"Fallas de seguridad": los republicanos hacen su propia versión del asalto al Capitolio

En su informe, los republicanos usan información de inteligencia disponible sobre los problemas de seguridad que hubo ese día, pero no mencionan qué llevó a los manifestantes hasta la sede del Congreso, convencidos de que había habido fraude electoral, ni del llamado de Donald Trump a impedir la certificación de los resultados y "pelear como el demonio".

Por:
Univision
El comité que investiga lo ocurrido el 6 de enero del 2021 recomendó acusar criminalmente al expresidente Donald Trump. “Esto es solo una recomendación que pasará al Departamento de Justicia, el cual no tiene obligación alguna de darle credibilidad”, explicó el abogado Rafael Peñalver. Los cargos que se recomendaron contra Trump son incitación a la insurrección, obstrucción a un proceso oficial del Congreso, conspiración para defraudar y conspiración para hacer una declaración falsa. Lee aquí más información sobre los cargos con los que el comité del 6 de enero recomienda acusar criminalmente a Trump.
Video Comité investigador del asalto al Capitolio recomienda enjuiciar criminalmente a Donald Trump: ¿qué sigue en el proceso?

Aparte del informe final que presenta este jueves el comité selecto de la Cámara de Representantes que investiga el asalto al Capitolio, los republicanos de esa cámara publicaron su propio informe del tema, en el que destacan las fallas de seguridad como causa principal de lo ocurrido el 6 de enero de 2021 en la sede del Congreso de EEUU.

En su informe, los republicanos usan información de inteligencia disponible y bien documentada sobre los problemas de seguridad que hubo ese día, pero no mencionan qué llevó a los manifestantes hasta la sede del Congreso, convencidos de que había habido fraude electoral, ni del llamado del entonces presidente del país a interrumpir la certificación de los resultados y "pelear como el demonio".

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La versión republicana incluye una cronología de los hechos pero no menciona que Trump no solo instigó a la violencia sino que esperó horas hasta pedir a los manifestantes que se retiraran. De hecho, el informe hace referencia a cómo el entonces presidente llamó a sus seguidores a manifestarse "pacíficamente", omitiendo de forma selectiva otras partes de su discurso.

Mientras evita hacer referencia al papel de Trump en la movilización violenta de ese día, la investigación republicana abarca una serie de acusaciones infundadas, en las que culpa a demócratas como la presidenta de la Cámara Baja, Nancy Pelosi, cuyo gabinete, dice el informe: "estuvo fuertemente involucrado en la planificación y en la toma de decisiones antes y durante los acontecimientos del 6 de enero".


Los republicanos han dado a conocer su investigación como una refutación a la que lleva a cabo el comité selecto de la Cámara Baja, cuyo informe final será dado a conocer este jueves. Ese comité, integrado por solo dos republicanos, recomendó al Departamento de Justicia acusar a Trump de cuatro cargos criminales por los hechos violentos que ocurrieron ese día.

La versión republicana de la investigación estuvo dirigida por cinco legisladores seleccionados por el líder de la entonces minoría de la Cámara Baja, Kevin McCarthy. McCarthy había elegido inicialmente a estos cinco representantes para que formaran parte del comité selecto que investigó la violencia en el Capitolio, pero luego decidió que su partido no participaría en el panel.

Los autores de este informe señalaron que las fallas de seguridad fueron primordiales en el caso y que en sus 17 meses de investigación el comité selecto de la Cámara Baja se extralimitó en sus funciones.

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Los republicanos recomendaron reformar la Junta de la Policía del Capitolio y reforzar la supervisión del Congreso de ese cuerpo policial, dos problemas que en general fueron identificados por los legisladores de ambos partidos. Sin embargo, el informe republicano destaca: "Los fallos en el liderazgo y la aplicación de la ley dentro del Capitolio dejaron ese complejo vulnerable" y los investigadores del comité selecto de la Cámara Bajara han hecho "caso omiso" a esos errores.


Según los republicanos, la Policía del Capitolio tenía información previa de que podría haber violencia ese día pero su actuación se vio "minada" porque las prioridades de sus superiores estuvieron "fuera de lugar".

"Para empeorar las cosas, problemas sistémicos han perjudicado el aparato de seguridad durante años. Los oficiales de la Policía del Capitolio estaban poco capacitados y mal equipados para proteger el edificio", agrega el informe.

La investigación republicana no incluye una afirmación del propio Trump de que había ordenado desplegar a la Guardia Nacional en el Capitolio ese día, algo que su secretario de Defensa entonces, Christopher Miller, negó en sus declaraciones ante el comité de la Cámara Baja.

