“No conocía a nadie con coronavirus, pensaba que si me daba, lo superaría fácil porque soy joven y sano": hispano hospitalizado

PHOENIX, Arizona.- Arizona reportó este martes un nuevo récord de casos positivos de coronavirus. Sin embargo, desde que se terminó la orden de quedarse en casa y reabrió el estado, muchos arizonenses han bajado la guardia o nunca se han tomado en serio la pandemia.

“No conocía a nadie con coronavirus, pensaba que si me daba, lo superaría fácil porque soy joven y sano. Me preocupaban mis abuelos, pero no por mí”, dijo Jimmy Flores de 30 años, un hispano que se encuentra hospitalizado después de haber sido diagnosticado con el virus.

Flores contó que los síntomas comenzaron el lunes pasado cuando despertó con fiebre de 103, dolores en el cuerpo y fatiga. Se hizo la prueba del coronavirus el martes y el jueves recibió la noticia que era positivo.

“Comencé a recibir llamadas de varias agencias de salud. Me hicieron muchas encuestas y entrevistas para averiguar exactamente dónde y cómo obtuve el virus”, explica Flores. ”Basado en mis respuestas, un amigo mío y yo fuimos por un trago en Scottsdale el sábado por la noche, y terminamos contrayendo el Covid”.

Flores dijo que aunque tuvo una mejoría el viernes, su salud se deterioró rápidamente durante el fin de semana, y para el domingo ya no podía moverse de la cama, ni respirar.

“El coronavirus es una bestia impredecible y jamás había sentido tanto dolor y ansiedad en mi vida”, aseguró este joven de 30 años quien comparte su testimonio para concientizar a otras personas como él que no creen en la gravedad de la pandemia. “No es el momento de salir y pasársela bien. No soy fan de la intervención del gobierno, pero que si el público no se puede controlar, apoyo que las autoridades hagan algo”.

Mientras hay personas como Flores que tuvieron que contraer el virus para creer que sí es un problema de salud serio, hay otras personas como Regina Valenzuela que siempre ha puesto la salud como prioridad. Pero este virus no discrimina y hasta ella salió positiva.

“No tengo ni la más mínima idea cómo pude haberme contagiado del coronavirus, he sido extremadamente cuidadosa, hasta exagerada”, asegura Valenzuela.

Ella es dueña de un salón de belleza e incluso antes de la orden de quedarse en casa del gobernador, ella decidió cerrar su negocio por seguridad de sus clientes, de ella y de su familia. Ahora encerrada en uno de los cuartos de su casa, Valenzuela ve como su salud se deteriora cada día en medio de la ansiedad y soledad.

“Es horrible esta sensación de sentirte enfermo, de estar aislado, de no convivir con tu familia, de saber del riesgo que se puedan contagiar”, dice Valenzuela.

Su hija de 19 años también tiene síntomas y su hijo de 13 años es parte de la población vulnerable ante el coronavirus.

“Mi hija ha estado con temperatura muy alta, dolor de pecho, con tos. Está en otro cuarto y yo no puedo estar allí para cuidarla. Mi hijo tiene una condición médica con un riesgo alto de contagiarse”, explica Valenzuela, quien le hace un llamado a la comunidad para que acate las medidas de prevención. “El virus está en todos lados, por favor tomen conciencia, cuídense por usted, por su familia y por los demás”.

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