En la batalla de presidentes en Venezuela: ¿Cuánto tiempo puede resistir Maduro?

Aunque la presión internacional aumenta día a día, la historia sugiere que los pronósticos de la rápida caída de Maduro pueden ser lamentablemente exagerados.

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Por:
David C Adams.
El gobernante Venezolano, Nicolás Maduro, participa en un ejercicio militar en Valencia, Venezuela, el 27 de enero de 2019.
El gobernante Venezolano, Nicolás Maduro, participa en un ejercicio militar en Valencia, Venezuela, el 27 de enero de 2019.
Imagen Palacio de Miraflores / a través de Reuters

No es exactamente territorio desconocido, pero desde 1994, un gobierno en este hemisferio no se encontraba tan aislado.

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El gobierno militar de facto en Haití, el cual derrocó al presidente Jean Bertrand Aristide en un sangriento golpe de estado en 1991, se aferró al poder durante tres años a pesar de un embargo económico que causó una drástica escasez de alimentos y gasolina. Antes de eso, el caudillo panameño, el general Manuel Noriega, también desafió a la comunidad internacional a pesar de un embargo que paralizó la economía.

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En otras partes del mundo, Saddam Hussein en Irak y Muamar Gadafi en Libia, también resistieron durante años bajo severas sanciones económicas.

Estos cuatro casos solo se resolvieron mediante una intervención militar extranjera.

En el caso de Haití, el presidente Bill Clinton envió 20,000 tropas estadounidenses para restaurar el poder de Aristide bajo los auspicios de una intervención respaldada por las Naciones Unidas. En Panamá, el presidente George H.W. Bush actuó de forma unilateral en 1989, ordenando el despliegue de una fuerza de invasión de 28,000 soldados estadounidenses para derrocar a Noriega.

Además de su eventual derrocamiento, las lecciones son claras: los regímenes repudiados internacionalmente son, por su naturaleza ilegal, extremadamente difíciles de sacar del poder. El aislamiento diplomático y las sanciones económicas no son una solución mágica. Cuba ha sobrevivido al embargo estadounidense por más de 50 años, mientras que Daniel Ortega, el presidente de Nicaragua, enfrenta la condena internacional y las sanciones estadounidenses por segunda vez en cuatro décadas.

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Esto sucede especialmente en el caso de determinados enemigos ideológicos que, como el venezolano Nicolás Maduro, disfrutan de una base de partidarios pequeña, pero leal y, a menudo, bien armada, y preparada para usar tácticas represivas para someter a la población.

Por lo tanto, los pronósticos del inminente derrocamiento de Maduro podrían ser solo ilusiones. Sin duda, Maduro desconoce la reacción internacional a su reelección fraudulenta y su toma de posesión para un nuevo mandato el pasado 10 de enero . Citando un vacío de poder constitucional, el presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Juan Guaidó, de 35 años de edad, se juramentó presidente interino, obteniendo instantáneamente el respaldo de numerosos gobiernos extranjeros. Solo Rusia, Cuba, Bolivia, Irán y algunas islas del Caribe han permanecido firmemente a su lado.

Según informes, Rusia envió un equipo de contratistas militares privados para reforzar la seguridad de Maduro. Venezuela es un importante comprador de tecnología militar rusa, entre la cual se incluyen tanques, armas pequeñas y otros equipos, y Rusia ha invertido miles de millones de dólares en la quebrada empresa petrolera paraestatal PDVSA

Al menos hasta ahora, el alto mando militar de Venezuela se ha mantenido leal a Maduro, aunque hay fisuras en los rangos más bajos y medios que han dado lugar a varias rebeliones abortadas en los últimos meses. Para garantizar esa lealtad, Maduro también puede contar con su aliado socialista, Cuba, que tiene la reputación de tener una vigilancia y una presencia de contrainteligencia sofisticadas, a la cual muchos le acreditan la vigilancia —y eliminación— de la disidencia militar.

