MCLEANSVILLE, Carolina del Norte.- El video de la detención de un feligrés hispano ha desatado miles de comentarios y el repudio de la comunidad, quienes condenan este tipo de acciones en los centros religiosos.

La familia de Félix Arias vivió momentos de angustia cuando agentes de la Oficina del Alguacil del condado de Guilford ingresaron a la Iglesia Bautista Puerta Abierta, al noreste de Greensboro, y se lo llevaron esposado por supuesto allanamiento de morada.

“Tenemos derecho a estar aquí y que nos escuchen. Denos las razones por las que nos está corriendo”, clamaban familiares.

Arias dijo en entrevista a Univision 40 que el pastor de la congregación le pidió que no regresara a la iglesia, pero al desconocer las razones decidió asistir al servicio dominical.

“El pastor no nos dio ningún motivo o explicación sobre por qué la policía me detuvo”, dijo Arias a Univision 40.

Menores presenciaron la detención

A casa llena estaba la iglesia bautista ubicada en el 2028 de Huffine Mill Rd, en McLeansville, cuando tres agentes interrumpieron el servicio por una supuesta denuncia del pastor.

Con un bebé entre brazos y la presencia de menores, los oficiales custodiaron al hispano hasta la salida de la iglesia. Familiares de Arias pedían a gritos que se hiciera justicia.

“Me sentí triste porque él es miembro desde hace muchos años”, confesó Benjamin, hijo de Arias.

“Ni me acercaría a esa iglesia”

Alberto, un residente de Greensboro, fue una de las miles de personas que vio el video en las redes sociales. “Con eso que pasó ni me acercaría a esa iglesia”, exclamó.

Univision 40 se comunicó con la Oficina del Alguacil del condado de Guilford, quienes respondieron que no emitirían una declaración en este momento.

Por su parte, la Iglesia Bautista Puerta Abierta dijo a Univision 40 que darían a conocer su posición de lo sucedido.

Arias no podría regresar a la iglesia debido a una orden de alejamiento en su contra.

Acusan al pastor de abuso sexual infantil

Las Oficinas del Alguacil de los condados de Rockingham y Guilford, en conjunto con agencias federales, anunciaron el viernes que el pastor de dicha congregación es acusado de abuso sexual infantil.

Albert López, de 54 años y residente de Greensboro, enfrenta 13 cargos por violación en segundo grado, delito sexual y libertades indecentes con un niño. Los delitos habrían sido cometidos desde 2011.

La Oficina de Investigaciones de Carolina del Norte, el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) y el Grupo de Trabajo de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) trabajan en el caso.

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