Cinco incidentes en menos de un mes delatan la crisis de las cárceles mexicanas

En lo que va del mes se han registrado diversos motines, al menos dos fugas de reos y la difusión de un video que pone en evidencia las violaciones a los derechos humanos y las fallas de seguridad que presentan los sistemas penitenciarios en México.

Janet Cacelín Foto bio
Por:
Janet Cacelín.
Riña en penal de Cadereyta, Nuevo León
Riña en penal de Cadereyta, Nuevo León
Imagen Reuters / Daniel Becerril

Ciudad de México.- Violentos motines, fugas masivas y violaciones a los derechos humanos son algunos de los incidentes que durante el último mes se han registrado en cárceles mexicanas, lo que ha aumentado las alertas de organizaciones civiles e incluso del propio secretario de Gobernación, quien el martes por la noche hizo un llamado a los gobernadores de los estados a “poner orden”.

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El funcionario Miguel Ángel Osorio dijo que no es aceptable que los recursos entregados por el gobierno federal a los estados no se utilicen para mejorar las condiciones de las cárceles estatales.

“Se trata de un tema que todas y cada una de las entidades deben atender de forma prioritaria y aquí el llamado es a voltear a ver a las prisiones, establecer orden y disciplina antes de que haya más situaciones que lamentar”, señaló.

El último incidente sucedió el pasado martes en el penal de Cadereyta, en el norteño estado de Nuevo León, cuando un motín dejó cuatro reos muertos y al menos 16 heridos durante el segundo día de revueltas registradas en ese penal. El lunes, dos custodios y cinco reos resultaron lesionados.

De acuerdo con las autoridades, los presos se oponen a la aplicación de controles más estrictos en el protocolo para ingresar al penal e impedir, entre otras cosas, el ingreso de drogas. Sin embargo, de acuerdo con familiares de los reos, la protesta es porque no les permiten introducir comida los días de visita, ni que les den dinero. Asimismo, también se quejan de no dejar trabajar al personal de Derechos Humanos dentro del Penal, aunque se había acordado que sí lo hicieran.

El pasado 15 de marzo, los medios de comunicación mexicanos difundieron un video que muestra presuntos abusos dentro de la cárcel de Apodaca, que se ubica también en el estado de Nuevo León. En las imágenes se ve a seis reclusos vestidos con ropa interior femenina mientras lavan el suelo del Centro de Reinserción Social.

El video muestra a un grupo de reos que están siendo abusados por otro grupo de presos que parece tener el control. Según parece, podría tratarse de un acto de venganza entre grupos de narcotraficantes rivales.
Video Desnudos y limpiando el suelo, varios reos sufren vejaciones en un penal de México

La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) ya había alertado al gobierno de Nuevo León desde octubre de 2016 sobre actos de tortura en esa cárcel. Detectó que grupos de internos cobraban a los reclusos por protección o simplemente por ocupar una estancia. Cuando alguien no pagaba, era sometido.

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Además señaló que el autogobierno que ejercen los reos en las prisiones "evidencia la falta de autoridad en el sistema penitenciario de Nuevo León, que se agudiza con otros problemas como la sobrepoblación y el hacinamiento".

Sobrepoblación y autogobieno, solo algunos de los problemas

Sin embargo, la violencia en penales no ha sido exclusiva de ese estado, en la entidad vecina de Tamaulipas otra riña registrada la semana pasada dejó tres muertos, dos días después de la fuga de 29 reos. Hasta ahora, 16 de los prófugos ya han sido recapturados y 40 funcionarios se encuentran bajo investigación.

Días antes, el 16 de marzo, Juan José Esparragoza Monzón, señalado como operador financiero del cártel de Sinaloa y quien se encuentra entre los 122 objetivos prioritarios del gobierno federal, escapó del penal de Aguaruto, junto con otros cuatro reos.

