SAN FRANCISCO, California. – A una semana de que el gobierno estatal obligara a 41condados a retroceder a la fase morada de reapertura ante el aumento de casos de coronavirus, funcionarios de salud de los tres condados del Área de la Bahía que permanecen en el nivel rojo temen que en los próximos días se tengan que unir al resto y enfrentar mayores restricciones.
Cierres de negocios y toque de queda: cómo el coronavirus golpea a los condados del Área de la Bahía
Ante el repunte de casos de coronavirus, los condados de Alameda, Napa, Contra Costa, Santa Clara, Solano y Sonoma retrocedieron al nivel morado, por lo que la operación de restaurantes, cines y gimnasios está prohibida a puerta cerrada, además de que las diócesis deben suspender todas las misas dentro de las iglesias.
El repunte de casos de coronavirus en todo California llevó a las autoridades de salud a pisar el freno de emergencia en el proceso de reapertura de los 58 condados, por lo que desde la semana pasada decenas de condados implementaron cierres masivos para interiores de restaurantes, iglesias, cines y gimnasios. A gran escala, el 94% de los californianos ahora viven en condados que regresaron a la fase con mayores restricciones.
“Estamos haciendo sonar la alarma. California está experimentando el aumento de casos más rápido que hayamos visto hasta ahora, incluso más veloz que al comienzo de la pandemia”, alertó el gobernador Gavin Newsom en una rueda de prensa virtual.
Entre los funcionarios de salud crece de nuevo el temor de que la crisis del coronavirus provoque el colapso del sistema hospitalario, razón por la que el gobierno estatal implementó desde el sábado toque de queda nocturno en todo California similar al que paralizó la actividad económica y confinó a más de 40 millones de residentes en sus hogares en marzo pasado.
En el Área de la Bahía, los condados de Alameda, Napa, Contra Costa, Santa Clara y Solano retrocedieron a la fase más restrictiva y ahora acompañan a Sonoma, que nunca salió de ese nivel, mientras que Marin, San Francisco y San Mateo quedaron en la fase roja, que aún representa una propagación generalizada del virus en la comunidad. Sin embargo, en esos tres condados los funcionarios de salud han advertido que el retroceso será cuestión de días.
El gobierno estatal sorprendió además con cambios en el sistema monitoreo de casos que le permitirán a las autoridades de salud reasignar a los condados en los distintos niveles de manera diaria en lugar de esperar cada 14 días, además de hacerlos retroceder múltiples fases en lugar de una por una.
Como ha ocurrido hasta ahora, los condados de la Bahía seguirán sujetos a los lineamientos de reapertura del gobierno estatal, con la posibilidad de imponer medidas incluso más restrictivas. Por ejemplo, el reglamento sobre el uso de mascarillas se endurecerá a nivel estatal para que sean llevadas sin excepciones en casi todo momento cuando se esté fuera del hogar y el secretario de salud de California les pidió a los residentes de todos los condados en las fases morada y roja “evitar reunirse es espacios cerrados”.
A continuación, te explicamos las restricciones vigentes en los condados en los niveles morado y rojo, donde se encuentran todos los condados del Área de la Bahía:
Funcionarios de salud del Área de la Bahía han anunciado por separado sus nuevas restricciones que, en gran medida, coinciden o incluso endurecen las del plan estatal de reapertura. San Francisco, por ejemplo, prohibió que los restaurantes ofrecieran servicio a puerta cerrada y que pidió que las oficinas de sectores no esenciales regresen al trabajo 100% remoto pese a encontrarse aún en la fase roja.
En el resto de la Bahía los cierres masivos de restaurantes, iglesias, gimnasios y cines comenzaron la semana pasada, obligando a los dueños a volver a adaptarse para brindar servicio únicamente al aire libre en pleno inicio de la temporada de lluvias y bajas temperaturas.
En cuanto a la reapertura de escuelas, las autoridades de salud de la región señalaron que los centros educativos que retomaron las clases presenciales podrán seguir haciéndolo, pero se frenará la reapertura de planteles adicionales.