En una entrevista, el gobernante Maduro aseguró que la juramentación de Guaidó fue fuera de la Constitución, lo cual significa un golpe de estado. Minutos después, el presidente encargado denunció a través de redes sociales la represión de policías y militares desde que tomó juramento, la cual ha causado la muerte de 29 personas y cientos de detenidos.
Video Incrementa la lucha por el poder en Venezuela y la batalla de discursos entre Maduro y Guaidó

Presión diplomática


Todo esto plantea la interrogante, ¿qué significa la presión diplomática en el mundo de hoy? ¿Es simplemente simbólica? A menos que el Ejército venezolano respalde la medida de Guaidó, la mayoría de los expertos coincide en que es poco probable que Maduro sea derrocado. En cambio, la lucha por el poder "podría desencadenar una mayor represión", según el International Crisis Group (ICG), cuyo experto residente en Caracas, Phil Gunson, es un veterano observador de la situación venezolana.

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"Si Maduro mantiene el apoyo de la Fuerza Armada, es casi seguro que intentará mantenerse en el poder y reprimir violentamente a quienes lo desafían", dice Gunson. "En ese momento, la pelota volverá a la cancha de los partidarios extranjeros de Guaidó. Entonces podrían enfrentar el incómodo dilema de hacer muy poco y lucir impotentes o exponerse a un desastre al intervenir militarmente".

Sin embargo, en el caso de Venezuela, el país con las mayores reservas de petróleo del mundo, se pueden ejercer otras presiones financieras.

La economía del país está en caída libre, y se prevé que la hiperinflación alcanzará la astronómica cifra de 10 millones por ciento en 2019. Más de tres millones de personas han huido de la crisis política y económica desde 2015, según la ONU, debido a la falta de empleos, alimentos y servicios de salud pública, así como a la represión política.

En los últimos dos años, Estados Unidos ya ha impuesto sanciones a 75 altos funcionarios del gobierno de Maduro, además de restringir el acceso de Venezuela a los mercados de deuda estadounidenses y los negocios turbios en el comercio de oro.

Washington tiene otra herramienta : las lucrativas importaciones de petróleo que representan una parte importante de los ingresos en divisas de Venezuela. La Casa Blanca se ha resistido a recortar la compra de petróleo a Venezuela por temor a la interrumpción de las operaciones en las refinerías estadounidenses en estados de mayoría republicana a lo largo de la costa del Golfo, así como a provocar una catástrofe humanitaria aún mayor en Venezuela, algo que Maduro podría explotar.

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El lunes, el Departamento del Tesoro de Estados Undos emitió nuevas sanciones contra PDVSA, bloqueando sus activos y exigiendo que todos los pagos se depositen en una cuenta bloqueada para mantener los fondos fuera de las manos de Maduro.

Esto plantea otra cuestión ideológica. El gobierno de Donald Trump tendrá que actuar con cuidado para evitar inflamar las tendencias nacionalistas. Al igual que en Cuba, el régimen socialista de Venezuela se construyó sobre una base de hostilidad ideológica contra el "imperialismo" estadounidense. Actualmente, Maduro está intentando avivar ese fuego de cualquier forma posible. "Esto no es más que un golpe de Estado, ordenado, promovido, financiado y apoyado por el gobierno de Estados Unidos", les dijo Maduro a los periodistas el viernes en el palacio presidencial. "Tienen la intención de poner un gobierno títere en Venezuela, destruir el Estado y tomar el control colonial del país", añadió.

El senador republicano Marco Rubio ve la situación con optimismo a favor de la oposición y asegura que quienes viven del robo de dinero del petróleo en Venezuela tienen los días contados. Varios venezolanos en el exilio, como el exalcalde de Caracas Antonio Ledezma, creen que la mancomunada acción de 26 países que ya no reconocen a Maduro como presidente ha sido crucial para la permanencia del oficialismo.
Video ¿Logrará la presión internacional y las protestas derrotar el gobierno de Maduro sin necesidad de intervención militar?

