OAKLAND, California. – Mario Navarro acababa de graduarse de la preparatoria y tenía el sueño de abrir su propio taller automotriz, pero esos sueños se desvanecieron cuando quedó atrapado en el fuego cruzado de una balacera ocurrida en una gasolinera del este de Oakland.
“Yo le decía 'mi gallito de oro'”: latino de 18 años es la única víctima mortal del tiroteo masivo en Oakland
Horas después del tiroteo masivo en Half Moon Bay, otra balacera ocurrida durante la grabación de un video musical en Oakland dejó un muerto y siete heridos. Familiares de la única víctima mortal lo recordaron como un joven alegre y querido por todos.
El joven latino de 18 años es hasta el momento la única víctima mortal de lo que las autoridades calificaron como “un tiroteo masivo” presuntamente relacionado a la actividad de pandillas. El incidente tuvo lugar durante la grabación de un video musical.
Mario, como muchos otros, era un simple espectador.
“Yo nada más sé que un rapero de Stockton vino a hacer unos videos a Oakland y pues supuestamente iban de calle en calle. Unos amigos le mandaron la ubicación y ellos llegaron. Lo que me dijo mi sobrino es que entraron a la tienda, compraron unos chicles y cuando volteó, ya no lo miró. En ese tiempo empezó la balacera. Todos se agacharon, pero no sé si él se alcanzó a agachar”, cuenta el padre de la víctima, también de nombre Mario Navarro.
Esto se sabe del tiroteo masivo en el este de Oakland
Las autoridades en el Área de la Bahía se encontraban en alerta ante el tiroteo masivo que dejó 7 muertos y un herido en dos granjas de una zona rural campesina de Half Moon Bay, cuando horas después en el este Oakland llegaban reportes de otro tiroteo masivo.
Darren Allison, jefe interino de la Policía, dijo el martes en una rueda de prensa que el saldo de la balacera fue de un muerto y siete heridos: cinco de ellos resultaron baleados (entre ellos Mario) y tres más se lesionaron tras chocar en un vehículo que se alejaba de la escena del crimen.
Las autoridades agregaron que las balas alcanzaron también un automóvil estacionado con dos personas a bordo y un negocio local, pero nadie más resultó herido.
El tiroteo masivo ocurrió el pasado lunes 23 de enero poco después de las 6 pm en la cuadra 5900 de MacArthur Boulevard. Los oficiales que llegaron al lugar encontraron decenas de casquillos percutidos, pero no hallaron víctimas.
La policía recibió minutos después notificaciones de que todas las víctimas heridas de bala habían sido llevadas a hospitales. En el caso de Mario Navarro, el joven llegó con un primo y un tío que lo acompañaban.
Las autoridades creen que el ataque iba dirigido contra miembros o staff del grupo musical que grababa el video.
Mario Navarro era “el gallito de oro” de su padre
Aunque Mario nació y creció en Oakland, siempre fue muy arraigado a sus raíces mexicanas. Sus padres, originarios del estado de Michoacán, lo recuerdan como un joven muy alegre y querido por todas las personas que lo conocían.
“Era la alegría de mi casa. Me va a doler mucho ya no volverlo a ver (…) Él se ganaba el cariño de la gente que lo conocía y desgraciadamente pues me lo arrebataron de las manos. Es una pérdida que, como un padre, yo no le deseo este dolor a nadie, ni a mi peor enemigo”, cuenta el padre.
Concejales municipales aseguran que el Departamento de Policía local actualmente está rebasado y no se da abasto para realizar sus tareas de seguridad. En el lugar donde ocurrió el tiroteo, se habían congregado entre 40 y 50 personas.
“En Oakland no tenemos a los policías (suficientes) para enforzar (sic) la ley. Y también había una vez que el Sheriff y la Patrulla de Caminos de California nos ayudaban en estas calles, pero ahorita no están trabajando juntos. Y tenemos muchas vacantes con la Policía”, explicó el concejal Noel Gallo.
Y mientras los problemas de la inseguridad y la violencia en Oakland siguen estando entre las principales preocupaciones de la comunidad, hoy la familia de Mario Navarro llora la pérdida de un joven que tenía toda una vida por delante.
“Si sufrió yo no lo voy a saber nunca. Yo le decía ‘mi gallito de oro’, porque era bien noble con las personas, alegre (…) Y por eso yo a veces me pregunto ‘por qué, Dios, por qué me tocó a mí’”, señala su padre con la voz quebrada.
Con información de Carla Farías.














En la imagen, agentes del FBI llegan a Mountain Mushroom Farm, una de las granjas donde encontraron a las víctimas.