiesta clandestina; buscan a responsables
Testigos dijeron que en el lugar se llevaba a cabo una fiesta clandestina en la que los asistentes, en su mayoría menores de edad, llevaban armas y consumían bebidas alcohólicas.
La víctima fue identificada como Landyn Reyes, de 17 años, quien falleció en un tiroteo en el patio de una casa, al oeste del condado.
Los hechos fueron reportados alrededor de la 1:00 de la mañana del domingo 4 de agosto, en la cuadra 3900 de Rock Mill Dam, que es una casa nueva, pero que no estaba habitada.

Testigos dijeron que en el lugar se llevaba a cabo una fiesta clandestina en la que los asistentes, en su mayoría menores de edad, llevaban armas y consumían bebidas alcohólicas.
En la fiesta se desató un tiroteo y las balas alcanzaron al adolescente, quien fue hallado en el patio de la residencia. Testigos dijeron que en el lugar se dispararon al menos 20 tiros.
Aunque la autoridad no tiene información del o los responsables, el Sheriff del Condado Bexar, Javier Salazar, dijo que dos personas fueron detenidas, pero no arrestadas, en torno al asesinato del menor.

Fiestas clandestinas: una nueva moda de delito
El Sheriff dijo que el asesinato de Landyn Reyes ocurrió luego de que se reportaran varias fiestas clandestinas durante la noche del sábado 2 de agosto.
“Por lo que sabemos, esta es una moda que hemos estado viendo: usan casas abandonadas, las cuales son nuevas construcciones, que no están ocupadas. Ponen la información en las redes sociales sobre dónde será la próxima fiesta y luego toman posesión de ella”, dijo Salazar.
“Es posible que ellos trabajen en construcción o quebraron una ventana, no lo sé, pero sabemos que es fácil entrar a una casa. Si alguien se propone entrar a una casa a la fuerza, van a encontrar la manera”, agregó el Sheriff.
Se informó que la casa en la que ocurrió el asesinato de Landyn Reyes, en la cuadra 3900 de Rock Mill Dam, era nueva, no estaba habitada y tras los hechos del domingo, quedó totalmente destrozada.
Un video de otra fiesta que había ocurrido horas antes y que fue proporcionado a la autoridad, mostraba como al menos unos 100 jóvenes bailaban empuñando armas y consumiendo bebidas alcohólicas.
“Como padres, tenemos que estar al tanto de lo que están haciendo nuestros jóvenes en las redes sociales. Yo le apuesto que muchas de las armas que estábamos viendo aquí, son robadas”, sentenció el Sheriff Salazar.
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