Intervención militar


Aunque muchos venezolanos consideran que la intervención militar estadounidense es su única salvación, podría ser una bendición para Maduro, pues uniría las fuerzas populares bajo la bandera. Pero una intervención militar tampoco sería una victoria segura. Venezuela no es Panamá ni Haití. Aunque su Ejército no está probado en combate, es una fuerza grande y bien equipada con cuarteles repartidos por todo el país. Además, el ex embajador de Estados Unidos y experto en América Latina, John Feeley, observó: "Venezuela ya se encuentra en una situación tan caótica que cualquier fuerza invasora se vería obligada por razones humanitarias a permanecer como una fuerza de ocupación para mantener el orden y brindar servicios gubernamentales interinos hasta que el gobierno de Guaidó fuera capaz de asumir esas responsabilidades".

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Además, "la administración Trump está retirando la presencia militar en Siria y Afganistán; creo que es poco probable que envíen nuevas tropas a algún lugar durante mucho tiempo", agregó.

Evan Ellis, profesor de investigación sobre América Latina del War College Strategic Studies Institute del Ejército de Estados Unidos, advierte que una intervención militar estadounidense "no solo causaría pérdida de vidas, sino que también se arriesgaría a fragmentar el ya frágil equilibrio entre entidades criminales y de otra índole, lo cual desataría una ola de la violencia y de refugiados que superaría con creces la tragedia que se ha presenciado hasta la fecha".

Aunque los militares venezolanos podrían ser derrotados rápidamente en una convencional, Maduro podría escapar y montar una prolongada resistencia en la clandestinidad.

Además, cualquier esfuerzo por conseguir el respaldo de la ONU para una fuerza de intervención extranjera probablemente sería bloqueado en el Consejo de Seguridad por Rusia y China.

Por lo tanto, para evitar la potencial reacción adversa a un embargo petrolero, la Casa Blanca parece estar explorando una estrategia para redirigir los pagos del petróleo venezolano —y quizás de oro— hacia manos de la incipiente administración de Guaidó para ayudarlo a fortalecer su intento de tomar el control.

Ya ha autorizado 20 millones de dólares en ayuda humanitaria que planea canalizar a través de la Asamblea Nacional. Pero no está claro cómo se entregará ese dinero, a menos de que se pueda encontrar una manera de evitar el control de Maduro sobre el sistema financiero estatal.

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"Después de haber atizado el fuego, Estados Unidos y los gobiernos democráticos afines (...) deben estar listos para proteger y apoyar a largo plazo a los venezolanos que están valientemente defendiendo el restablecimiento de un gobierno democrático en Venezuela", dijo Ellis. Washington ha indicado hasta el momento que respaldará a Guaidó en todo momento, y desafió la orden de Maduro de expulsión de todos los diplomáticos estadounidenses del país.

