El indocumentado que le preparaba la hamburguesa a Trump

Hamburguesas casi quemadas. Así las pedía Trump. Y así se las preparaba un mexicano que trabajaba sin papeles en la cocina del Trump National Golf Club de Westchester, Nueva York.
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Peniley Ramírez
Por:
Peniley Ramírez.
Donaciano Sedano, primero por la izquierda, con el equipo de cocineros del club de golf de Donald Trump en Westchester, Nueva York.
Donaciano Sedano, primero por la izquierda, con el equipo de cocineros del club de golf de Donald Trump en Westchester, Nueva York.
Imagen Cortesía

Donaciano Sedano vivía en Yonkers, Nueva York, en 2005 cuando, según cuenta, leyó junto con un amigo en Internet que estaban solicitando personal en el club de Golf de la familia Trump en Westchester.

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Llenaron sus solicitudes, las enviaron por correo y los llamaron para una entrevista.

Todo parecería un procedimiento estándar, excepto porque tres años antes él había entrado a Estados Unidos cruzando el desierto y no tenía ningún documento de trabajo legal, según su relato

“Les urgía personal para el restaurante. Nos contrataron enseguida”, afirma el cocinero, ahora de 49 años, desde su casa en Puebla, México.

Su caso, inédito hasta ahora, se suma al de un número creciente de inmigrantes hispanos que en los últimos meses han relatado a los medios de comunicación cómo fueron contratados por la Organización Trump sin contar con documentos en regla y con el consentimiento de los gerentes de los clubes para los que trabajaron.

Sedano sostiene que presentó un carnet de seguridad social falso, comprado en el Bronx, pero eso no fue un problema. El documento no fue verificado y lo contrataron de inmediato en la cocina del club, donde su principal comensal era el dueño del negocio: el empresario multimillonario Donald Trump.

Recuerda que en ese momento el club estrenaba el restaurante. En la cocina trabajaban unas ocho personas, incluido el chef. La mitad, dice, eran indocumentados.

Trump solía llegar al restaurante solo y temprano. Siempre había una alerta especial para ese momento:

“Ya sabían que iba a llegar el patrón y nos decían: ningún movimiento, todo tranquilo, que nadie se vea”, relata.


Aunque nunca habló con él, Sedano se adaptó rápidamente a los gustos especiales de su nuevo jefe, a quien nunca vio comer con su familia.

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“Me tocó prepararle la hamburguesa, muy cocida la carne, casi parecía carbón, o hot dogs, era lo que siempre comía”.

Donaciano es el primero de cuatro miembros de la familia Sedano, originarios de San Simón Yehualtepec, en Puebla, que han trabajado para los Trump en Westchester en los últimos 15 años sin papeles. Otros seis conocidos suyos fueron contratados en el club por recomendaciones suyas. Ninguno tenía documentos legales.

Él no tiene un buen recuerdo del presidente.

“Mucho antes de que lanzara su campaña yo me di cuenta de que el señor era racista, no quería a la gente latina”, asegura.

Lo dice porque en una ocasión, el gerente anunció que todo debía estar impecable porque Trump comería allí con un socio de negocios.

“Cuando fue ese señor, que era como un sultán, un petrolero árabe, en la cocina nos dieron descanso a todos. Nos había dicho que el patrón no quería ver a ningún latino allí”, recuerda el cocinero.

La contratación en el club de golf de Westchester aumenta durante los torneos de verano y la época navideña.
La contratación en el club de golf de Westchester aumenta durante los torneos de verano y la época navideña.
Imagen Scott Halleran/Getty Images

Como él, muchos otros empleados sin documentos ocupaban los puestos de trabajos de temporada durante el verano y la época navideña. Cuando terminaban esos periodos, cerraban el restaurante y los despedían.

Él laboró durante siete meses en la cocina del club. “Trabajábamos a veces de las 6 de la mañana a las 12 de la noche. Como no tenían mucho personal, nos pagaban doble o triple en fin de semana, pero era mucho trabajo, estar parado todo el día”, dice.

Sedano volvió a México en 2009 y ahora vive en Puebla. Sus familiares, que se quedaron en el club, dicen que fueron discriminados en los pagos y condiciones de trabajo por ser indocumentados.

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“Los que eran legales ganaban más. Pero nosotros no podíamos reclamar nada. Uno tenía miedo de hablar, de que nos presentaran a la Corte o algo”.

Nota: Univision no ha recibido respuesta de la Organización Trump ni de la Casa Blanca a un cuestionario en el que pedimos sus puntos de vista en relación con los testimonios de los inmigrantes entrevistados para este reportaje. En el pasado, la organización Trump ha respondido a otros medios que tan pronto detecta que un empleado está usando documentos falsos, lo despide.

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Imagen maralagoclub.com
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