Campesinos, jardineros, meseros... Dónde están y quiénes contratan trabajadores con visas H2-A y H2-B

En el último año, agricultores y empresarios solicitaron casi medio millón de certificaciones para traer a trabajadores con visas temporales tipo H2. Estos son los principales empleadores y dónde trabajan.

Jorge Cancino
Por:
Jorge Cancino.
Más de un millón de trabajadores del campo y sus familias podrían legalizarse si se aprueba una iniciativa, llamada Ley de Modernización de la Fuerza de Trabajo Agrícola 2019, que cuenta con el apoyo de 45 congresistas demócratas y republicanos.
Video Presentan un proyecto de ley bipartidista que legalizaría a miles de trabajadores indocumentados

Los programas de visas H-2A (para trabajadores agrícolas) y H-2B (para trabajadores temporales como obreros, albañiles, jardineros o pastores de ganado, entre otros), entregan cada año miles de permisos de entrada válidos por un año al término del cual pueden solicitarse dos extensiones.

Durante el año fiscal 2019 (1 de octubre del 2018 al 30 de septiembre del 2019), empresas agrícolas estadounidenses presentaron solicitudes para traer a 268,729 trabajadores del campo de otros países a través de visas temporales H-2A. El Departamento del Trabajo emitió 257,667 certificaciones laborales (96%), el principal requisito para otorgar estas visas (aunque no las garantizan). También recibió pedidos para certificar 189,187 posiciones de empresas no agrícolas, de las cuales aprobó 150,465 (80%).


De acuerdo con el sondeo del 2019 del Consejo Nacional de Empleadores Agrícolas, 56% de los granjeros reportaron que no habían podido contratar a todos los trabajadores que necesitaban para atender sus cultivos principales en alguna temporada de los últimos cinco años.

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Entre los grupos específicos de cultivos para los que se piden empleados temporales, las bayas (fresas, arándanos, etc...) lideran la lista con un 9.6%. Sin embargo, además de los detallados en el gráfico, otro 42% de trabajadores del campo atienden cultivos variados, no especificados en la lista del la Administración de Entrenamiento y Empleo.


Las visas H-2B son utilizadas por trabajadores temporales no agrícolas tales como obreros, albañiles, empleados de circos, trabajadores de la industria forestal, pastores de ganado, trabajadres domésticos, mucamas y meseros, entre otros. Los jardineros son los más solicitados, con un 44% de las posiciones certificadas.

Estas visas pueden durar hasta un año, pero el trabajador puede solicitar hasta dos extensiones con un máximo total de tres años. Luego, debe salir del país y esperar por lo menos tres meses antes de presentar una nueva solicitud bajo esta categoría de visa.

Las visas para el programa de agricultura no tienen una cuota anual, pero las H-2B sí. El Congreso fijó un límite de 66,000 por año. Sin embargo, en mayo de este año el gobierno de Donald Trump anunció una cuota adicional de 30,000, en respuesta a peticiones de empresarios hoteleros y los sectores del turismo, circos, entrenadores y atletas, empleadores domésticos y la industria forestal que argumentaron que no podían llenar esos puestos localmente.

En el año fiscal 2019, la empresa que más pidió a empleados a través del programa agrícola de trabajadores temporales, North Carolina Growers Association, concentró un 4.4% de las posiciones certificadas. La mitad de las compañías del top 10 obtuvo cada una menos del 1% de los puestos certificados por el Departamento del Trabajo.

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Las empresas que desean tramitar visas H-2A deben cumplir con los siguientes requisitos: ofertar un empleo de naturaleza temporal o de estación; demostrar que no hay suficientes trabajadores estadounidenses capaces, dispuestos, cualificados y disponibles para realizar el trabajo temporal; y demostrar que la contratación de trabajador temporal H-2A no afectará los sueldos y las condiciones de trabajo de los empleados estadounidenses en tareas similares.

El reglamento de las visas H-2A indica además que un trabajador agrícola que ha vivido en EEUU con ese estatus migratorio por un período de hasta tres años (con renovaciones anuales), debe salir y permanecer fuera del país por un período ininterrumpido de tres meses antes de solicitar una autorización para entrar nuevamente al país, explica el libro 'Inmigración, las nuevas reglas', una guía de Univision.


Un 13% de los trabajos del campo fueron otorgados a empresas en Florida. Georgia le sigue con un 11.4%, pero casi 1 de cada 3 posiciones (31.4%) fueron certificadas en otros estados que no aparecen entre los 10 con más posiciones.


Con casi un 11% de las posiciones certificadas, Texas lidera la lista de estados con más puestos aprobados por el Departamento del Trabajo en sectores de servicios y construcción. Le siguen Colorado (4.6%) y Florida (3.8%). El resto de los estados que no aparecen en el gráfico representan en su conjunto más de la mitad de los puestos certificados (59.1%).

Familiares y despidos, ¿qué dicen las reglas?

Los cónyuges e hijos solteros menores de 21 años de un No Inmigrante H-2A pueden solicitar la entrada a Estados Unidos mediante la clasificación de visa H-4, explica la Oficina de Ciudadanía y Servicios de Inmigración (USCIS). Mientras permanecen con esta visa no están autorizados para trabajar.

