¿Se avecina la guerra del maíz entre México y EEUU? Te explicamos

El gobierno de López Obrador sigue adelante con su intención de vetar la importación de maíz transgénico y Estados Unidos incrementa la presión para evitarlo.

Por:
Univision
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Video Mexicanos no quieren la siembra de maíz transgénico

El gobierno de México tiene tan claro que no quiere el maíz genéticamente modificado de Estados Unidos como en la Casa Blanca están dispuestos a seguir presionando para continuar vendiéndoselo.

Así fue que esta semana viajó a México el secretario de Agricultura de Estados Unidos, Tom Vilsack, para reunirse con el presidente Andrés Manuel López Obrador y trasladarle la inquietud de Washington DC ante sus planes de vetar el maíz transgénico estadounidense a partir de 2024.

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“Enfaticé, en términos no poco claros que, sin una resolución aceptable del asunto, el gobierno de EEUU se vería forzado a considerar todas las opciones, incluido tomar pasos formales para imponer nuestros derechos bajo el T-MEC”, señaló Vilsack en un comunicado reproducido por medios especializados en el sector agrícola.

Pero México, uno de los mayores importadores de maíz del mundo, defiende que el transgénico importado pone en riesgo las variedades ancestrales locales y por eso, el 31 de diciembre de 2020, dictó un decreto para vetarlo para consumo humano a partir de enero de 2024.

El asunto ha causado enorme inquietud en el sector agrícola estadounidense que en el ejercicio 2021/22 vendió a México, su principal mercado, 16.8 toneladas por un valor de más de $5,000 millones, según datos del Consejo del Grano de EEUU.

¿Se viene la guerra del maíz?

No al maíz transgénico para consumo humano

“No queremos maíz transgénico para consumo humano, no queremos, no lo vamos a permitir", insistió el presidente López Obrador en su conferencia mañanera del lunes, antes de reunirse con el secretario Vilsack.

Además, aseguró que su país es autosuficiente en cuanto a maíz blanco, el consumido por las personas, pero sí reconoció que requiere maíz amarillo para el ganado y ahí está la disputa.

" Donde está el problema es en el maíz amarillo para forraje, entonces esa es nuestra política (prohibir los transgénicos) y va a continuar así, pero hay formas de ponernos de acuerdo”, expuso, según EFE.

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Esta prohibición podría llegar a reducir las importaciones mexicanas de maíz estadounidense a la mitad, según le dijo a Reuters el mes pasado el viceministro de Agricultura, Victor Suárez.

Tras el encuentro, el secretario Vilsack emitió su comunicado en el que dijo que se produjo “algún progreso” y destacó el que presidente se mostró abierto a discutir un proceso potencial para intercarmbiar información sobre la seguridad de la biotecnología estadounidense.

También rescató que López Obrador reafirmó la importancia del maíz amarillo para la seguridad alimentaria mexicana.

Y advirtió que el asunto, si no se resuelve, tendrá un impacto significativo en la relación comercial de ambos países, que ya tienen una disputa por la energía.

“Dejamos claro que el veto a las importaciones de México provocará masivas pérdidas económicas para la industria agrícola de México y los ciudadanos, además de que impondrá una carga injustificada a los granjeros de EEUU”, agregó.

