La historia de la mujer de la Cruz Roja que consoló a un migrante y terminó insultada en las redes sociales

Luna Reyes Segura, de 20 años, protagoniza la fotografía icónica de la actual crisis entre Marruecos y España junto a un migrante senegalés del que no se sabe el nombre. Ha recibido aplausos pero también una campaña de insultos que la ha obligado a cerrar sus redes sociales.

Por:
Univision
La imagen del abrazo se volvió viral al mostrar el drama que envuelve la crisis migratoria y diplomática entre España y Marruecos. Aunque muchos se conmovieron con el gesto, la mujer comenzó a recibir comentarios racistas, machistas y xenófobos como: “Lo vas a pagar caro” y “Europa no es una ONG”.
Video Mensajes de odio por abrazar a un migrante: tuvo que cerrar sus redes tras hacerse viral su abrazo a un joven que cruzó la frontera de España

Una fotografía de dos jóvenes abrazándose en una playa de Ceuta, España, ha dado la vuelta al mundo. Se tomó el 18 de mayo cuando un migrante senegalés rompió a llorar frente a una voluntaria de la Cruz Roja.

Un símbolo de humanidad en medio de una crisis sin precedentes entre Madrid y Rabat, con la llegada de más de 8,000 migrantes de forma irregular en 48 horas, entre ellos 1,500 menores. Al menos 5,600 ya han sido devueltos a Marruecos, según cifras del Ministerio del Interior de España.

La imagen, que enseguida se hizo viral, despertó aplausos para la voluntaria española Luna Reyes Segura, de 20 años, pero también una campaña de acoso con comentarios xenófobos y machistas que la ha obligado a cerrar sus redes sociales.

PUBLICIDAD

“Se nota que te gustan las pollas grandes”, “qué harías si te quedas sola con cuatro de ellos, seguro que te violan” o “nos lo venden como un gesto de humanidad, pero él solo quiere papeles”, puede leerse en algunos de los mensajes que ha recibido en estos días, según narra RTVE.es, el portal de la radiotelevisión pública española, el único medio con el que ha querido hablar.

La joven no quiere prodigarse en la prensa porque considera que “dar un abrazo a alguien que pide socorro es lo más normal del mundo”. "Solo le di un abrazo", repite en la entrevista.

El migrante fue expulsado poco después del abrazo

Entre lágrimas, Luna Reyes lamenta no haber podido impedir que el joven subsahariano, del que no se sabe el nombre, haya sido expulsado. Las fuerzas de seguridad españolas lo devolvieron a territorio marroquí poco después del abrazo.

“Lloraba, le tendí la mano y me abrazó. Se pegó a mí como una lapa. Ese abrazo fue su salvavidas”, relata la voluntaria.

Y continúa: “Me hablaba en francés y enumeraba con los dedos de la mano. Yo no entendía nada, pero estoy convencida de que estaba enumerando los amigos que ha perdido en el camino”.

Además de gestionar el impacto emocional de ese momento, ahora Luna Reyes enfrenta un acoso de carácter machista y racista a través de las redes sociales.

“En las redes han visto que mi novio es negro, no paran de insultarme y me dicen cosas horribles con comentarios racistas”, explica.

Tras conocerse ese acoso, surgió, también en redes sociales como Twitter, una campaña con las etiquetas #OrgulloLuna y #GraciasLuna

