TUCSON, Arizona. - En una publicación poco usual, agentes de la Patrulla Fronteriza utilizaron Facebook para expresar su furia tras devolverle a su madre el bebé que hallaron el viernes 18 de febrero, bajo un árbol, en el desierto de Arizona.
Agentes fronterizos se expresan 'furiosos' al devolver un bebé hallado bajo un árbol en el desierto de Arizona
Unos 38 minutos antes del hallazgo del bebé, agentes de la Patrulla Fronteriza detuvieron a un grupo de inmigrantes en la frontera de Arizona. Entre ellos estaba una mujer de Guatemala que, aunque en un principio calló, más tarde admitió que el bebé era suyo.
Junto a una foto del niño, los agentes usaron el emoticono de furia para contar lo ocurrido.
Durante un patrullaje de la Unidad de Vehículos Todoterreno, agentes encontraron al bebé, cubierto en ropa de camuflaje y escondido bajo un árbol, cerca del Monumento Nacional Organ Pipe Cactus, en el desértico Ajo.

A simple vista, el bebé parecía gozar de buena salud, sin lesiones visibles.
De inmediato y mientras las autoridades migratorias y estatales decidían qué pasaría con el niño, los agentes fronterizos se movilizaron para garantizar su salud y bienestar.
"Logramos que lo revisaran (médicos), le cambiamos el pañal y conseguimos nutrirlo con fórmula", contaron.
La madre del bebé lo negó; luego confesó que otra persona lo cargaba en el desierto
En el relato que publicaron en la página Old Patrol HQ, los agentes fronterizos detallaron que como media hora antes de que el bebé fuera hallado, un grupo de 14 indocumentados había sido detenido.
Los agentes asociaron al bebé con el grupo y los interrogaron a todos, pero en un principio nadie reclamó al menor como suyo.
No fue hasta que un agente confrontó al grupo que una mujer, procedente de Guatemala, confesó que el niño es su hijo, pero que otra persona que venía en el grupo de inmigrantes indocumentados le estaba ayudando a cargarlo.
Esa persona no fue identificada, pero las autoridades determinaron que la madre no puso en peligro al niño de forma intencional. Así las cosas, la orden fue devolverle el bebé.
"Qué triste para ese pobre niño", lamentaron los agentes fronterizos en su publicación.
Y es que después de ser evaluados por paramédicos en la estación de la Patrulla Fronteriza de Ajo, la madre y el niño fueron procesados bajo el Título 42 y enviados a México, a través del puerto de entrada de Lukeville, Arizona.
Esto te puede interesar:






