En noviembre del pasado año, Megan Fox, de Nashville, Tennessee, compró un patineta de tipo 'hoverboard' por 274,79 dólares. En el vecindario varios vecinos tenían un hoverboard, y uno de sus cuatro hijos quería uno para Navidad. Megan investigó con los papás de sus vecinos sobre cuál era la mejor opción y encontró que el modelo ideal era el Fiturbo F1. Amazon lo vendía a través de una empresa llamada W-Deals, que debía traerlo desde China.
Así quedó una casa tras la explosión de una patineta. Hoy Amazon enfrenta una demanda millonaria por venderla
La familia Fox pagó 274,79 dólares por el hoverboard y sólo pudieron rescatar de su casa algunas fotos y libros. Hoy piden una compensación de 30 millones de dólares a Amazon.

Al llegar el paquete, el hoverboard estuvo escondido en un closet de la casa de los Fox hasta la noche de Navidad, cuando se lo entregaron a sus hijos. Según el reporte del departamento de bomberos de Nashville, dos semanas después, el 9 de enero, dos de los hermanos Fox estaban en la casa. Al oír ruidos extraños en el primer piso, subieron las escaleras. El 'hoverboard' estaba en la planta baja y explotó. La niña de 16 años rompió una ventana del segundo piso y cayó a los brazos de Brian Fox, su papá. Luego él, con ayuda de una escalera, rescató a su hijo de 14 años por otra ventana. Los Fox perdieron todo: sólo quedaron con sus automóviles, algunas fotos y libros.
Otra familia compró el mismo patineta y lo vio arder mientras cargaba su batería de litio. Sin embargo, pudieron reaccionar a tiempo y el accidente no pasó a mayores.





Estos episodios le han costado a Amazon una demanda millonaria. La familia Fox contrató a Steve Anderson, uno de los 100 mejores abogados de la ciudad, quien el 26 de octubre pasado puso una demanda contra Amazon.
“Amazon, como acusado, conocía los peligros de los 'hoverboards' como el que fue enviado a la casa de los Fox. A pesar de ello, vendieron y distribuyeron el producto, que no estaba adecuadamente representada en su sitio web y ya era excesivamente peligroso en el momento de la venta”, dice la demanda. Desde diciembre del año pasado, los medios han registrado varios incendios de hoverboards.
En una entrevista al USA Today, Anderson dijo: “hemos pasado meses investigando y hoy no sabemos dónde se fabrica este producto. Amazon tampoco lo sabe”.
El vendedor del hoverboard en Amazon se llama W-Deals. La empresa está registrada en una casa de Brooklyn y el abogado Steve Anderson no ha podido comunicarse con ellos. La demanda se dirige a W2M Trading Corporation, propietaria de W-Deals y nueve empresas subsidiarias de Amazon.