Cientos de personas cruzaron este lunes y martes desde la localidad costera marroquí de Fnideq para cruzar hacia Ceuta, el territorio español ubicado del lado del continente africano 
<b>en una avalancha de inmigrantes sin precedentes que busca llegar a España</b>.
<br>
En 24 horas las autoridades 
<b>calcularon el cruce de 5,000 personas (un tercio de ellas menores) y un número menor de subsaharianos</b>. De acuerdo con la agencia EFE, todos se dirigían hacia la frontera con Ceuta con el objetivo de atravesar hacia el lado español ante la aparente indiferencia y escaso control de las fuerzas de seguridad marroquíes.
<b>En el lado español, militares detuvieron a decenas de personas en la playa</b>. Alrededor de las 22:30 horas locales del lunes se realizó un despliegue moderado de policías y fuerzas del orden para intentar alejar de la carretera principal a las miles de personas que se congregaban en el lugar, aunque esto no frenó los intentos para atravesar hacia el lado español.
La ciudad de Fnideq se encuentra en el norte de Marruecos, en la costa del Mediterráneo. 
<b>Hace frontera con Ceuta, el territorio enclave español ubicado del lado de África</b>. Se le conoce también con el nombre español de 
<b>Castillejos</b>. Ha sido uno de los puntos más importantes de llegada de migrantes, principalmente subsaharianos.
La carretera que va hacia el puesto fronterizo de Ceuta por el lado marroquí llevaba más de un año cerrada por la crisis del coronavirus. Sin embargo, 
<b>el lunes corrió el rumor de la retirada de las fuerzas de seguridad en el puesto fronterizo en el lado marroquí</b>. El relajamiento de las medidas hizo que llegara una gran cantidad de personas, quienes abrieron la valla que separa los dos territorios.
Quienes no pudieron cruzar a través de la cerca, decidieron tomar varias embarcaciones de la guardia costera en la playa de Fnideq con la intención de cruzar a Ceuta. El acontecimiento ha ocurrido después de que 
<b>Marruecos</b> 
<b>decidiera levantar sus</b> 
<b>controles migratorios</b>, lo que ha tensado la relación con España.
Las personas desbordaron las embarcaciones al punto de que no podían moverse del lugar. 
<b>La desvandada en Fnideq es un suceso inédito en España</b>. El récord de personas intentando cruzar se había batió el
<b> </b>7 y 8 de noviembre de 2020 en Canarias, cuando entraron 
<b>1,500 personas en un día</b>.
A la izquierda de la imagen se observa el muro de espigón que divide el territorio marroquí del español. 
<b>Decenas de personas cruzaron a nado hacia el otro lado este martes</b>. La gente no ha parado de llegar a Fnideq, donde el movimiento no cesó ni siquiera en la noche, pese al toque de queda impuesto en el país como prevención contra el coronavirus.
En la imagen se observa a los migrantes que llegaron nadando a Ceuta. En la playa descansan mientras los soldados españoles hacen guardia. Para tratar de controlar la situación, el Gobierno de España ha desplegado este martes 
<b>varias unidades del Ejército de Tierra a las naves del Tarajal</b>, donde se concentra a buena parte de los inmigrantes, especialmente los menores de edad.
Las fuerzas de seguridad españolas 
<b>lanzaron gas lacrimógeno</b> a través de una valla fronteriza mientras los migrantes marroquíes se reunían en Fnideq para intentar cruzar la frontera de Marruecos al enclave español de Ceuta.
Una mujer de Fnideq relató a la agencia EFE que su hijo de 15 años entró en Ceuta como quien comete una travesura, acompañado de sus amigos. "En cuanto me avisaron mis vecinas, fui corriendo hasta la playa de Ceuta para buscar a mi hijo", narró. Los soldados españoles comenzaron a regresar a las personas que cruzaron este martes.
El abogado Raed González explica que los inmigrantes no deben sentir temor de acudir a los centros médicos ante las sospechas de contagio. Asegura que allí no les harán preguntas relacionadas con su estatus migratorio. Habla sobre los posibles impactos de las medidas de seguridad para personas con visas de turistas o de tránsito.
1 / 12
Cientos de personas cruzaron este lunes y martes desde la localidad costera marroquí de Fnideq para cruzar hacia Ceuta, el territorio español ubicado del lado del continente africano en una avalancha de inmigrantes sin precedentes que busca llegar a España.
Imagen ANTONIO SEMPERE/AFP via Getty Images
En alianza con
civicScienceLogo