Niño de 12 años es sorprendido compitiendo en carrera callejera en Florida junto a un adolescente de 17

ORLANDO, Florida.- Un incidente que pudo terminar en tragedia terminó siendo tan sorprendente como inverosímil: un niño de apenas 12 años fue detenido por la policía del condado de Volusia, mientras participaba en una carrera callejera junto a un adolescente de 17 años. El hecho fue captado en video por la cámara corporal del oficial que hizo la parada.

Todo comenzó cuando el agente interceptó dos vehículos que corrían a alta velocidad en la intersección de Dahlia Road y West Parkway. Al acercarse al segundo auto, descubrió que el conductor era un niño de 12 años, quien inmediatamente le preguntó al oficial, con la naturalidad de quien olvidó la tarea escolar: “¿Puedo llamar a mi mamá?”

El oficial accedió, y poco después llegó la madre del menor al lugar. El niño, que habló con ella en español, se identificó como hispano. Cuando el policía le explicó a la madre lo que su hijo acababa de hacer —participar en una carrera callejera sin licencia y con otros menores a bordo—, la mujer no pudo ocultar su frustración. Entonces, le soltó al oficial una frase que dejó a todos perplejos: “¿Usted le puede pegar?” A lo que el oficial, con tono serio pero sarcástico, respondió: “Yo no le puedo pegar, pero es su hijo… y el castigo corporal es totalmente legal.”

La escena, que por momentos parece sacada de una comedia, también tuvo momentos tensos. El padre del adolescente de 17 años también llegó al lugar y al enterarse del motivo del arresto exclamó: “¡Mi hijo va a empezar la universidad este año!”. El oficial, sin filtros, le respondió: “Entonces necesita sacar la cabeza de su trasero.”

Ambos conductores, el niño de 12 años y el joven de 17, fueron citados por participar en carreras ilegales. Además, dos adolescentes de 16 años que iban como pasajeros también fueron sancionados. El menor de 12 años recibió una multa adicional por conducir sin licencia.

Aunque la historia generó risas e incredulidad en redes sociales, las autoridades recordaron que permitir que un menor conduzca un auto no solo es ilegal, sino extremadamente peligroso. En esta ocasión, nadie salió herido, pero el mensaje fue claro: los riesgos son reales, aunque el episodio parezca sacado de una película.

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