Benedicto XVI muestra su desacuerdo con la propuesta de Francisco sobre la relajación de las reglas del celibato

Benedicto XVI se pronunció en contra de permitir que los hombres casados puedan convertirse en sacerdotes, en una medida que podría poner en peligro la propuesta del papa Francisco para cambiar el requisito secular en algunas de las zonas del Amazonas.

La opinión de Benedicto de defender el celibato clerical aparecerá en un libro que ha escrito en coordinación con el cardenal conservador Robert Sarah.

Según algunos de los extractos del libro, cuyo contenido ha sido adelantado por el diario francés Le Figaro, que se publicará el 15 de enero y se titula Des profondeurs de nos coeurs (Desde el profundo de nuestro corazón), en donde sus autores hacen un llamado a la iglesia católica a "no dejarse llevar por malas súplicas, teatralidad, mentiras diabólicas y errores de moda que quieren devaluar el celibato sacerdotal".

Fue en octubre del 2019 cuando el papa Francisco consideró una petición de los obispos del Amazonas para permitir que hombres casados puedan ordenarse como sacerdotes con el fin de superar la escasez de clérigos en las zonas remotas de esa región y solo aplicaría para los hombres que sirven como diáconos. Entre otras propuestas se incluyen la protección al medio ambiente y el papel de la mujer en la iglesia. Se espera que durante los próximos meses Francisco tome una decisión al respecto.

Un documento que fue aprobado por los obispos del Amazonas, donde existe un sacerdote por cada 10,000 católicos, señala que los católicos tienen "enormes dificultades" para recibir la comunión por lo que proponen "ordenar hombres comprometidos con su comunidad" ya que han tenido experiencias "fructíferas" como diáconos.

Una gran cantidad de críticos considera que la propuesta De Francisco es un precedente que podría poner fin a la restricción de sacerdotes católicos casados en todo el mundo.

Benedicto, de 92 años, escribió en su libro que era urgente que los obispos, sacerdotes y laicos "se dejen guiar una vez más por la fe al mirar a la Iglesia y al celibato sacerdotal que protege su misterio".

Después de su renuncia en 2013, el expapa Benedicto XVI se comprometió a no interferir en el trabajo de su sucesor sin embargo ha intervenido en diferentes ocasiones durante los últimos 7 años, pero es la primera ocasión que interviene de una manera directa que afecte al Papa Francisco.

El año pasado en un controvertido ensayo, Benedicto culpó de los escándalos sexuales de pedofilia en la iglesia católica a la revolución sexual de los años 60 y al " lobby gay" en el Vaticano. Sus comentarios dañaron los esfuerzos de Francisco de salir de la crisis que ha asolado a la iglesia católica durante décadas.

Joshua McElwee, corresponsal en el Vaticano de National Catholic Reporter, expresó que "existe una verdadera preocupación de que la figura del Papa Benedicto XVI, que tiene un gran número de seguidores entre los círculos más conservadores, pueda impedir que Francisco pueda tomar una decisión que considere correcta para la iglesia", escribió en su cuenta de Twitter.

McElwee señaló los cambios que Benedicto realizó en su papado para crear normas que permitieran a sacerdotes anglicanos unirse al catolicismo mientras permanecían casados.

El celibato sacerdotal fue introducido hace más de 900 años yno está explícitamente requerido por la Biblia pero ha sido una disciplina requerida por la iglesia ante el argumento de que un sacerdote no debe distraerse de sus labores de cosas consideradas como "mundanas" como tener una esposa o una familia.

El libro del papa emérito Ratzinger y el cardenal de Ghana Sarah es publicado después de la ola de críticas que generó el drama de la película de Netflix " Los dos papas" que exponen la relación entre Benedicto XVI y el Papa Francisco.

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