Cocinero hispano demanda a La Barbecue, restaurante de Austin, tras perder cuatro dedos de su mano en accidente laboral

AUSTIN; Texas.- Un cocinero hispano demandó legalmente al restaurante La Barbecue, en Austin, luego de que al perder cuatro dedos de su mano en un accidente laboral, propietarios del establecimiento intentaran defraudarlo para no pagarle una compensación.

Los hechos se remontan a la tarde del 22 de julio del 2016, cuando Aaron Gómez, un cocinero del restaurante La Barbecue, sufrió un accidente en el que su mano quedó atrapada en una moledora de carne.

Según documentos oficiales de la demanda, como parte de su trabajo, Aaron tenía que preparar esa tarde 30 brisket y varias salchichas. A pesar de que Aaron no tenía experiencia en el oficio, se le instruyó que usara una moledora de carne eléctrica que incluso no funcionaba bien.

Presuntamente, la moledora eléctrica no contaba con un botón de apagado y encendido, por lo que tenía que ser conectada y desconectada directamente a la energía eléctrica para que pudiera funcionar.

El día del accidente, Aaron conectó la moledora con su mano derecha y de inmediato los dientes de la moledora atraparon el guante que tenía puesto en su mano izquierda, estirándola y engullendo sus dedos.

En segundos, la moledora trituró los dedos de Aaron, quien sintió una oleada de sangre que salía del guante.

A pesar de los esfuerzos de sus compañeros de salvar las extremidades, Aaron perdió sus cuatro dedos de la mano izquierda, salvando así solo el pulgar.

Aaron fue trasladado de inmediato al Hospital Brackenridge, en donde se le realizaron varias cirugías, y debido a que sus dedos estaban destruidos, doctores tuvieron que remover tejido y huesos para poder cerrar sus heridas.

Restaurante intentaba hacerlo firmar documentos en inglés que Aaron no entendía

Al día siguiente, mientras se recuperaba de las cirugías, Aaron recibió en el hospital a una mujer que presuntamente se identificó como una amiga cercana de las dueñas del restaurante La Barbacue, LeAnn Mueller y Alison Clem.

La mujer le presentó a Aaron varios papeles que quería que firmara, en los que se culpaba a Aaron por el accidente laboral que acababa de sufrir

Pero debido a que los documentos estaban en inglés, idioma que Aaron no entiende ni habla muy bien, se negó a firmarlos.

Cuatro días después, cuando Aaron ya se encontraba en su casa, recibió a LeAnn Mueller, quien le llevó una canasta con regalos y los mismos papeles que le exigía que firmara.

Al negarse a firmarlos de nuevo, Aaron buscó asistencia legal.

Acusan al restaurante La Barbecue, en Austin, por fraude

Durante el desarrollo del caso por parte de los abogados de Aaron, se descubrió que Mueller y Clem contactaron a un agente de seguros para contratar una póliza de seguro de compensación para sus trabajadores días después del accidente y lograron que el agente extendiera la póliza retroactivamente, hasta días antes del accidente que sufrió Aaron, sin declararlo a la aseguradora.

Después, las propietarias de La Barbecue le informaron a los abogados de Aaron que el restaurante sí contaba con una póliza de compensación para sus trabajadores al momento del accidente, lo cual era falso.

Los documentos legales alegan que ante la posibilidad de que Aaron demandara por daños al restaurante, las dueñas de La Barbecue obtuvieron una póliza fraudulentamente para no pagarle a Aaron la compensación que le correspondía.

Tener una póliza de compensación protege a los negocios de demandas civiles como esta, en la que los empleados pueden exigir una compensación más amplia que lo que ofrece la póliza, que sería el reembolso limitado de cuentas médicas y solamente el 70% de los salarios perdidos.

En agosto del 2022, seis años después, el Estado de Texas acusó a La Barbecue de fraude y la empresa de seguros que extendió la póliza alegó que las dueñas del restaurante conspiraron para cometer el fraude.

Los abogados de Aaron Gómez dijeron este martes que éste es un padre de familia hispano ejemplar y que trabaja arduamente para mantener a sus seis hijos.

Además, dijeron que este accidente le cambió la vida, quitándole movilidad de su mano dominante y evitando su desempeño completo en otros empleos.

“Este accidente cambió las vidas de nuestro cliente y de su familia. Lo hirieron doblemente: primero con la pérdida de sus dedos al trabajar en condiciones deplorables, y después al engañarlo para cometer fraude y evitar que Aaron tuviera acceso a su compensación”, dijo Jon Clark, abogado de Aaron.

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