Netflix lanza documental sobre asesinato del niño Gabriel Fernández

La plataforma mundial de videos presenta un filme con los detalles más desgarradores de la muerte por tortura y abusos de un niño de 8 años bajo la supervisión del Departamento de Servicios a Niños y Familia de Los Ángeles.

Por:
Univision
La fiscalía del condado de Los Ángeles dio a conocer los detalles de la tortura a la que fue sometido el niño Gabriel Fernández de ocho años de edad supuestamente por Isauro Aguirre el pasado 22 de mayo del 2013. Este ha sido catalogado como uno de los peores casos de abuso infantil del condado.
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El caso de la m uerte del niño Gabriel Fernández tras meses de maltratos y abusos quedará imortalizado en un filme en el que la plataforma de videos mundial presentará uno de los casos más desgarradores en la historia criminal contra menores en California y cuestiona al sistema judicial del condado de Los Ángeles.

"Este caso es muy emotivo, agradeceremos a las personas sensibles abandonar la sala", es la petición que el alguacil de la Suprema Corte de Los Ángeles realizó durante el primer día del jucio del niño de Pamdale. Con estas palabras inicia el trailer del documental que estará disponible en la plataforma a partir del 26 de febrero.

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El niño murió el 24 de mayo de 2013 por constantes agresiones y abusos de su madre y el novio de esta. A pesar de que la situacion del menor era conocida por un grupo de trabajadores sociales y se encontraba bajo los cuidados del Departamento de Niños y Familia no se evitó el fatal desenlace.

La madre de Gabriel Fernández, Pearl Fernández, y su novio, Isauro Aguirre, fueron sentenciados tras la tortura y el asesinato del niño de 8 años en 2013. Este caso se convirtió en la bandera para reformar el sistema de protección infantil del condado de Los Ángeles.
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La madre del niño, Pearl Fernández, de 32 años, y su exnovio, Isauro Aguirre, de 35, fueron enjuiciados y la fiscalía pidió la pena capital para ambos tras presentar las evidencias en el juicio que indicaron meses de palizas y torturas.

El documental expondrá los abusos a los que fue sometido el menor, así como las posturas de los funcionarios locales y organizaciones que debieron protegerle pero lo dejaron en las manos de sus verdugos. Según con los testimonios que dieron sus hermanos en la corte, el pequeño Gabriel fue rociado con gas pimienta, obligado a comer comida rancia, forzado a consumir su propio vómito y heces de gato. También se indicó que el niño permanecía recluido dentro de un gabinete y en ocasiones fue forzado a orinar y defecar dentro ese espacio reducido.

El reporte del medico forence determinó que el menor sufrió lesiones graves en todo su cuerpo, entre las que se encontraban: fractura osea, quemaduras en todo su cuerpo, mallugaduras, falta de piel en su cuello y ematomas en todas sus extremidades.


Los fiscales entablaron una denuncia contra los trabajadores sociales con el Departamento de Servicios para Niños y Familias del Condado de Los Ángeles que estaban involucrados en el caso, argumentando que no tomaron las medidas adecuadas para proteger al niño y falsificaron documentos relacionados con su caso.


Dos trabajadoras sociales, Stefanie Rodríguez, de 34 años, y Patricia Clement, de 69, fueron acusadas junto con dos supervisores, Kevin Bom, de 40 años, y Gregory Merritt, de 64, con un delito grave de abuso infantil y falsificación de registros públicos.

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La fiscal del distrito del condado de Los Ángeles, Jackie Lacey indicó que los trabajadores sociales "minimizaron la importancia de las heridas físicas, mentales y emocionales que sufrió Gabriel" y aseguró que los funcionarios "permitieron que un chico vulnerable permaneciera en casa y continuara siendo abusado".

Un informe de la autopsia del menor mostró hematomas, fracturas y cortes en todo el cuerpo, incluida la ingle y perdigones incrustados en su cuerpo.