Tras el suceso, medios reportaron que en los espacios donde Esparragoza Monzón estuvo preso había artículos de lujo como 75 pantallas de plasma, 20 consolas de videojuegos. Además las celdas estaban acondicionadas con dos recámaras y dos salas completas.

Estos incidentes ya habían sido advertidos por la CNDH en un estudio sobre las cárceles del país que muestra que, en su mayoría, presentan deficiencias graves. En una revisión de 130 prisiones estatales, 21 centros federales de máxima seguridad y tres prisiones militares, el organismo localizó problemas similares en todos los penales.

Un informe reveló irregularidades cómo el cobró de cuotas y la inexistencia de protocolos de seguridad .
Video Informe revela irregularidades en cárceles de México

Los resultados registraron que 95 de los 130 carecen de personal de custodia suficiente y hay sobrepoblación en 71 de ellos, el mismo número en el que se detectan unas condiciones de autogobierno de los presos.

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Para la CNDH, la sobrepoblación es uno de los mayores problemas porque desencadena que se pierda el esquema de seguridad, se otorguen privilegios y haya brotes de violencia, como los ocurridos en los últimos días.

México cuenta con una población carcelaria de unos 247,000 presos y en 13 estados las carencias se vuelven graves y urgentes. Respecto a la presencia de autogobiernos, en los cuales un reo o grupo de reos ejercen el control del penal mediante la violencia y la intimidación, esta fue detectada en 73 de los reclusorios inspeccionados.

En cuanto a los penales de máxima seguridad, el informe indica que 16 de los 21 cuentan con escaso personal de custodia, en ocho hay carencias para prevenir la seguridad, y en seis hay sobrepoblación, entre ellos el del Altiplano, donde estuvo recluido y escapó el líder del cártel de Sinaloa, Joaquín 'El Chapo' Guzmán. Esta cárcel tiene capacidad para 836 internos y tiene 1,018.

Parientes de los reos de la cárcel de Topo Chico suben una reja que rodea el centro para ver si pueden ver a sus familiares.
Una manera de comunicarse con ellos es con pancartes con sus nombres.
Un automóvil forense llega a Topo Chico.
Familiares con pancartas piden señales de vida de sus familiares internos.
Los reos se asoman por las ventanas para dar señales de vida.
Autoridades impiden el paso de los familiares.
Familiares de los internos están molestos porque ha sido muy tardado recibir información de las víctimas de un motín que dejó al menos 52 muertos.
Esta mujer llora al escuchar la confirmación de que hay por lo menos 52 personas muertas y 12 heridos.
Ante la incertidumbre algunos de los familiares se enfrentaron con la policía.
Los familiares, en las primeras horas del jueves, aún no sabían los nombres de las víctimas.
Reclusas de la cárcel Topo Chico miran a la calle en medio del caos tras el motín, provocado por una riña de bandas rivales.
Uno de los familiares intenta romper una de las cadenas para entrar al penal.
Otros amenazaban con palos para que las autoridades los dejaran pasar.
Efectivos de las fuerzas de seguridad en Monterrey.
Fuerzas de seguridad en los alrededores de la prisión de Topo Chico tras la acción violenta.
Familiares de los presos a las puertas del penal tras conocer las informaciones del motín.
Decenas de personas se agolpan a la entrada del penal.
Familiares se agolpan a las puertas de la prisión para conocer la situación tras las informaciones de decenas de muertos.
Fuerzas de seguridad en las inmediaciones del centro penitenciario.
Inmediaciones de Topo Chico donde se produjo la revuelta durante la madrugada del jueves.
Vehículos de la Fuerza Civil tras la revuelta en el penal de Monterrey
El penal de Topo Chico en Nuevo León.
Policías resguardaban, desde la madrugada, el penal.
Familiares de los internos bloquean las afueras de la prisión.
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Parientes de los reos de la cárcel de Topo Chico suben una reja que rodea el centro para ver si pueden ver a sus familiares.
Imagen AFP/Getty Images
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