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En caso de despido o término “temprano” de un contrato de trabajador H-2A, el empleador debe notificar al servicio de inmigración (USCIS) dentro de los dos días laborales siguientes. La notificación debe incluir la razón del despido, datos completos del peticionario, y el número de Seguro Social y de visa del extranjero. Si no lo hace, será castigado con una multa. Las notificaciones de despido se hacen a través del correo postal o por medio de un correo electrónico.

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Los inmigrantes de origen mexicano Jesús Martin Rey Lugo, de 27 años y Rogelio García Parria de 20, ambos, con visas H-2A. Comen durante un descanso en un sembradío de lechuga, en King City, California. Muchos agricultores dicen que no pueden encontrar ciudadanos estadounidenses dispuestos y capaces de hacer los trabajos extenuantes del campo. La única forma legal de traer agricultores temporales extranjeros es el programa H-2A, del que muchos empleadores se quejan por ser complejo y costoso.
Sergio Marmalejo, de 55 años, supervisa a varios trabajadores agrícolas con Visa H-2A en una granja de Kimg City, California. Los hombres vinieron al país a través de una compañía de corretaje de trabajo, Fresh Harvest, que trae trabajadores H-2A para trabajar en granjas que necesitan mano de obra temporal. Este año, el dueño de la compañía, Steve Scaroni, dijo que espera traer a unos 4.000 trabajadores.
En 2016, el gobierno otorgó 134,000 visas H-2A. Compañías como Fresh Harvest son atractivas para los agricultores que quieren emplear a trabajadores legales, pero no quieren lidiar con la considerable burocracia del gobierno y los reglamentos asociados con el programa H-2A.
Los agricultores con visa H-2A en camino al campo que cosecharán. Mientras que el uso del programa H-2A ha aumentado constantemente durante el último decenio, todavía representa solamente cerca de 10 por ciento de los 1,3 millones estimados de trabajadores agrícolas en los Estados Unidos, según datos del gobierno.
El presidente Donald Trump aseguró a los agricultores de EEUU que su ofensiva contra inmigración no apunta a sus trabajadores. Aseguró en una reunión con el gremio el mes pasado que buscaría mejorar el programa que permite el ingreso de trabajadores agrícolas temporales con visas legales.
Un agricultor con visa h-2A al amanecer en un campo de California. "(El presidente Donald Trump) nos aseguró que tendríamos mucho acceso a trabajadores", dijo Zippy Duvall, presidente de American Farm Bureau Federation, uno de los 14 participantes de la reunión del 25 de abril con el Presidente y el secretario de Agricultura Sonny Perdue.
Agricultores inmigrantes con visas H-2A recogen alimentos en la cocina del campo de trabajo Toro, en Salinas, California. Varios de los representantes del sector agrícola que se reunieron con Donald Trump admitieron la dificultad de encontrar trabajadores agrícolas estadounidenses. 
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Dijeron que estaban preocupados por los estrictos controles a la inmigración y describieron sus frustraciones con el programa de visa H-2A, el que permite el ingreso de trabajadores agrícolas temporales.
Los agricultores con visa H-2A se preparan para comenzar la jornada en King City, California. Aproximadamente la mitad de los trabajadores en cosechas estadounidenses están en el país de manera ilegal y más de dos tercios son extranjeros, según las cifras más recientes del Sondeo Nacional de Trabajadores Agrícolas del Departamento del Trabajo.
Luke Brubaker, un ganadero de Pensilvania, dijo a DOnadl Trump que agentes de inmigración recientemente se llevaron a más de media decena de personas que trabajaban atrapando pollos para una compañía de transporte avícola en su condado.
El empleador intentó reemplazarlos con trabajadores locales, pero tres horas después todos, salvo uno, habían renunciado, explicó. DOnald Trump le respondió que quería ayudar y le pidió al secretario de Agricultura Sonny Perdue que viera el tema e hiciera recomendaciones, según los presentes.
Héctor Manuel Morales, de 20 años, estira sus músculos antes de comenzar a cosechar lechuga romana en King City, California. Pasó al norte desde México para trabajar los campos con tres primos. Dijo que su familia estaba preocupada por su viaje, por el discurso agresivo del presidente Donald Trump contra los inmigrantes ilegales. Al ser beneficiario de una visa H-2A no prevé tener ningún problemas en EEUU.
Agricultores Inmigrantes en California.
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Los inmigrantes de origen mexicano Jesús Martin Rey Lugo, de 27 años y Rogelio García Parria de 20, ambos, con visas H-2A. Comen durante un descanso en un sembradío de lechuga, en King City, California. Muchos agricultores dicen que no pueden encontrar ciudadanos estadounidenses dispuestos y capaces de hacer los trabajos extenuantes del campo. La única forma legal de traer agricultores temporales extranjeros es el programa H-2A, del que muchos empleadores se quejan por ser complejo y costoso.
Imagen LUCY NICHOLSON/Reuters
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