Absuelven a un hombre que pasó 37 años en prisión por una violación y un asesinato que no cometió

El testimonio de un informante en prisión y una prueba de mordida fueron claves para sentenciar a Robert DuBois. Las pruebas de ADN, en cambio, demostraron la inocencia de este hombre que ingresó en prisión a los 18 años y sale de ella con 55.

Por:
Jorge Macías.
Por 36 años, Rafael Ruiz trató de demostrar su inocencia sobre un asalto sexual que ocurrió en 1984 y del cual finalmente fue exonerado. La organización The Innocence Project destaca que su condena se debió a varios errores, y que una prueba reciente de ADN pudo dejar en claro su inocencia.
Video Hispano pasó 25 años en prisión por un crimen que no cometió: así probaron su inocencia

Después de 37 años de en prisión, Robert Earl DuBoise, un hombre de Florida fue absuelto formalmente el lunes de los delitos de homicidio en primer grado y agresión sexual de una mujer de Tampa, Florida, en 1983, sobre la base de nuevas pruebas de ADN.

Gracias al trabajo de expertos legales del organismo sin fines de lucro The Innocence Project, Robert DuBoise, de 55 años, se convirtió en el último caso de un hombre que es liberado tras cumplir una larga condena por un crimen que no cometió.

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DuBoise fue condenado en un juicio donde el principal testimonio en su contra fue el de un informante que se encontraba en la cárcel y el análisis de marcas de mordida.

Robert Earl DuBoise fue liberado de prisión el 27 de agosto después de que se hicieran nuevas pruebas de ADN del kit de violación de la víctima que se pensaba que había sido destruido. Los resultados lo excluyeron como el agresor.

La Unidad de Revisión de Condenas (CRU) de la Fiscalía Estatal del 13° Circuito Judicial anunció que, ante la injusticia ocurrida en este caso y la descalificación del análisis de mordidas como técnica científica confiable, colaborarán con The Innocence Project para revisar los casos del condado de Hillsborough donde utilizaron este tipo de evidencia para asegurar una condena. Este es el primer tipo de auditoría que realiza una CRU.

El lunes, una audiencia ante el juez del condado de Hillsborough, Christopher Nash, ordenó que se eliminaran las condenas y borró a DuBoise del registro estatal de delincuentes sexuales.

Notas Relacionadas


“Este tribunal le ha fallado durante 37 años”, dijo el juez Nash durante la audiencia remota, según el reporte del diario The Guardian. “Hoy, finalmente ha tenido éxito”

DuBoise fue condenado en 1983 por el asesinato de Barbara Grams, de 19 años, quien fue violada y golpeada hasta la muerte mientras caminaba a casa desde su trabajo en un centro comercial de Tampa. El cuerpo de la mujer fue encontrado detrás de la oficina de un dentista de Tampa, Florida. DuBoise fue condenado a la pena de muerte y después volvió a ser sentenciado a cadena perpetua. En 1988 presentó una apelación a su condena.

En la audiencia del lunes, el testimonio de un experto mostró que se determinó que la evidencia de marcas de mordida en la mejilla izquierda de la víctima utilizada en el juicio no era confiable: la policía usó cera de abejas para tomar una impresión de los dientes de DuBoise, y el ADN mostró de manera concluyente que no era sospechoso en el asalto de Grams.

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El testimonio del informante de la cárcel también fue desacreditado.

“Han pasado 37 años”, dijo el fiscal estatal del condado de Hillsborough, Andrew Warren. “Finalmente estamos corrigiendo esto, hoy”.

Otros casos de análisis forense ‘defectuosos” serán reexaminados

Susan Friedman, la abogada de Innocence Project que representa a DuBoise, dijo a través de un comunicado que “Robert finalmente tiene algo de justicia; su fuerza coraje y determinación durante casi cuatro décadas ha hecho posible este día”.

Añadió que tanto ella como DuBoise sabían que la condena de Robert se basaba en dos causas principales de condenas erróneas: el testimonio de un informante en la cárcel y un análisis forense defectuoso.


