Detienen a un sospechoso por el misterioso crimen de cuatro universitarios de Idaho
La persona fue detenida en el condado de Monroe, en el noreste de Pennsylvania, bajo una solicitud de extradición a Idaho, donde enfrenta cargos de asesinato en primer grado, de acuerdo con la documentación legal.
Por:
Univision
Videos de las cámaras corporales de policías en Idaho muestran a varios uniformados acudiendo dos meses antes de la tragedia a la casa donde fueron hallados los cuerpos sin vida de los cuatro estudiantes. En dicha ocasión, los oficiales fueron hasta la propiedad porque alguien los llamó para quejarse del ruido. Entretanto, otro joven que vivió hace un tiempo en esa vivienda contó que muchos estudiantes tenían acceso a ese lugar. Más noticias en Univision.
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El documento de arresto presentado en el Tribunal del Condado de Monroe, en el noreste de Pennsylvania, identifica a la persona como Bryan Christopher Kohberger, de 28 años, quien fue detenido para ser extraditado a Idaho con una orden de arresto por asesinato en primer grado.
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Un oficial confirmó el arresto a The Associated Press bajo condición de anonimato porque no podía discutir públicamente los detalles de la investigación antes de un anuncio formal que se espera más tarde para el viernes.
Un estudiante de doctorado del mismo nombre figura en el Departamento de Justicia Penal y Criminología de la Universidad Estatal de Washington, que se encuentra a poca distancia de la Universidad de Idaho.
Se espera que la policía de Moscow, Idaho, la pequeña ciudad de 25,000 habitantes donde ocurrió el crimen, ofrezca una rueda de prensa la tarde del viernes para dar más detalles sobre el arresto.
El crimen está siendo investigado por la policía local, con apoyo de agentes estatales y del Buró Federal de Investigaciones (FBI).
Las víctimas identificada como Madison Mogen, Kaylee Goncalves, Ethan Chapin y Xana Kernodle, quienes tenían entre 20 y 21 años de edad, fueron asesinadas a cuchilladas. Según el médico forense todos los fallecidos recibieron múltiples cuchilladas y no se halló evidencia de abuso sexual.
Las autoridades sospechan que los crimenes se cometieron mientras las víctimas dormían, aunque algunas de ellas trataron de defenderse, según revelaron las autopsias realizadas por la medicatura forense local.
Las tres jóvenes asesinadas residían en la casa en la que ocurrió el crimen, junto a otras dos estudiantes, identificadas como Dylan Mortensen y Bethany Funke, quienes de acuerdo con las autoridades estaban en el primer piso de la residencia cuando ocurrió el crimen. La policía ha dicho que no cree que estén involucradas en el crimen.
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Chapin, quien según la universidad era un estudiante de primer año en administración de recreación, deportes y turismo originario de Mount Vernon, Washington, y era el novio de Kernodle, no residía en el lugar de los crímenes.
Los oficiales acudieron a la vivienda en 1122 King Road el domingo 13 de noviembre a las 11:58 am luego de recibir una llamada de emergencia que reportó que había una persona inconsciente. La policía no ha dicho quién llamó a las autoridades, pero según CNN no fueron las otras dos amigas.
Cuando llegaron los agentes encontraron a Kaylee, Madison, Xana y Chapin muertos en el interior de la vivienda. Aún se desconoce por qué si Mortensen y Funke estaban en la casa no avisaron antes a las autoridades.
Una de las víctimas llamó 7 veces a su novio
Goncalves, otra de las víctimas, llamó a su novio Jack DuCoeur al menos siete veces en la madrugada del 13 de noviembre, de acuerdo a lo dicho por su hermana Alivea en una entrevista con The New York Times, quien también dijo que DuCoeur no contestó porque estaba dormido.
La primera llamada ocurrió a las 2:26 am, y luego se registraron seis llamadas más en la siguiente media hora.
La hermana de la víctima dijo que el novio estudia también en la Universidad de Idaho y era amigo de la infancia de la víctima. Estuvieron juntos durante años, pero hace poco habían decidido terminar la relación de forma amigable, le dijo al medio. Agregó que su familia está segura de que DuCoeur " no tuvo nada que ver con esto".
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Inicialmente las autoridades firmaron que se trataba de un "crimen pasional" y que no creían que había peligro para el público. Más tarde se retractaron y admitieron que "no se puede decir que no hay una amenaza para la comunidad", ni estar seguros del motivo.
"Como hemos dicho, por favor manténganse vigilantes, reporten cualquier actividad sospechosa y estén pendientes de sus alrededores en todo momento", dijo el jefe de la policía James Fry en una rueda de prensa realizada el miércoles.
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Los llamados “
cold cases”, o casos sin resolver, han conseguido una nueva audiencia durante este año gracias a las series, películas y podcasts que se han publicado durante 2022 dedicados a seguir los pasos de quienes cometieron crímenes que, aunque hayan pasado décadas, continúan sin resolverse. Estos son algunos que, pese a los esfuerzos de las autoridades, permanecen impunes.
