Una iniciativa de ley busca el perdón para una mujer condenada por brujería en 1693

Si los legisladores de Massachusetts aprueban la propuesta, Elizabeth Johnson será la última "bruja" acusada durante los juicios de Salem en ser absuelta, esto de acuerdo con el Witches of Massachusetts Bay, un grupo dedicado a la historia y la tradición de las cacerías de brujas del siglo XVII.

Por:
Univision y EFE
El duro testimonio de esta trabajadora de organizaciones internacionales es un reflejo de lo que sucede a miles de personas, especialmente mujeres, dejadas a su suerte tras la retirada estadounidense del país. Más información aquí.
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Tres siglos después de haber sido declarada bruja, el nombre de Elizabeth Johnson, quien fue condenada en 1693 durante los juicios de Salem, podrá ser exonerado gracias a un proyecto de ley de la legislatura de Massachusetts.

Si los legisladores aprueban la medida, Johnson será la última "bruja" acusada entonces que sería absuelta, esto de acuerdo con el Witches of Massachusetts Bay, un grupo dedicado a la historia y la tradición de las cacerías de brujas del siglo XVII.

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Veinte personas de Salem y pueblos vecinos fueron asesinados, y otros cientos más acusados, durante una ola de juicios basados por la superstición, miedo a enfermedades y extraños y chivos expiatorios, en un fenómeno recordado como la "cacería de brujas", que inició en 1692, según el reporte del Boston Globe citado por la agencia Efe.

"No sabemos por qué, pero en todos estos esfuerzos por perdonar a las mujeres condenadas por brujería que nunca fueron condenadas a muerte, Elizabeth nunca fue incluida", dijo al diario Emerson Baker, profesor de historia en la Universidad Estatal de Salem.

Johnson fue juzgada y sentenciada a morir en la horca cuando tenía 22 años, después de haber "confesado" sus supuestas faltas, según un documento de la época disponible en la página web de la Universidad de Virginia.

No obstante, la mujer no murió ejecutada, puesto que el entonces gobernador William Phips retiró su castigo. Pese a elo, cuando el estado indultó oficialmente a más de 20 personas condenadas por presuntos delitos durante la "cacería de brujas", Johnson no fue incluida.

En los últimos 328 años, decenas de "sospechosos y sospechosas" de brujería han sido absueltos, entre ellos la madre de Johnson, quien a su vez era hija de un ministro. Pero, hasta ahora, el nombre de la mujer no había sido incluido en intentos legislativos anteriores, de acuerdo con el periódico The Guardian.

“No está claro por qué Elizabeth no fue exonerada, pero ni la asamblea general [estatal] ni los tribunales tomaron ninguna medida en su nombre”, explicó la senadora estatal Diana DiZoglio, quien presentó formalmente la petición para que la mujer fuera absuelta oficialmente, tres siglos después. “Posiblemente porque no era ni esposa ni madre, no se la consideró digna de que se limpiara su nombre. Y como nunca tuvo hijos, no hay ningún grupo de descendientes que actúe en su nombre".

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Baker coincide: "Era una mujer joven. Nunca se casó y nunca tuvo hijos. Ni siquiera estamos totalmente seguros de cuándo murió".

Johnson solicitó la exoneración a un tribunal de Massachusetts en 1712, pero la solicitud nunca fue escuchada. Fue excluida incluso de una resolución legislativa en 1957 que absolvió a una persona y en el 2001 la gobernadora Jane Swift agregó cinco nombres más, pero nuevamente, no incluyó a Johnson.

Lo ocurrido con Johnson es sabido por los historiadores más dedicados al tema de las "brujas de Salem", pero los autores originales de la resolución actual que limpiaría su nombre son un grupo de menores de 13 y 14 años, según publicó en julio el periódico local The Salem News.

Las clases de historia de octavo grado de la escuela intermedia Carrie LaPierre en North Andover investigaron a Johnson para un proyecto de participación cívica y después de que se enteraran de su caso en 2019, iniciaron la gestión que desembocó en el proyecto de ley, que ya tuvo una audiencia pública el pasado julio.

