OAKLAND, CA.- La alcaldesa de Oakland, Sheng Thao, ha anunciado que no renunciará tras un operativo del FBI en su casa.
Alcaldesa de Oakland afirma que no renunciará tras operativo del FBI en su casa
Enfrentando desafíos y controversias, la alcaldesa Sheng Thao de Oakland rechaza las peticiones de renuncia tras una redada del FBI en su casa.
Durante una conferencia de prensa en la que no se aceptaron preguntas, Thao negó cualquier irregularidad y afirmó que la investigación no está dirigida hacia ella, además se declaró “inocente”.
Thao, quien asumió el cargo como la 51º alcaldesa de la ciudad en enero de 2023, ha estado enfrentando una serie de desafíos durante su mandato de 17 meses, incluyendo un tiroteo masivo y una campaña de destitución.
Las redadas en su casa y en otras tres residencias fueron realizadas por agentes del FBI y del Servicio de Inspección Postal de los Estados Unidos (USPIS) el 20 de junio.
Aunque aún no se ha revelado la naturaleza de la investigación, se especula que puede estar relacionada con una investigación de corrupción que involucra a California Waste Solutions, la compañía de reciclaje de la ciudad.
Violencia afecta la ciudad de Oakland
El anuncio de Thao se produjo después de un tiroteo masivo en un espectáculo secundario del Juneteenth en Grand Avenue junto al lago Merritt, que resultó en al menos 15 personas heridas.
Además de estos desafíos, Thao ha luchado por abordar las tasas de criminalidad de Oakland.
Según datos del departamento de policía, la ciudad registró en 2023 su mayor número de homicidios en 15 años.
Las tasas de robo residencial han aumentado en un 95% en comparación con el mismo período del año pasado.
La demanda del ex jefe policial de Oakland
Los intentos de Thao de reformar el departamento de policía han encontrado resistencia, especialmente después de que despidiera al jefe de policía LeRonne Armstrong en febrero de 2023.
Armstrong, quien ahora se postula para un puesto en el Concejo Municipal, está demandando a Thao y a la ciudad por despido injustificado.
Oakland también enfrenta problemas presupuestarios, con un déficit proyectado de $360 millones durante los próximos dos años.
A pesar de los desafíos, los partidarios de Thao argumentan que ella ha heredado muchos de estos problemas y necesita más tiempo para implementar soluciones.
Los críticos, sin embargo, afirman que su administración carece de una dirección clara.
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