CONDADO DE ORANGE, California. – Un jurado encontró culpables a John Andrés González y Jacqueline Navarro de abuso infantil grave y poner en peligro a un menor, luego de que su hijo recién nacido sufriera daño cerebral irreversible como resultado de desnutrición severa y tratamientos alternativos extremos aplicados por sus propios padres.
Padres son acusados de abuso infantil tras dejar a su bebé ciego y cuadrapléjico en el condado de Orange
John González y Jacqueline Navarro fueron condenados por abuso infantil grave debido a que alimentaban a su bebé solo con frutas y soya, causándole daño cerebral irreversible que lo dejó ciego, sin poder hablar y caminar.
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UnivisionLa mujer, identificada como Rosalina Luna Vargas, madre de dos hijos adolescentes, fue detenida por agentes de ICE en Pasadena el 28 de junio. Un video muestra a los hijos intentando evitar que su madre sea llevada por los agentes.
Video Agentes de ICE detienen a una madre frente a sus hijos en Pasadena
El caso ha conmocionado al sur de California, luego de que la pareja, seguidores de ideologías naturopáticas, negara alimentación adecuada a su hijo y lo sometió a saunas calientes, baños de hielo y ayunos prolongados, con la creencia de que esas prácticas lo sanarían.
Daño neurológico permanente
El bebé, nacido en septiembre de 2019, fue llevado al Hospital Hoag en Newport Beach el 1 de agosto de 2020, con solo 10 meses de edad. Según el personal médico, el menor llegó catatónico, con el cuerpo grisáceo, demacrado, hipoglucemia severa, hipoxia y convulsiones constantes.
Fue trasladado de urgencia al Hospital Infantil del Condado de Orange (CHOC), donde los médicos determinaron que sufría daño neurológico permanente como consecuencia directa de la inanición y la falta de atención médica oportuna.
Actualmente, con cinco años, el niño está ciego, no puede hablar ni caminar, y depende totalmente del cuidado de su abuela paterna, Patrizia Sánchez, quien había denunciado 14 veces el abuso ante las autoridades de bienestar infantil sin obtener respuesta.
“La inanición lo sanaría”
De acuerdo con la Fiscalía del Condado de Orange, González y Navarro, residentes de Lindsay, condado de Tulare, rechazaron la fórmula infantil y la leche materna por considerarlas “tóxicas”, y optaron por alimentar al bebé solo con frutas, verduras y fórmula de soya.
La pareja pertenece a una comunidad que practica el frugivorismo vegano y un patrón de alimentación altamente restrictivo llamado “mucus-free”, que se centra en el consumo de frutas, frutos secos y semillas, eliminando todos los productos animales y alimentos que se cree que producen mucosidad.
Durante su hospitalización, González incluso se opuso a tratamientos médicos que podrían haber salvado la vida de su hijo, insistiendo en que “la inanición lo sanaría”.
El fiscal de distrito Todd Spitzer calificó el caso como “una tragedia alimentada por creencias extremas” y añadió: “Este niño inocente sufrió prácticamente desde su primer aliento”.
Indemnización histórica por negligencia
Tras una demanda civil, el condado de Tulare fue obligado a pagar 32 millones de dólares por no haber protegido al menor pese a múltiples alertas de su abuela. Es el acuerdo más alto en la historia del estado relacionado con negligencia infantil por parte de los servicios de protección.
González, de 38 años, y Navarro, de 45, fueron hallados culpables de múltiples cargos graves, incluyendo abuso infantil agravado. Permanecen detenidos sin derecho a fianza y serán sentenciados el 25 de julio en el Centro de Justicia Central de Santa Ana. Enfrentan hasta 12 años de prisión cada uno.
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