PROVO, Utah – El cuerpo de quien hasta ahora había sido llamado John Doe corresponde a Robby Lynn Peay, quien fue reportado como desaparecido desde 1982. La identificación, precisaron las autoridades, se logró mediante pruebas de ADN y la corrección de sus registros dentales.
Desaparecido desde 1982: Confirman que hallaron los restos de Robby Lynn Peay
Tuvieron que pasar más de 40 años para que las autoridades lograran dar un cierre al dolor de una familia: Había una tumba vacía en honor de Robby Lynn Peay, un joven de 17 años que desapareció en 1982. Sin embargo, sus restos, fueron localizados meses después, pero no habían podido ser identificados, hasta ahora.
La información que las autoridades poseen hasta el momento indica que Peay, un joven de 17 años, fue víctima de un homicidio.
El cuerpo fue enterrado en el cementerio el Sunset Memorial Gardens, de Moab, sin lápida; mientras la familia, que ahora por fin tiene un cierre para el dolor que se ha prolongado por décadas, ha tenido en el cementerio de Provo una lápida sin un cuerpo enterrado hasta ahora.
La lápida dice: “En memoria de Robby Lynn Peay, nacido el 2 de agosto de 1965, desaparecido desde el 7 de octubre de 1982.
Efectivamente, ese fue el día en que Peay escapó de un centro de rehabilitación juvenil en Salt Lake City. Sin embargo, se llamó al Departamento de Policía de Provo porque allí tenía su domicilio la persona desaparecida.
Unos cuatro meses después de la fuga de Peay, un cuerpo con un disparo en la nuca fue hallado el 12 de febrero de 1983 en la zona de Tree Gossips del Parque Nacional Arches. Las autoridades lo apodaron John Doe.
Ya no es John Doe: identifican los restos de Robby Lynn Peay, desaparecido en 1982
Una declaración jurada indicaba que las características físicas de John Doe y las de Robby Peay son muy similares. Sin embargo, el estado de descomposición del cuerpo impidió que se estableciera una coincidencia positiva.
Meses después del hallazgo de ese cuerpo, la camioneta de Peay apareció a unos 560 kilómetros de distancia, cerca del lago Powell, abandonada.
En 2018 ocurrió algo que dio un giro definitivo a esta historia: Un agente de policía de Provo que había sido asignado a revisar algunos de los casos más antiguos del estado puso sus ojos en este, y, con ayuda de un dentista forense, “se descubrió que las radiografías dentales originales estaban ingresadas al revés en la base de datos”.
Cuando esto se corrigió, se obtuvo coincidencia entre el cuerpo localizado y la persona reportada como desaparecida, la cual luego se reafirmó al comparar el ADN.
Este último paso se demoró particularmente porque Peay había sido adoptado cuando tenía 11 meses. La búsqueda de familiares biológicos descubrió que la víctima tenía pocos parientes con vida, entre ellos un tío materno, con quien se pudo trabajar.
Nick Patterson, sargento de la policía de Provo, declaró que “Robbie Peay llevaba más de 40 años desaparecido cuando finalmente se logró un avance gracias a los registros dentales y las pruebas de ADN, de modo que la identificación oficial del cuerpo como Peay llegó el 19 de marzo de 2025.
“Con esta evidencia crucial, pudimos identificar a un individuo desconocido, aportando muestras largamente esperadas a una familia que había pasado décadas en la incertidumbre. Momentos como estos se encuentran entre los aspectos más gratificantes del trabajo”.
La información del expediente en manos de Provo fue compartida con los detectives del condado Grand, en quienes ha recaído la investigación del homicidio de Robby Lynn Peay.
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