A diferencia de lo que ocurrió en Reino Unido, esta vez Johnny Depp ganó el mediático juicio por difamación que lo enfrentó a su expareja Amber Heard.
Por qué Johnny Depp ganó el juicio contra Heard en EEUU si perdió uno en Reino Unido
Lo normal es que en Reino Unido sea más fácil ganar un juicio por difamación que en EEUU, donde la Primera Enmienda sirve de tremendo escudo para la libertad de expresión. Y sin embargo, Depp perdió en Londres y ganó en Virginia. ¿Por qué?
Y fue una sorpresa, teniendo en cuenta que en Reino Unido no es el peor lugar del mundo para ganar un juicio por difamación y en Estados Unidos se suele imponer el derecho a la libertad de expresión protegido por la Primera Enmienda.
El jurado de Virginia dio la razón a Depp aunque concluyó que las difamaciones fueron de ida y vuelta. Así que impuso a la actriz una indemnización de $10 millones (que ya ha dicho que no puede pagar) y a su exmarido una de $2 millones.
En el juicio de Londres, en 2020, el juez consideró probado que al menos en 12 incidentes, Depp había agredido a su pareja.
¿Cómo es posible que haya habido un resultado tan diferente en los juicios de Virginia y Londres?
Depp contra The Sun y Depp contra Heard, dos casos similares pero diferentes
En Londres, lo cierto es que no se enfrentaron directamente los dos actores ya que se trató de una demanda de Depp contra el diario The Sun, que había publicado un artículo que calificaba al actor de “agresor de mujeres”.
Entonces, Heard solo estuvo como testigo.
Depp perdió pese a que la regulación de las injurias y calumnias en Reino Unido lo hacen uno de los lugares donde es relativamente más fácil ganar un juicio por difamación. Además, fracasó su apelación ante el Tribunal Superior de Londres, que determinó que había pruebas contundentes para afirmar que había maltratado a su expareja.
Mientras en el proceso estadounidense, Depp no demandó al medio sino a su exesposa, quien había publicado un artículo de opinión en The Washington Post en 2018 después de que ambos se divorciaran.
En el artículo, Heard habla de sí misma como una persona que había tenido experiencia en lo que "representa el abuso doméstico", aunque no menciona a Depp.
El protagonista de "Piratas del Caribe" interpuso una demanda por $50 millones por daños y perjuicios. La actriz respondió con una contrademanda en la que alega que su exmarido había impulsado una campaña de difamación en su contra y le reclamó $100 millones.
Las leyes de Reino Unido y EEUU son muy diferentes
En lo que coinciden ambos casos es que, en el fondo, lo que se sometía a juicio era si es cierto que Depp había maltratado a Heard. De serlo, la libertad de expresión debería amparar el derecho a afirmarlo. Pero solo si es verdad, no si es mentira.
Tanto en Londres como en Virginia, los abogados del actor argumentaron que Heard mentía, atacaron su credibilidad y trataron de retratarla a ella como la maltratadora.
Pero las leyes de Estados Unidos y Reino Unido son muy diferentes.
En el país europeo, la carga de probar que es verdad una afirmación que es objeto de un caso de difamación recae fundamentalmente en el acusado, por lo que es mucho más fácil ganar un juicio en ese país.
Pero en Estados Unidos, amparada por la Primera Enmienda de la Constitución, la libertad de expresión se interpreta de una forma mucho más expansiva. El denunciante tiene que demostrar que la afirmación es mentira pero eso no basta, también tiene que probar que hubo malicia.
Y en el caso del articulo de The Washington Post, Depp tenía que demostrar también que se refería a él, ya que el texto no menciona su nombre.
Por todo esto, antes del juicio no era descabellado pensar que, tras perder en Londres, Depp lo tenía incluso más complicado en Washington. Y seguramente lo sabía, pero no tenía mucho que perder en cuanto a reputación.
Juez profesional vs jurado en proceso televisado
La diferencia más evidente, y para notarla no hace falta ser experto, es que en Londres decidió un juez profesional y experto en derecho, mientras en Virginia fue un jurado popular formado por cinco hombres y dos mujeres, ciudadanos de a pie.
La estrategia de los abogados de Depp buscó retirar el foco de la cuestión en si era verdad o no que había cometido los abusos y centrarlo en cuestionar la credibilidad de Heard.
El abogado Mark Stephens le dijo a la BBC que se trata de algo en lo que “abogados y jueces no suelen caer, pero es muy efectivo con un jurado”.
El juez británico explicó su decisión en un documento de 129 páginas que se puede consultar en línea y en el que señala que considera ciertas al menos 12 de las 14 ocasiones en que Heard acusaba a Depp de abusos.
El jurado estadounidense, no. Cualquier explicación sobre sus motivaciones es especulación. Aunque los expertos coinciden en que debe pasar por el hecho de que no creyeron a Heard, ni a sus testigos (entre los que no estuvieron, por cierto, su expareja Elon Musk ni su compañero de reparto James Franco).
Así que es imposible saber cuánto influyó la personalidad y el carisma de Depp durante todo el juicio, algo que va a influir en un juez profesional pero que tal vez sí ante un jurado popular.
Y tampoco el ejército de fanáticos de Depp, que aguardaban turno durante horas cada día para estar en la sala y que en redes sociales impulsaron una campaña masiva de apoyo al actor y de ataques contra la actriz.
El juicio tuvo millones de seguidores en directo YouTube. En TikTok, la etiqueta #justiceforjohnnydepp superó las 19,000 millones de vistas. También proliferaron los memes, casi siempre alabando a Depp y ridiculizando a Heard.
Así es que se explica cómo la actriz que convenció a un juez de Londres perdió en Estados Unidos el juicio de la opinión pública que se dirime en las redes sociales. Y luego, con el jurado.