<h3 class="cms-H3-H3">El bote salvavidas</h3>
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<br>A inicios de la década de 1880, la inventora 
<b>Maria E. Beasley</b>, de Philadelphia (
<a href="https://www.univision.com/temas/pennsylvania">Pennsylvania</a>), patentó el diseño de lo que se convertiría en el primer 
<b>bote salvavidas</b> como los que conocemos al día de hoy. Beasley desarrolló el boceto en una época en que miles de inmigrantes europeos hacían la travesía para llegar a 
<b>Estados Unidos</b>. 
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<br>Su diseño fue el primera que consiguió mantener a las personas que abandonaban una embarcación dentro del bote salvavidas. Beasley, que al momento tenía unos 33 años, lo patentó en 1880 en EEUU y en el Reino Unido. En 1882, Beasley registró una segunda versión, más avanzado. Antes de su muerte, en 1904, la inventora 
<a href="https://books.google.com/books?id=uRJt7QqA7GEC&q=maria+beasley#v=snippet&q=maria%20beasley&f=false" target="_blank">registró otros 15 artefactos</a>: entre ellos, un calentador de pies y un generador de vapor.
<h3 class="cms-H3-H3">El sofá cama</h3>
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<br>La mujer que inventó el primer sofá cama se llamaba 
<b>Sarah E. Goode</b> y nació en la esclavitud en 1855 en Toledo (Ohio). Tras el fin de la Guerra Civil, Goode y su familia fueron libres y se mudaron a Chicago (Illinois). En 1885, ella se convertiría 
<a href="https://www.uspto.gov/learning-and-resources/newsletter/inventors-eye/uncovering-history-s-black-women-inventors">en una de las primeras afroamericanas en registrar una patente</a> y en la primera en hacerlo con su firma.
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<br>Sarah E. Goode, esposa de Archie Goode y madre de seis hijos de los cuales solo tres llegaron a la edad adulta, abrió una mueblería y fue ahí donde inventó la “cama gabinete”. El mueble creado por Goode estaba pensado para aprovechar el espacio en casas pequeñas: funcionaba como escritorio y se convertía en una cama. El mecanismo de ingeniería es el precursor directo del sofá cama moderno.
<h3 class="cms-H3-H3">El lavaplatos</h3>
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<b>Josephine Cochrane,</b> una mujer de clase alta de Shelbyville (Illinois), fue la creadora del primer lavaplatos. Cochrane 
<a href="https://www.uspto.gov/learning-and-resources/journeys-innovation/historical-stories/ill-do-it-myself">tuvo la idea</a> cuando comenzó a lavar su vajilla ella misma para asegurarse de que no fuera dañada al momento de limpiarla y así fue como desarrolló una máquina que hiciera el trabajo por ella. 
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<br>El resultado fue el primer lavaplatos con éxito comercial, una patente que registró en 1886. A diferencia de intentos anteriores, 
<a href="https://patents.google.com/patent/US355139A/en">el diseño de Cochrane usaba la presión del agua</a> para limpiar los platos. Debido a su alto costo, la mayoría de sus inventos fueron distribuidos en hoteles y restaurantes.
<h3 class="cms-H3-H3">Calefacción para automóviles</h3>
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<br>La primera persona en patentar 
<a href="https://patents.google.com/patent/US509415A/en">un sistema de calefacción</a> para automóviles fue 
<b>Margaret A. Wilcox</b>, una ingeniera de Chicago. Su diseño, registrado en 1893, usaba el calor de la maquinaria del vehículo para calentar el interior durante los trayectos. Diseños posteriores usaron su sistema con variantes para controlar la temperatura. 
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<h3 class="cms-H3-H3">El tubo de alimentación para uso médico</h3>
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<br>Bessie Virginia Blount, también conocida como Bessie Blount Griffin, fue una enfermera, fisioterapeuta y profesora afroamericana que trabajó con veteranos de la 
<a href="https://www.history.com/topics/world-war-ii/world-war-ii-history">Segunda Guerra Mundial</a> en la década de los años cuarenta en el hospital del Bronx, en Nueva York, que hoy en día es parte del Sistema de Salud BronxCare. Una de sus labores era enseñar a pacientes que habían sufrido una amputación producto de las heridas en combate a escribir con sus dientes y pies. Fue ahí donde ella desarrolló un aparato para que las personas en recuperación pudieran alimentarse por sí mismas. 
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<br>El invento de Blount llevaba comida a la boca del paciente cada vez que él o ella lo mordían. 
