“Ya me cansé de hablar”: mujer que fue violada, quemada y dejada por muerta en México exige justicia

Liliana Fernández, una joven mexicana de 23 años, casada y madre de cuatro hijos, fue secuestrada, violada, quemada y dejada por muerta en el municipio de Salinas Victoria, a unos 45 minutos en auto de Monterrey, Nuevo León, en el norte de México.

Cansada de pedir justicia contra sus agresores, a quienes asegura que ha identificado frente a las autoridades, Fernández decidió compartir un video donde muestra sus heridas: sufrió quemaduras en el 32% de su cuerpo.

“Destruyeron mi cuerpo. El apoyo de mi esposo ha sido fundamental para salir adelante. Yo ya me cansé de hablar: no hacen nada. Tenemos miedo porque el caso no avanza, y solo nos ponen en riesgo”, dijo la joven madre en una entrevista con el medio mexicano MVS Noticias.

Los hechos ocurrieron en marzo. El esposo de la joven consiguió un trabajo en el que debía viajar, y entonces ella debió alquilar un cuarto. En ese sitio, el casero, a quien Fernández identificó como Eduardo Tamez, comenzó presuntamente a acosarla.

Dice que la drogó

Fernández aseguró que el hombre presuntamente la drogó para que ella perdiera el conocimiento. El sujeto y otros dos hombres la golpearon, violaron, le prendieron fuego y la dejaron tirada en un terreno baldío, dándola por muerta. La joven despertó en medio del dolor por las quemaduras y fue trasladada a un hospital, donde comenzó su lenta recuperación.

“Fueron tres personas en el municipio de Salinas… no han hecho nada por atraparlo, ya di direcciones, ya declaré y no hicieron nada”, afirma la joven en uno de los videos que ha compartido en su perfil de Facebook, donde también pide ayuda puesto que su esposo tuvo que dejar de trabajar para hacerse cargo de ella y de sus hijos. Dice que ver las cicatrices en su rostro y cuerpo le llena los ojos de lágrimas

“Me pongo a llorar. Ellos [los médicos] me dicen que va a ser difícil, pero que voy a salir adelante. Quiero saber si las autoridades realmente van a hacer algo”, señaló.