La noticia de que el hijo del presidente Joe Biden, Hunter, había llegado a un acuerdo para declararse culpable de dos cargos de evasión de impuestos y evitar uno por posesión ilegal de armas, sacudió la política estadounidense justo una semana después de que Donald Trump se convirtiera en el primer expresidente del país en ser acusado penalmente al dejar su cargo.
Hunter Biden y Donald Trump, cómo sus casos impactan la campaña presidencial 2024
Una semana despúes de que Trump fuera imputado, le tocó el turno al hijo del presidente Joe Biden. Y aunque la naturaleza de las acusaciones son distintas, ambos casos pueden servir de armas en la contienda por el control de la Casa Blanca que empezará el próximo año.

Aunque se trata de dos casos muy distintos, tienen en común el potencial impacto sobre la dinámica política de cara a la campaña para las presidenciales de 2024.
El de Trump porque puede afectar sus aspiraciones a lograr la nominación republicana (aunque hasta ahora sus rivales no han explotado esa línea de ataques y se han solidarizado con el exmandatario). De lograr la candidatura, es previsible que sea el caballo de batalla de los demócratas para demostrar que no es digno de volver a ejercer el cargo.
El de Hunter Biden porque puede ser usado contra el actual presidente, quien también espera mantenerse en la Casa Blanca otros cuatro años. Aunque el caso que negoció con el Departamento de Justicia no es el más cargado políticamente y los pecados del hijo no son necesariamente imputables al padre (no se ha encontrado vínculo alguno), servirá para que muchos conservadores pinten como una mafia corrupta a los demócratas y, en especial, a la familia del mandatario.
¿En qué se parecen el caso de Hunter Biden y el de Donald Trump?
En principio, en nada.
El hijo del presidente ha sido investigado por el Departamento de Justicia por evasión de impuestos en los años 2017 y 2018, considerados faltas menores, y por haber mentido sobre su drogadicción para comprar un arma, un delito federal más serio.
Trump ha sido acusado de 37 cargos federales por mal manejo de documentos clasificados, poniendo en riesgo la seguridad nacional y de obstruir la investigación federal destina recuperar esos papeles. Es solo una de las varias investigaciones que tiene abiertas y que podrían desembocar en nuevos cargos en su contra en otros procesos.
¿En qué se diferencian entonces?
Biden es un ciudadano particular sin responsabilidades actuales o pasadas en la administración pública estadounidense. Pero es parte de una familia con gran figuración en la política del país. Su padre ha sido senador, vicepresidente y ahora presidente, por lo que algunos sospechan que Hunter puede haber explotado la influencia paterna en algunos de sus negocios.
Trump tiene una relevancia política mayor al ser un expresidente y aspirante para volver a ejercer el cargo en 2024. Ambos están obligados, como todo ciudadano y residente en EEUU a cumplir con las normas y las leyes, pero en el caso de Trump esa expectativa es aún mayor dada la majestad del cargo que ejerció.
¿Por qué los republicanos hacen entonces paralelos entre Biden hijo y Trump?
La mayoría de los republicanos se hacen eco de las afirmaciones de Trump, quien dice que es víctima de una persecución política. Es la defensa que presenta el exmandatario ante toda averiguación que se le hace, desde el llamado Rusiagate (la investigación sobre la supuesta conexión de su campaña electoral de 2016 con factores rusos) a los dos 'impeachment' que se le hicieron aún en el poder.
Para los conservadores, el que Biden se declare culpable y no vaya a juicio, es demostración de que el Departamento de Justicia ha sido más condescendiente con el hijo del presidente. Y destacan que a Trump se la ha presentado cargos serios que pueden implicar una pena de prisión, si llegara a ser hallado culpable.
¿Están justificadas esas quejas?
La averiguación al hijo del presidente empezó en 2018, durante el mandato de Trump, y siguió hasta ahora, por lo que el argumento de que la Casa Blanca ejerció presión parece perder peso. De hecho, al llegar al poder en enero de 2021, Joe Biden dejó claro que no esperaba que el caso de Hunter fuera a archivarse. Una crítica que siempre le hicieron los demócratas a Trump fue su intención de influir sobre el DOJ, desconociendo la tradicional independencia que ha gozado del resto del Poder Ejecutivo.
¿Qué pasa con la investigación del Congreso?
Los republicanos en la Cámara de Representantes dicen que sus investigaciones seguirán sobre negocios que Biden hijo hizo cuando su padre era vicepresidente de Barack Obama.
Hasta ahora no han presentado evidencia de que el actual presidente se beneficiara directamente de esos tratos o conociera algún detalle. Joe Biden ha negado tener conocimiento de las actividades comerciales de Hunter, aunque en su momento el DOJ le advirtió de la mala imagen que daba que su hijo tuviera negocios con países con los que él trataba desde la vicepresidencia.