<a href="https://patents.google.com/patent/US2550554A/en">Patentó el diseño en 1948.</a> Su invento fue el precursor de los sistemas de alimentación para pacientes de hoy en día, que pueden usarse a través de la nariz o directamente en el estómago.
<h3 class="cms-H3-H3">El Kevlar balístico</h3>
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<br>La química 
<a href="https://www.sciencehistory.org/historical-profile/stephanie-l-kwolek">Stephanie L. Kwolek</a>, de origen polaco-estadounidense, desarrolló fibras sintéticas mientras trabajaba en los laboratorios de investigación de DuPont en Wilmington, Delaware. Su invención más famosa es el 
<a href="https://www.dupont.com/what-is-kevlar.html">Kevlar</a>, un material ligero, resistente al calor y que se usa 
<a href="https://lemelson.mit.edu/resources/stephanie-kwolek">en chalecos antibalas</a> así como en otros equipos de protección desarrollado en 1966. El material comenzó a sustituir al asbesto a partir de los años setenta, cuando las compañías comenzaron a reemplazarlo por temor a que su uso causara cáncer.
<h3 class="cms-H3-H3">El sistema de vigilancia para el hogar</h3>
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<br>Marie Van Brittan Brown fue una enfermera afroamericana que, en 1969, 
<a href="https://patents.google.com/patent/US3482037A/en">patentó</a> el primer 
<a href="https://lemelson.mit.edu/resources/marie-van-brittan-brown">sistema de vigilancia para el hogar</a> junto con su esposo, Albert Brown, un técnico eléctrico. La idea nació porque la pareja trabajaba largas jornadas y muchas veces llegaban tarde a casa. 
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<br>El sistema desarrollado contaba con una cámara escondida que capturaba imágenes desde cuatro puntos a través de su puerta, monitores que desplegaban las fotografías capturadas y un micrófono para hablar con la persona que estuviera afuera de su casa. También incluía un control remoto para quitar el candado a la puerta y alertar a la policía. El invento ha sido citado por al menos otras 32 patentes después.
<h3 class="cms-H3-H3">Tratamiento para cataratas</h3>
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<a href="https://www.biography.com/scientist/patricia-bath">Patricia E. Bath</a> fue la primera afroamericana en terminar una residencia en oftalmología y la primera doctora afroamericana en patentar un aparato médico en Estados Unidos. Su invento fue el 
<a href="https://lemelson.mit.edu/resources/patricia-bath">Laserphaco Probe</a>, que remueve las cataratas y evita la pérdida de la vista, patentado en 1988. 
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<br>El método usado por Bath era más rápido, más exacto y menos invasivo que los desarrollados hasta entonces. La médico registró otras cuatro patentes hasta su muerte a los 76 años, el 30 de mayo de 2019. En la fotografía, Bath aparece en la alfombra roja del Festival de Cine de Tribeca antes de asistir a la ceremonia por los Tribeca Disruptive Innovation Awards en abril de 2012. 
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<h3 class="cms-H3-H3">Aislamiento de células madre</h3>
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<br>La científica estadounidense de origen asiático Ann Tsukamoto 
<a href="https://patents.google.com/patent/US5061620A/en" target="_blank">formó parte del equipo que patentó</a> el primer método de aislamiento de células madre, uno de los más importantes avances para el tratamiento contra el cáncer. Tsukamoto ha registrado 
<a href="https://patents.justia.com/inventor/ann-tsukamoto" target="_blank">otras 12 patentes</a> como parte de su investigación.
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El bote salvavidas



A inicios de la década de 1880, la inventora Maria E. Beasley, de Philadelphia ( Pennsylvania), patentó el diseño de lo que se convertiría en el primer bote salvavidas como los que conocemos al día de hoy. Beasley desarrolló el boceto en una época en que miles de inmigrantes europeos hacían la travesía para llegar a Estados Unidos.

Su diseño fue el primera que consiguió mantener a las personas que abandonaban una embarcación dentro del bote salvavidas. Beasley, que al momento tenía unos 33 años, lo patentó en 1880 en EEUU y en el Reino Unido. En 1882, Beasley registró una segunda versión, más avanzado. Antes de su muerte, en 1904, la inventora registró otros 15 artefactos: entre ellos, un calentador de pies y un generador de vapor.
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