En 1996 el Gobierno argentino aprobó la comercialización de productos transgénicos y el uso del herbicida glifosato. 20 años después, aproximadamente el 60% del área cultivada del país fue fumigada con agrotóxicos, algunos prohibidos en la mayoría de los países del mundo. Esta fotografía de 2014 tomada en la provincia de Misiones, al noreste del país muestra al niño de 5 años Lucas Techeira quien padece Ichthyosis Lamellar, un extraño trastorno genético de la piel. La provincia de Misiones fue la puerta de entrada de los cultivos transgénicos en Argentina
El negocio de los agrotóxicos en Argentina está manejado por un grupo de 25 empresas nacionales e internacionales que ganan alrededor de 2550 millones de dólares al año con la comercialización de plaguicidas. Esta fotografía de 2014 tomada en Entre Rios, provincia del centro de Argentina muestra a Fabián Tomasi, quien Sufre de polineuropatía tóxica severa y atrofia muscular general. Trabajó durante años en en una compañía de fumigación aérea de cultivos y ahora se dedica a difundir el peligro de estas sustancias.
La mano con las uñas quemadas de Alfredo Cerán, quien trabajó durante nueve años aplicando agroquímicos en campos de soya. Los análisis de su sangre registraron residuos de glifosato y otros químicos tóxicos. Monte Maiz, provincia de Córdoba.
Talía Belén Soroco (14 años) tiene una malformación congénita. Se sometió a cirugía de corazón y sufre de problemas motores severos. Sus padres trabajaron en campos de tabaco desde que eran niños y manipulaban pesticidas prohibidos como Furadan y bromometano. Poco después del nacimiento de su hija decidieron abandonar los campos y emprender una horticultura sostenible. San Vicente, Misiones, 2014.
En la provincia de Misiones, cinco de cada mil niños nacen con mielomeningocele, una grave malformación del sistema nervioso central, donde los niños nacen con la médula espinal abierta.
Maribella Alexandra Duarte (10 años) sufre de una malformación congénita que no le permite moverse por sus propios medios. Ella y su familia viven a unos 30 metros de los campos de soya expuestos a la fumigación. En ese poblado se registraron 19 casos de cáncer terminal en el área que colinda con la granja de soya.
Mónica Gabriela Rais (21 años) sufre de paraplejía y trastorno de desarrollo intelectual. Nació cuando su madre tenía 15 años y trabajaba en granjas de tabaco.
Una niña juega en los campos de Alicia Alta, Provincia de Misiones.
Edgar Fontanellaz y su familia viven en Firmat, un pequeño pueblo de la provincia de Santa Fe donde los campos son cultivados con soja transgénica. Edgar denunció decenas de veces a las autoridades las múltiples fumigaciones a las que su familia estaba expuesta. Fue amenazado y le dispararon dos veces. Sus hijos sufren de pérdida auditiva y Edgar piensa que esto se debe a la exposición múltiple a los químicos.
Marcos Alejandro Kaddaztz sufrió de leucemia cuando tenía 10 años. Su padre ha estado trabajando como fumigador de fungicida en los campos de tabaco durante 32 años, su madre estaba en el hospital debido a una intoxicación antes de que Marcos naciera. Hoy tiene 20 años y su familia tuvo que mudarse de la granja donde viven y establecen en la ciudad. Marcos ha estado en la lista de espera por tres años esperando un trasplante de riñón en el hospital de Posadas. Colonia Aurora, provincia de Misiones
Los gemelos Aldo y Maximiliano Barrios padecen una grave microcefalia congénita, una de las enfermedades asociadas al uso de agroquímicos en la agricultura transgénica. Los gemelos Barrios asisten a una de las muchas instalaciones para minusválidos, que están creciendo en número considerablemente año tras año. Roque Sáenz Peña, Provincia del Chaco, 2014.
Anita Sosa (4 años) no puede caminar sola, pero juega soñando que es bailarina junto con su hermana mayor. Liliana Dworak, su madre, estuvo expuesta sustancias tóxicas que complicaron su último embarazo, cuando las autoridades fumigaron su casa para controlar el zancudo que propaga el dengue. Napenay, Provincia de Chaco, 2014.
Sandra Sosa es la madre de Leonardo Lorenzo, quien sufre de parálisis cerebral y epilepsia como resultado de las repetidas fumigaciones. Actualmente viven en el vecindario Progreso, donde el número de niños y adolescentes discapacitados crece exponencialmente. San Vicente, Provincia de Misiones.
Avia Terai es una ciudad de cinco mil habitantes en el centro geográfico del Chaco. La ciudad está literalmente rodeada cultivos que son fumigados diez a doce veces al año. Una investigación, auspiciada por el Ministerio de Salud argentino, reveló que las altas tasas de enfermedades como cáncer y otras discapacidades son consecuencia directa del modelo agrícola aplicado en esta y otras ciudades cercanas rodeadas de campos transgénicos. .
Andrea Gotin era una niña sana hasta los ocho años, cuando inhaló bromometano y permaneció nueve días en cuidados intensivos. La fiebre que padeció luego de inhalar la sustancia afectó la función motora de su cerebro. Ella necesita un trasplante de riñón y tiene que someterse a diálisis tres veces por semana. Su hermano Ademir (20 años) sufre de discapacidad mental grave. Su padre, Darío Gotin, falleció el día que supo que no podría le hacer el transplante de riñon a su hija, en 2010. Alicia Baja, Colonia Auror, Provincia de Misiones.
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En 1996 el Gobierno argentino aprobó la comercialización de productos transgénicos y el uso del herbicida glifosato. 20 años después, aproximadamente el 60% del área cultivada del país fue fumigada con agrotóxicos, algunos prohibidos en la mayoría de los países del mundo. Esta fotografía de 2014 tomada en la provincia de Misiones, al noreste del país muestra al niño de 5 años Lucas Techeira quien padece Ichthyosis Lamellar, un extraño trastorno genético de la piel. La provincia de Misiones fue la puerta de entrada de los cultivos transgénicos en Argentina
Imagen Pablo Piovano/Philip Jones Griffiths Photojournalism Award
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