SAN ANTONIO, Texas.- Mia Martínez, una bebé de 4 meses, murió luego de estar hospitalizada dos semanas en San Antonio.
Bebé hispana de 4 meses tenía lesión en la cabeza y murió; su madre busca respuestas
La policía de San Antonio está investigando el caso de Mia Martínez, una bebé de 4 meses que murió tras estar dos semanas en el hospital. A su madre le informaron que sufrió de una lesión en la cabeza.
Pero su madre está pidiendo más respuestas, al recibir la noticia de que la niña tenía una lesión en la cabeza.
La bebé había sido dejada con el papá, el pasado 4 de junio, según la versión de Jasmine Gonzales Martínez, la mamá. En ese momento, ella notó algo diferente.
“Él me entregó a Mia y ella no se veía bien. No se veía como normalmente. Revisé su respiración; estaba muy leve. Su piel estaba fría… ella no abría los ojos”, dijo Jasmine.
Aunque nació prematura junto con su hermana gemela, ella era una bebé saludable, comentó la madre.
“Ella era una bebé grandiosa. Ni siquiera lloraba”, dijo Yasmín. “Estaba tan feliz y tan tranquila y relajada y una buena bebé. Tenía un aura que solo brillaba”.
Lo que se sabe del diagnóstico de Mia Martínez
Mia recibió el diagnóstico de hematoma subdural, luego de que le hicieron una resonancia magnética, dijo su madre. Ella estuvo en University Hospital de San Antonio.
Las autoridades supuestamente la interrogaron a ella y al papá, por separado.
El Médico Forense del Condado de Bexar aún no revela la causa de muerte de la bebé ni la manera en que murió.
Mientras tanto, su familia abrió un GoFundMe para poder recibir ayuda de la comunidad y darle el funeral a la bebé.
La policía de San Antonio está investigando la muerte de la bebé. “Podemos confirmar que tenemos este caso y que nuestros detectives están investigando. No podemos comentar nada más pues esta es una investigación abierta involucrando a un menor”, dijo un portavoz.
Te puede interesar:









La mujer acudió a su cita del 23 de junio, en la corte migratoria, en el 800 de Dolorosa Street. En cuestión de minutos salió escoltada, al igual que sus pequeñas, por agentes enmascarados del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE).
Se aseguraron de que l as tres subieran a un autobús con vidrios gruesos y polarizados, que las trasladó al centro de procesamiento de ICE en Crosspoint, 13 millas al norte.
Con ellas iban inmigrantes de Cuba y Venezuela, se conoció extraoficialmente.