<b>Juan Guaidó.</b> Ingeniero y político de 35 años, presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela. Invocó varios artículos de la Constitución venezolana para decretar “usurpador” a Nicolás Maduro 
<a href="https://www.univision.com/noticias/crisis-en-venezuela/sigue-aqui-la-reunion-del-consejo-de-seguridad-de-la-onu-convocada-por-eeuu-para-discutir-la-situacion-en-venezuela">y se proclamó presidente encargado del país con el fin de sustituir a gobierno y convocar elecciones libres.</a>
<b>Nicolás Maduro.</b> Sucesor de Hugo Chávez en la presidencia de Venezuela después de su muerte en 2013. Ganó las elecciones de 2014 y se reeligió en 2018 en unos comicios considerados ventajosos y fraudulentos por la oposición y varios países. El 10 de enero de 2019 tomó posesión de un nuevo mandato hasta 2025, lo que activó el movimiento parlamentario para desconocerlo como presidente, liderado por Juan Guaidó.
<b>Donald Trump. </b>Fue el primero en reconocer a Guaidó como presidente legítimo de Venezuela después de su proclamación el 23 de enero de 2019. Después de que Maduro ordenara la salida de diplomáticos estadounidenses de Venezuela, el secretario de Estado de EEUU Mike Pompeo dijo que solo seguirán las directrices de Guaidó, el “presidente legítimo”, y que permanecerán en el país sudamericano. Varios funcionarios y exfuncionarios venezolanos han sido sancionados en EEUU durante la administración Trump y sus propiedades en el país han sido confiscadas.
El consejero de Seguridad Nacional del presidente Donald Trump, John Bolton, anunció nuevas sanciones contra Venezuela el 28 de enero y, al descuido, mostró en su libreta de apuntes un mensaje inquietante: "5,000 soldados a Colombia".
<b>Carlos Vecchio,</b> encargado de negocios Venezuela. Fue escogido por el parlamento venezolano para que represente al gobierno de Juan Guaidó en Washington DC. En la fotografía junto al vicepresidente Mike Pence, tomada el 29 de enero en la capital.
<b>Mauricio Claver-Carone.</b> Abogado estadounidense de ascendencia cubana. Fue nombrado director del Consejo de Seguridad Nacional para la política de América Latina en agosto de 2018. Es uno de las voces contra el gobierno de Nicolás Maduro en la administración Trump y fue un crítico del compromiso del gobierno de Obama con Cuba y las distensión de las relaciones.
<b>Luis Almagro.</b> El secretario general de OEA, Luis Almagro, felicitó el 23 de enero de 2019 a Guaidó, casi inmediatamente después de que este se juramentó como presidente interino. En una reunión extraordinaria del Consejo Permanente de ese organismo para analizar la crisis en Venezuela, un grupo de 16 países –entre ellos Argentina, Canadá, Brasil, Estados Unidos– se pronunciaron a favor de Guaidó en su pulso por el poder con Nicolás Maduro.
<b>Vladimir Padrino López.</b> El ministro de Defensa venezolano respaldó a Maduro y denunció un supuesto "golpe de Estado" apoyado por naciones extranjeras, al día siguiente de la proclamación de Guaidó. En la fotografía se observa al líder del alto mando militar venezolano tomando champaña junto a Vladimir Putin cuando lo visitó en el Kremlin, en febrero de 2018.
<b>Vladimir Putin.</b> El 24 de enero el gobierno ruso indicó en un comunicado de la cancillería que seguirá respaldando a Nicolás Maduro, al que reconoce como presidente de Venezuela, y aseguró que defenderá sus intereses económicos en ese país suramericano. También acusó a EEUU de querer usurpar el poder en Venezuela con "una injerencia extranjera destructora (...). Es inaceptable. Ello es una vía directa hacia la anarquía y el baño de sangre".
<b>Grupo de Lima.</b> Los gobiernos de Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Honduras, Panamá, Paraguay y Perú reconocieron a Guaidó como presidente encargado de Venezuela para impulsar una transición democrática. En la foto Iván Duque y Jair Bolsonaro, presidentes de Colombia y Brasil, respectivamente, quienes se expresaron en favor del proceso activado por la oposición venezolana desde Davos, Suiza, el propio 23 de enero.
<b>Justin Trudeau. </b>El primer ministro de Canadá expresó su descontento por la toma de posesión para un nuevo período presidencial de Maduro. Minutos después del reconocimiento de EEUU, la canciller canadiense Chrystia Freeland expresó su respaldo a Guaidó como presidente interino de Venezuela. A la salida de un encuentro en Davos (Suiza), Freeland ofreció declaraciones en las que informó que "como parte del Grupo de Lima", la nación que representa, rechaza a Nicolás Maduro y apoya el proceso de transición política que se inició en Venezuela.
<b>Emmanuel Macron.</b> El presidente francés mostró su apoyo al movimiento parlamentario que busca la transición en Venezuela. “Después de la elección ilegítima de Nicolás Maduro en mayo de 2018, Europa apoya la restauración de la democracia. Macron aclamó la valentía de centenas de miles de Venezolanos que caminan por su libertad”. 
<a href="https://twitter.com/EmmanuelMacron/status/1088377353481453568">Así lo escribió en español en su cuenta de Twitter el 24 de enero.</a>
<b>Xi Jinping. </b>El gobierno de China mostró su apoyo a Maduro en un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores. Allí condenaron la "intrusión en asuntos internos" por parte de EEUU en Venezuela. "China apoya los esfuerzos del Gobierno de Venezuela para mantener su soberanía, independencia y estabilidad", afirmó un portavoz chino en una rueda de prensa.
<b>Andrés López Obrador. </b>El presidente mexicano rechazó el apoyo de EEUU a Juan Guaidó y afirmó que su país sólo reconoce como presidente a Maduro. Dijo que la Constitución mexicana establece que la política exterior del país debe estar apegada a los principios de no intervención, autodeterminación de los pueblos y solución pacífica de las controversias. "No es que estemos a favor o en contra de nadie. Estamos por defender los principios constitucionales de la política exterior", afirmó. Dijo que está dispuesto a mediar en Venezuela "si las partes están de acuerdo".
<b>Pedro Sánchez.</b> El presidente de gobierno español aseguró el 26 de enero que España dará a Nicolás Maduro un plazo de 10 días para la convocatoria a unas elecciones libres y transparentes. Si en ese plazo no se llama a un nuevo proceso electoral, Madrid reconocerá a Juan Guaidó como presidente interino del país. El anuncio de Sánchez está alineado con la posición de los 27 países de la Unión Europea que continúan negociando el reconocimiento de Guaidó, aunque ha desconocido la legitimidad de las elecciones que ganó Maduro en 2018, así como el gobierno que inició el pasado 10 de enero.
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Juan Guaidó. Ingeniero y político de 35 años, presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela. Invocó varios artículos de la Constitución venezolana para decretar “usurpador” a Nicolás Maduro y se proclamó presidente encargado del país con el fin de sustituir a gobierno y convocar elecciones libres.
Imagen CARLOS GARCIA RAWLINS/Reuters

