El caso del joven abatido por un agente de la Patrulla Fronteriza mientras estaba en territorio mexicano regresa a la Corte Suprema

La familia de Sergio Hernández, el joven de 15 años que murió en 2010 tras recibir un disparo desde territorio estadounidense, quiere que se le permita demandar en cortes federales al agente responsable por la muerte de su hijo, luego de que un tribunal de apelaciones determinó que como extranjero en México no goza de protecciones constitucionales.

Por:
Univision y Reuters.
<b>"In memoriam of Keko". </b>Familiares y amigos de Sergio Hernández tras el entierro del adolescente en Ciudad Juárez, el 10 de junio de 2010.
<b>"In memoriam of Keko". </b>Familiares y amigos de Sergio Hernández tras el entierro del adolescente en Ciudad Juárez, el 10 de junio de 2010.
Imagen Jesús Alcázar/AFP/Getty Images

Han pasado 9 años y la Corte Suprema de Estados Unidos aceptó este martes considerar el caso de una familia mexicana contra el agente de la Patrulla Fronteriza estadounidense que mató a Sergio Adrián Hernández Güereca, de 15 años, al dispararle cuando el joven estaba en territorio mexicano

PUBLICIDAD

El 7 de junio de 2010, una bala disparada por desde EEUU alcanzó en México a Sergio Adrián Hernández Güereca de 15 años. “Keko” como le llamaban sus amigos, jugaba con tres de ellos en el lecho del río Grande que separa Ciudad Juárez en el estado mexicano de Chihuahua de El Paso, Texas. De acuerdo con la versión de la familia, el adolescente se divertía tocando la alambrada fronteriza hasta que la bala lo alcanzó.

La famila de Hernández quiere que se le permita demandar ante tribunales federales a Jesús Mesa, y señalan que se violó el derecho de Hernández al debido proceso en virtud de la Quinta Enmienda de la Constitución.

Será a finales del 2019 cuando la Corte Suprema vuelva a escuchar los argumentos de las partes implicadas en la muerte del adolescente Sergio Adrián Hernández.

Los padres del joven, apoyados por el Gobierno de México, ya llevaron el caso a la Corte Suprema en junio de 2017. En ese momento el alto tribunal se negó a tratar la denuncia y la remitió a un tribunal de apelación de la ciudad de Nueva Orleans, que confirmó la inmunidad a Mesa, ya que los magistrados consideraron que las protecciones constitucionales estadounidenses no se podían aplicar para un mexicano muerto en su país


Una audiencia incompleta

El 21 de febrero de 2017 durante la audiencia de la Corte Suprema los ocho magistrados que entonces integraban la Corte, tras el fallecimiento de Antonin Scalia, escucharon los argumentos. Los jueces considerados como progresistas, señalaron que la muerte de Sergio ocurrió en “tierra de nadie” por lo que no es claro donde acaba la jurisdicción estadounidense y dónde empieza la mexicana.

PUBLICIDAD

En una entrevista durante 2017 con Univisión Noticias, María Guadalupe Güereca, madre de Sergio Adrián dijo que “ no por que sea mexicano y estuviera en suelo mexicano tenía derecho a matarlo”.

Un día después de la muerte de Hernández, el FBI mencionó que el agente fronterizo que disparó se topó con un grupo de jóvenes que traficaban migrantes que intentaban entrar de manera ilegal a los Estados unidos, que estos lo rodearon y recibió pedradas.

Pero 24 horas después, un video grabado con un celular desde el puente fronterizo y filtrado a Univisión Noticias contradijo la versión oficial: los jóvenes no rodearon al agente y en las imágenes no se ve a Sergio lanzar piedras antes de recibir el disparo.

Las imágenes fueron obtenidas por un testigo que captó con su teléfono celular el momento exacto en el que el patrullero estadounidense disparó contra Hernández.
Video Video de la muerte de Sergio Adrian Hernández, el jóven ajusticiado por un agente fronterizo

José Rodríguez, un caso similar

El debate judicial provocado por la muerte de Sergio Hernández coincide con el caso d e José Rodríguez, joven mexicano de 16 años abatido el 10 de octubre de 2012 en la ciudad mexicana de Nogales.

Los familiares de Rodríguez han dicho que el joven caminaba cerca de la frontera cuando el agente estadounidense Lonnie Swartz, apostado en Arizona, lo mató a tiros.