“Y, hoy en día existe una evidencia científica indiscutible que prueba su inocencia”, añadió. “Agradezco a la Unidad de Revisión de Condenas por su colaboración en este caso y espero colaborar en el reexamen de otros casos de marcas de mordida para identificar otras condenas erróneas que resultaron del uso de esta evidencia altamente poco confiable”.

En breves declaraciones durante la audiencia, DuBoise, quien tenía 18 años en el momento del crimen, dijo que “tuve muchos obstáculos en mi camino”.

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Una vez que fue liberado de la Institución Correccional Hardee en Florida, el hombre se reunió con su madre y su hermana. Ha estado viviendo en un centro de Tampa para personas encarceladas injustamente y ha dicho que debe aprender las formas de vida moderna, desde comprar en Walmart hasta usar un iPhone.

El fiscal estatal Andrew Warren dijo que su oficina estaba llevando a cabo una revisión con The Innocence Project de los casos en el área de Tampa en los que las condenas se basaron en gran medida en pruebas de marcas de mordidas ahora desacreditadas.

"Las condenas injustas erosionan los cimientos de nuestro sistema de justicia. Durante 37 años, hemos tenido a un hombre inocente encerrado en prisión, mientras que el verdadero perpetrador nunca fue responsabilizado por este crimen atroz", dijo el fiscal estatal Warren, el día de la liberación de DuBoise. "La familia de la víctima, Barbara Grams, merece tener la verdad, y esta nueva evidencia ayuda a revelar esa verdad a todos nosotros".

Una analista forense de ADN, Nancy Wilson, dijo que dos personas estuvieron involucradas en el asalto de Grams, pero ninguno de ellos era DuBoise. El asesinato volverá al expediente sin resolver.

Incentivo para los soplones

“Los testimonios poco confiables de los mismos reclusos es una práctica de lo más común de lo que uno pudiera pensar”, dijo a Univision Noticias, el abogado criminalista Luis Carrillo. “Bastaría recordar el encubrimiento de los fiscales del condado de Orange sobre el uso indebido de informantes”.

“Los soplones que hay en las cárceles piensan que culpando a otros y sacándoles declaraciones e informando a las autoridades les ayudará a salir más pronto a ellos mismos”, dijo el abogado Carrillo. “Para mí, que esto suceda en EEUU no es una novedad, porque EEUU no es un país justo ni equitativo en la impartición de justicia; no hay igualdad y la justicia es un mito, aunque le digan al mundo que este es un país regido por la ley”.

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De acuerdo con The Innocence Project, el testimonio de informantes de la cárcel ha desempeñado un papel principal en el 17% de los 375 casos de exoneración basados en ADN. La promesa o expectativa de recibir indulgencia u otros beneficios por su testimonio crea un fuerte incentivo para que estos testigos mientan.

“En muchas condenas erróneas, como la de DuBoise, estos beneficios proporcionados a cambio de su testimonio nunca se revelan”, dijo la abogada Friedman.

