BUCKS, Pensilvania. – El negocio de una red de tráfico de drogas quedó desmantelado, cuando agentes descubrieron que cargamentos de cocaína y metanfetaminas llegaban de forma oculta a Pensilvania.
Así fue como agentes desmantelaron una red de presuntos narcos que movían cargamentos de California a Pensilvania
Fue desmantelada una red de tráfico de drogas que operaba entre California y Pensilvania: se les hallaron miles de dólares en metanfetamina y cocaína ocultos en bocinas. Esto es lo que se sabe hasta ahora.
El Fiscal del Distrito del Condado Bucks Jennifer Schorn informó que el traslado de estas drogas era por medio de bocinas de karaoke o cajas de madera y que provenían desde Los Ángeles, California.
Hasta ahora, seis hombres, dos de ellos hermanos, enfrentan cargos criminales por supuestamente ser parte de la banda delictiva liderada presuntamente por Matthew James Byrne, de 43 años.
De México a Los Ángeles y de aquí a las calles de Pensilvania
Al seguirle la pista a los envíos, se dieron cuenta de que Byrne viajaba dos veces al mes a Los Ángeles para comprar las drogas y enviarlas a sitios en los condados de Bucks y Montgomery.
California era el sitio elegido para comprar las drogas, según Byrne, por su proximidad a México y el menor costo de las drogas ilegales.
En un trabajo conjunto, autoridades estatales y federales lograron interceptar tres de 12 envíos, con una carga en metanfetamina y cocaína valuada en alrededor de $1.2 millones.
Durante los últimos seis meses, la organización envió aproximadamente $5 millones en drogas. De los 12 envíos rastreados, la mayoría fueron enviados a la casa de Joseph Byrne en el vecindario de Gable Hill Road, en Briston Township.
Así desarticularon a la red de traficantes
El 18 de julio pasado, los detectives allanaron residencias vinculadas con el grupo delictivo en Filadelfia, Delaware y Montgomery, donde decomisaron cocaína y parafernalia para procesarla, así como armas de fuego y dinero en efectivo que sumaba $20,000.
“El uso de proveedores de envío y el uso de nuestros socios K-9 en otras agencias policiales ayudaron a identificar los presuntos narcóticos y drogas que se enviaban”, dijo en conferencia de prensa Jennifer Schorn.
De los seis sospechosos han sido detenidos el presunto líder de la banda, Mathew James Byrne, su hermano Joseph Byrne, de 47 años; Khalik Kemp, de 34 años y Christian Garwood, de 55 años. Ellos fueron ingresados al centro correccional de Bucks County.
Por otro lado, falta por detener a dos hombres originarios de California: Ralph Brooks, de 42 años, y Chaz Harness-Walker, de 40. La investigación es una colaboración entre los detectives del condado, Seguridad Nacional y la Oficina del Fiscal General.
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