La noche del 10 de octubre de 2012 el agente Swartz disparó su pistola a través de la cerca de la frontera en Nogales en 16 ocasiones durante 34 segundos, desde tres posiciones diferentes, en respuesta a personas que estaban lanzando piedras.

La justicia estadounidense juzgó a Swartz por lo ocurrido, pero tras varios días de deliberaciones éste fue absuelto de los cargos de asesinato en segundo grado por que el jurado en esa ocasión no pudo llegar a una decisión.

PUBLICIDAD

La madre de la víctima presentó entonces una denuncia por lo civil en Estados Unidos, y un tribunal de apelación federal admitió su recurso.

El Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, ha hecho de la lucha contra la inmigración ilegal una de sus prioridades, y ha solicitado a la Corte Suprema rechazar las denuncias de las familias.

Por su parte el gobierno mexicano ha reclamado que los agentes estadounidenses sean considerados "responsables" de sus actos, subrayando que han matado "a decenas de personas en la frontera en los últimos años".

<b>Una muerte transfronteriza.</b> El cuerpo fallecido de Sergio Adrián Hernández, de 15 años, el 7 de junio de 2010, en territorio mexicano y rescatado por las autoridades de este país. La bala que lo mató, sin embargo, se lanzó desde Estados Unidos por parte de un agente de la Patrulla Fronteriza.
Un funeral multitudinario. El cortejo fúnebre partió de su vivienda en el oeste de Ciudad Juárez, hizo una parada en un templo católico y acabó en un cementerio elevado con vistas a una de las zonas más pobres de la zona.
Un padre desolado. Jesús Hernández durante el funeral de su hijo en Ciudad Juárez el 10 de junio de 2010. El padre no vivía con Sergio ni con su madre, y ahora encabeza la petición en la Corte Suprema sobre el caso.
<b>"In memory of Keko". </b>Familiares y amigos de Sergio Hernández tras el entierro del adolescente en Ciudad Juárez, el 10 de junio de 2010.
<b>"Me mató la Migra". </b>La muerte de Sergio Hernández levantó protestas en Ciudad Juárez, que siguen presentes en 2017 de forma testimonial. El Gobierno mexicano intentó –sin éxito– extraditar el agente estadounidense para juzgarlo e interpuso quejas –simbólicas– ante las cortes que escucharon el caso en Estados Unidos.
Varias negativas. Familiares del mexicano Sergio Adrián Hernández Güereca, el 18 de agosto de 2011, protestando bajo el cruce fronterizo entre Ciudad Juárez y El Paso. Unos días antes un juez federal en Texas había desestimado la demanda de la familia, pero sus abogados llevaron el caso después a una corte de apelaciones.
Siete años de proceso. El padre, Jesús Hernández, contempla el homenaje a su hijo el 7 de junio de 2012, al cumplirse dos años de la muerte. En 2017 la Corte Suprema escucha el caso y tiene que resolverlo.
Los argumentos en la Corte Suprema. El abogado Bob Hilliard, que representa a la familia Hernández Güereca, habla a los medios tras presentar sus argumentos, el 21 de febrero de 2017, ante la máxima institución judicial de Estados Unidos.
Las razones contrarias. El abogado Randolph Ortega, que defiende al agente de la Patrulla Fronteriza Jesús Mesa, ante la Corte Suprema, en Washington DC. Según él, la Constitución de Estados Unidos no puede proteger de ninguna manera a Sergio Hernández porque murió en México.
<b>Una sola pregunta.</b> En realidad lo que debe decidir la Corte Suprema es si la familia Hernández Güereca puede demandar al agente fronterizo por la muerte de su hijo. Si le dieran la razón, empezaría un nuevo proceso judicial contra Jesús Mesa Jr. En la imagen, la madre, María Guadalupe Güereca, enseña imágenes de Sergio Hernández.
1 / 10
Una muerte transfronteriza. El cuerpo fallecido de Sergio Adrián Hernández, de 15 años, el 7 de junio de 2010, en territorio mexicano y rescatado por las autoridades de este país. La bala que lo mató, sin embargo, se lanzó desde Estados Unidos por parte de un agente de la Patrulla Fronteriza.
Imagen Luis Hinojos/EFE
En alianza con
civicScienceLogo