Cincuenta años después de que conmocionara al mundo, el 
<a href="https://www.univision.com/noticias/politica/asalto-al-capitolio-trump-nixon">caso Watergate</a> sigue siendo una historia de advertencia sobre la amenaza del poder presidencial sin límites y la vara de referencia con la que se miden todos los demás escándalos políticos en Estados Unidos.
El 50 aniversario del Watergate coincide con 
<b>las primeras audiencias públicas</b> del comité de la Cámara de Representantes que investiga el 
<a href="https://www.univision.com/shows/noticiero-univision/turba-que-asalto-el-capitolio-estuvo-a-40-pies-del-vicepresidente-pence-los-manifestantes-amenazaban-con-ahorcarlo-video">asalto al Capitolio</a> del 6 de enero de 2021, un escándalo que pone en la mira a otro líder republicano: el expresidente Donald Trump.
Unos 
<b>80 millones </b>de estadounidenses -más de un tercio de la población de entonces- sintonizaron en vivo el testimonio televisado del entonces consejero de la Casa Blanca, John Dean, contra Nixon en 
<b>las audiencias del Watergate</b>.
En contraste, alrededor de 
<b>20 millones</b> -apenas el 6% de los estadounidenses- vieron la primera audiencia del comité que investiga el asalto al Capitolio, a pesar de que 
<a href="https://www.univision.com/noticias/politica/audiencias-asalto-capitolio">se colocó en prime time</a> , en el mejor horario, y se le dio gran publicidad.
Algunos historiadores creen que Nixon puede ser desplazado en la historia por 
<a href="https://www.univision.com/noticias/politica/asalto-al-capitolio-tercera-audiencia-comite-que-investiga-asalto-al-capitolio-trump-a-pence">Trump y su papel en el asalto al Capitolio</a>. El delito de Nixon fue encubrir una intrusión en la sede del Comité Nacional Demócrata, en el complejo 
<b>Watergate</b> de Washington, para robar documentos que podrían haberle ayudado en unas elecciones que, de todas formas, tenía todo a favor para ganar y que terminó venciendo con holgura.
El encubrimiento podría haber tenido éxito si no fuera porque en el verano boreal de 1973 se descubrió por casualidad que Nixon había grabado en secreto todas sus reuniones en la Casa Blanca. Entre ellas, una en la que se le oía ordenando al FBI, que iba a investigar el allanamiento en el 
<b>Watergate</b>, que "se mantuviera fuera de esto". En la imagen, 
<b>John D. Ehrlichman</b>, una de las figuras claves del caso, que estuvo 18 meses en la cárcel por conspiración y perjurio.
Nixon 
<b>renunció</b> después de que una delegación de veteranos dirigentes republicanos, encabezada por el ultraconservador Barry Goldwater, acudiera a la Casa Blanca en 1974 para decirle que era probable que 
<b>se le abriera un proceso de destitución</b> en el Congreso. Finalmente fue indultado por su sucesor, pero muchos de sus principales colaboradores fueron a la cárcel.
Mientras el Senado 
<b>votó entonces por unanimidad la creación de una comisión</b> de investigación bipartidaria sobre el caso 
<b>Watergate</b>, los legisladores republicanos actuales vetaron una comisión mixta y castigaron a los dos miembros de su partido (
<a href="https://www.univision.com/noticias/politica/partido-republicano-censura-cheney-kinzinger-asalto-capitolio">Liz Cheney y Adam Kinzinger</a>) que se unieron al comité de la Cámara de Representantes.
<a href="https://www.univision.com/noticias/politica/las-cuatro-cosas-que-diferencian-al-libro-de-bob-woodward-de-otros-sobre-la-casa-blanca-de-donald-trump">Carl Bernstein y Bob Woodward</a>, los dos periodistas del 
<i>Washington Post </i>que desempeñaron un papel fundamental en destapar el escándalo y la caída de Nixon, han escrito un nuevo prólogo para su emblemático libro 
<i><b>Todos los hombres del presidente</b></i> estableciendo paralelismos con Trump. Sugieren que la incitación de Trump a una turba para marchar hacia el Capitolio constituyó 
<b>"un engaño que superó incluso la imaginación de Nixon"</b>. "Por definición legal esto es claramente sedición (...) así Trump se convirtió en el primer presidente sedicioso de nuestra historia", sostienen. 
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Para David Greenberg, autor del libro 
<i>La sombra de Nixon: la historia de una imagen</i>, las audiencias del 
<b>Watergate</b> fueron "decisivas" y remarca una "diferencia" con el presente: "En 1973 y 1974 un gran número de 
<b>congresistas y senadores republicanos leales a Nixon acabaron admitiendo que estaba involucrado</b> en actividades criminales", indicó.
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"Hoy, sólo unos pocos (dice el escritor) 
<b>han estado dispuestos a reconocer la complicidad de Trump</b>" en los hechos, explica a la agencia AFP. Una de ellos es 
<a href="https://www.univision.com/noticias/politica/republicana-liz-cheney-comite-asalto-capitolio-evidencias-trump-remision-penal">Liz Cheney</a>, que se ha enfrentado frontalmente al expresidente y sus intentos por revertir su derrota electoral de 2020.
Durante el caso Watergate, "
<b>los estadounidenses estaban unidos y confiaban en sus fuentes mediáticas </b>como parte de un diálogo nacional. Hoy eso es imposible", dijo a la 
<i>AFP</i> Rick Sánchez, expresentador de la cadena de noticias CNN. Si los medios de noticias por cable de derecha que dominan el discurso conservador actual hubieran existido en la década de 1970, argumenta Sánchez, 
<b>el Watergate habría sido "una historia más".</b>
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<b>En video:</b> La tercera audiencia del comité que investiga el asalto al Capitolio se centró en el esfuerzo de Trump de presionar a Pence para revocar los resultados de las elecciones de 2020. Exempleados de la Casa Blanca testificaron que el expresidente insultó a Pence antes del ataque.
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Cincuenta años después de que conmocionara al mundo, el caso Watergate sigue siendo una historia de advertencia sobre la amenaza del poder presidencial sin límites y la vara de referencia con la que se miden todos los demás escándalos políticos en Estados Unidos.
Imagen John Duricka/AP
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