Mario Victoria Vásquez (35) antes de ser encarcelado en 1998. Su hijo tenía dos años menos que la niña víctima de abuso sexual 
<a href="https://www.univision.com/noticias/criminalidad-y-justicia/la-pesadilla-de-este-condenado-inocente-hispano-no-termina-al-salir-de-la-carcel?123=">por la que lo acusaron de violación.</a>
Entre la cadena de errores en el juicio, se demostró que la niña fue manipulada para exculpar a su tío y su propio padre e inisitir en que 'Mario' la había tocado. Le presentaban pruebas de reconocimiento como la de la foto, con la imagen de Mario victoria en el centro y de mayor tamaño. Un experto determinó que para esa edad ella no diferenciaba la verdad de la fantasía. Tampoco presentaron pruebas biológicas.
Estuvo en seis cárceles distintas en Wisconsin a lo largo de 16 años y seis meses. Una de ellas la denomina "Lo peor de lo peor. Puedes leer la historia completa de Mario Victoria 
<b><a href="https://www.univision.com/noticias/criminalidad-y-justicia/la-pesadilla-de-este-condenado-inocente-hispano-no-termina-al-salir-de-la-carcel?123=">aquí.</a></b>
Mario Victoria asegura que en la cárcel conoció a varios inocentes, así como otros que cometieron delitos terribles. EStudios calculan que 4.1% de los presos en EEUU son suceptibles a ser exonerados.
El 30 de enero de 2015, Mario Victoria salió en libertad. El juez sentenció "este hombre ya ha sufrido suficiente".
Al salir, volvió a celebrar los triunfos de los 'Packers' (equipo de fútbol de Wisconsin) con su hijo James Victoria.
Con su nieta, hija de su segundo hijo James.
El equipo de estudiantes de la escuela de leyes de la Universidad de Wisconsin que coordinó 
<a href="https://www.univision.com/noticias/criminalidad-y-justicia/quiero-defender-a-los-hispanos-presos-en-todo-el-pais-cristina-borde-la-abogada-que-saca-de-la-carcel-a-latinos-inocentes">la abogada Cristina Bordé</a> (a la derecha de Mario), del Proyecto de Exonerados que lo ayudó a salir de la cárcel. Foto del 11 de febrero de 2015 cuando el juez anuló el juicio y los fiscales dijeron que no presentarían más cargos para un nuevo proceso por falta de pruebas.
Con Cristina Bordé la abogada hispana que coordinó el equipo de defensa y que dos años después abrió el Proyecto de Exonerados Latinos de Wisconsin.
La noche de su liberación familiares y amigos fueron a buscarlo a las puertas de la corte en Green Bay. Este fue el abrazo que le dio su hijo James, ya de 21 años.
Durante un poco más de seis meses luego de su excarcelación, Mario Victoria intentó rehacer su vida familiar con su exesposa Darcy Martínez (de quien se divorció estando en prisión) y su hijo.
La última cárcel donde estuvo fue en Fox Lake Correctional Center. Antes pasó cuatro años en una de máxima seguridad en la que no habló con nadie y hacía sus necesidades dentro de la celda. "Me dediqué a contar rayitas y huequitos en las paredes... había noches que no podía dormir porque otros presos gritaban". Al salir no ha recibido terapia psicológica.
Mario Victoria ha trabajado en seis distintos restaurantes desde que salió de prisión. Pero ahora lo hace en una fábrica de gabinetes de cocina. Es un trabajo que no le gusta, porque sueña con recibir una buena compensación económica del estado por ser exonerado y abrir su propio restaurante.
El dueño de la empresa donde trabaja le dijo un día que 
<a href="https://www.univision.com/noticias/criminalidad-y-justicia/la-pesadilla-de-este-condenado-inocente-hispano-no-termina-al-salir-de-la-carcel">buscando en Internet se enteró de su tiempo en prisión</a>. Mario Victoria no tiene una carta de perdón ni que explique que fue un error, una injusticia, lo que el estado cometió con él. Eso lo limita al buscar trabajo.
Fue jefe de mesas en el restaurante familiar Victoria, en Green Bay. En eso trabajaba cuando lo encerraron.
A finales de septiembre de 2018 volvió al Victoria, el restaurante que soñaba comprar con su indemnización pero justo en esa visita se enteró de que acababa de ser vendido.
Mirando por la ventana hacia dentro del restaurante Victoria y recordando los buenos tiempos "sirviendo tomaditas y hablando con la gente, que es lo que a mi me gusta", dijo.
Tres años después de su liberación, volvió a la corte de Green Bay para recordar cómo fue el juicio y las cosas que vivió allí.
En el camino entre Green Bay y Madison, la capital de Wisconsin. Él no tiene vivienda ni carro, pero un amigo le presta uno para trasladarse al trabajo y un sobrino con serios problemas de alcohol le dio posada temporalmente.
En el restaurante Maldonado de su compadre Juan, que lo visitó en la cárcel y lo ayuda en estos días duros en los que trata de reconstruir su vida.
Mario Victoria quiere que el estado le de una recompensa económica por los años que pagó de injusta prisión. Pero en este momento, Wisconsin es el estado con el monto más bajo en compensaciones para exonerados. Por eso espera a que aprueben una reforma a la legislación que aumente los montos y establezca ayudas sociales, de salud y capacitación para los exonerados como él.
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Mario Victoria Vásquez (35) antes de ser encarcelado en 1998. Su hijo tenía dos años menos que la niña víctima de abuso sexual por la que lo acusaron de violación.
Imagen Archivo Mario Victoria
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