¿Amnistía?


Finalmente, ¿quedan incentivos para persuadir a Maduro para que se vaya? Antiguamente, a los tiranos se les permitía escapar con una maleta llena de dinero hacia un exilio dorado en lugares como Panamá.

Ahí es donde terminó el Sha de Irán, así como el general Raoul Cédras de Haití, Abdalá Bucaram de Ecuador y Elías Serrano de Guatemala.

El marco legal internacional moderno dificulta esto, y los grupos de derechos humanos insisten en que se debe hacer justicia por el bien del estado de derecho — y para disuadir a futuros delincuentes. Pero Guaidó parece dispuesto a hacer sacrificios para restablecer la democracia. En una entrevista con Univision, dijo que estaba dispuesto a considerar una amnistía para Maduro bajo una nueva ley aprobada por la Asamblea Nacional que le ofrezca beneficios a "todos los que estén dispuestos a ponerse del lado de la Constitución a recuperar el orden constitucional".


Es imposible predecir si Maduro, o cualquiera de sus partidarios, elegiría esta opción. Sería humillante e, inevitablemente, se consideraría una traición al lema de "socialismo o muerte" de los llamados revolucionarios "bolivarianos" de Venezuela.

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Una salida más ordenada y respetable para Maduro, según muchos expertos, sería una nueva ronda de elecciones supervisadas por la comunidad internacional. Esa parece ser la estrategia favorita de la Unión Europea, así como del Grupo de Lima de 14 países que se creó para encontrar una salida pacífica a la crisis en Venezuela.

"La única solución a la crisis de Venezuela radica en un proceso negociado creíble que conduzca a elecciones libres y justas que les permitan a los venezolanos elegir a sus propios líderes", según una declaración conjunta de tres importantes grupos a favor de la democracia en la región; la Oficina de Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA, por sus siglas en inglés), Conectas Derechos Humanos en Brasil y Dejusticia en Colombia.

"Combinar la presión con la diplomacia creativa es la mejor manera de facilitar un regreso a la democracia", añadieron.

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