Donald Trump solicitó en 2008 registrar su marca Trump en Cuba para una variedad de actividades comerciales, incluida la inversión en bienes raíces, hoteles, casinos y campos de golf, informó el martes el diario The Miami Herald.
Trump registró su marca en Cuba para concursos de belleza, casinos y campos de golf
El presidente Trump ha denunciado a su rival del Partido Demócrata, Joe Biden, de ser un socialista radical. Pero en 2008, solicitó registrar su marca en la isla caribeña gobernada por un régimen comunista durante décadas.

Una búsqueda en la base de datos de la Oficina de Propiedad Industrial de Cuba muestra que Donald J. Trump contrató a una abogada cubana para presentar la solicitud en octubre de 2008.
La marca registrada no fue aprobada hasta marzo de 2010 y expiró en 2018, después de que fuera elegido presidente, según la reportera Nora Gámez.
Desde su elección, Trump impuso nuevas sanciones al gobierno cubano, citando violaciones de derechos humanos y el apoyo del régimen a Nicolás Maduro en Venezuela. Con las medidas ha ganado el apoyo crucial de un sector importante de los votantes cubanoestadounidenses en el sur de Florida, y al mismo tiempo ha denunciado a su rival del Partido Demócrata, Joe Biden, de ser un socialista radical.
Durante la campaña, Trump hizo promesas en Miami de que no haría negocios en Cuba hasta que la isla fuera "libre". Pero ahora parece que ya había tomado medidas para abrir negocios en la isla, mucho antes de la restauración de relaciones diplomáticas en 2015 durante el gobierno de Barack Obama.
El periódico publicó una captura de pantalla del sitio web de la Oficina de Propiedad Industrial de Cuba que muestra detalles de la marca Trump registrada en Cuba.
Según una descripción de su solicitud, que aparece tanto en el sitio web del registro oficial cubano como en un boletín de 2009, la marca estaba relacionada con "inversión en bienes raíces", "concursos de belleza", "campos de golf", "servicios de juegos de casino", “programas de televisión” y “servicios hoteleros”, entre muchas otras actividades enumeradas.
La Casa Blanca y la Organización Trump no han comentado sobre el reporte de The Miami Herald.
En un comunicado, la campaña de Biden dijo que el informe del diario era “otro recordatorio de que, a pesar de sus promesas de no hacer negocios en Cuba hasta que la isla sea libre, Donald Trump mintió. No sirve a nadie más que a sí mismo y su palabra no sirve para nada. A Trump no le importa la libertad del pueblo cubano; solo se preocupa por ganar dinero, incluso si eso significa hacer negocios con los Castro".
The Miami Herald señaló que no violó el embargo estadounidense contra Cuba al presentar la solicitud. Las Regulaciones de Control de Activos Cubanos, las reglas del Departamento del Tesoro para implementar el embargo comercial, incluyen excepciones para permitir la presentación de marcas registradas y el pago de agentes locales para hacerlo.
En 2013, ejecutivos de la Organización Trump visitaron Cuba para explorar la posibilidad de invertir en un campo de golf al este de La Habana. En 2015, Trump también expresó en privado su interés en organizar un concurso de belleza de Miss Universo en la isla caribeña.
Su exjefe de campaña presidencial, Paul Manafort, también viajó a Cuba en enero de 2017, según un informe del Senado.
