Gabrielito falleció después ser agredido y abusado por los responsables de su custodia. Pearl Sinthia Fernández, de 35 años de edad y madre del pequeño, 
<a href="https://www.univision.com/los-angeles/kmex/noticias/muertes/crimen-de-gabrielito-pena-de-muerte-para-el-padastro-y-cadena-perpetua-para-la-madre-del-nino-de-8-anos">fue sentenciada a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.</a> Isauro Aguirre, un exguardia de seguridad de 37 años y novio de la madre, fue sentenciado a muerte por el juez de la Corte Superior del condado de Los Ángeles.
Los problemas de drogadicción Pearl Sinthia Fernández permitieron que sus abuelos lograran la custodia de Gabriel a los pocos meses de nacido. Siete años después y luego de una breve estadía en un centro de rehabilitación Fernández recuperó a su hijo, aparentemente con la intención de obtener beneficios de la asistencia pública y del IRS. En la fotografía, Fernández en su presentación a la corte cuatro días después de la muerte de Gabrielito, el 28 de mayo de 2013.
La fiscalía detalló en el juicio que Gabriel vivió un infierno que duró ocho meses, desde el día que Pearl Fernández reclamó y obtuvo la custodia de su hijo en septiembre de 2012. 
<a href="https://www.univision.com/los-angeles/kmex/noticias/juicios/los-13-dias-de-tortura-que-llevaron-a-la-muerte-a-gabrielito-en-los-angeles">13 días antes de su muerte había sido retirado de la escuela y desde entonces, hasta que llegó al hospital</a>, Gabrielito sufrió jornadas intensas de tortura. En la fotografía, el pequeño antes de ser retirado de clases, con su rostro visiblemente maltratado.
“Cada centímetro de Gabriel estaba magullado e hinchado. Su piel era de color negro y azul. Recuerdo que al tocarlo estaba frío”, declaró en el juicio Emily Rebar, una de las enfermeras que atendió al niño antes de morir. Otra enfermera aseguró que 
<a href="https://www.univision.com/los-angeles/kmex/noticias/juicios/gabrielito-no-tenia-piel-en-el-cuello-y-un-balin-estaba-en-su-ingle-el-testimonio-de-una-enfermera-en-la-corte">el pequeño tenía lesiones en el cuello y en la ingle causadas por una pistola de aire</a>. Gabrielito fue forzado a dormir dentro de un gabinete ubicado en la recámara de los acusados, con un calcetín dentro de la boca y una venda sobre los ojos. La imagen corresponde a una de las evidencias presentadas en la corte para explicar las distintas lesiones encontradas en el cuerpo del niño.
La fiscalía pidió que se analizaran 
<a href="https://www.univision.com/los-angeles/kmex/noticias/juicios/juicio-por-la-muerte-de-gabrielito-tenia-arena-para-gato-en-el-estomago-y-habia-cientos-de-manchas-de-sangre-en-la-casa">varias manchas de sangre en las paredes de vivienda donde vivía el pequeño</a> y todas coincidieron con el ADN de Gabriel. Testimonios de familiares también ayudaron en la conclusión de que la madre y su pareja abusaron severamente del pequeño durante los meses previos a su muerte.
Jonathan Hatami, fiscal de distrito del caso, explicó que Isauro Aguirre “le dio un puñetazo y le siguió dando puñetazos” hasta que el pequeño perdió el conocimiento y tuvo que ser hospitalizado. Los médicos indicaron que el niño tenía muerte cerebral. Dos días después, el 24 de mayo, murió. En la imagen Isauro Aguirre en su presentación a la corte el 28 de mayo de 2013.
Dos días antes de la muerte del pequeño, Aguirre lo habría golpeado tantas veces que hasta perdió la cuenta, según señala la acusación. Posteriormente confesó a los investigadores que le dio 10 golpes en la cabeza y al menos 20 en el cuerpo. La fiscalía agregó que Aguirre estrelló la cabeza del menor contra una pared con tanta fuerza que le habría fracturado el cráneo.
Cuatro trabajadores del Departamento de Servicios a los Niños y la Familia del condado de Los Ángeles tenían la responsabilidad legal de proteger a Gabriel cuando el caso fue abierto en octubre de 2012. Stefanie Rodríguez y Patricia Clement, y sus supervisores: Kevin Bom y Gregory Merritt, 
<a href="https://www.univision.com/los-angeles/kmex/noticias/abuso-infantil/acusan-a-trabajadores-sociales-de-negligencia-por-la-muerte-de-nino-torturado">enfrentan cargos por abuso infantil y falsificación de documentos públicos</a>. En la fotografía los familiares de Gabriel durante una rueda de prensa en abril de 2016.
Rodríguez y Clement falsifiacaron los reportes en los que debieron documentar que Gabriel tenía evidencias físicas de abuso. En la fotografía, una tarjeta que hizo el pequeño para un día de las madres.
En un aparente argumento de defensa, Isauro Aguirre y Pearl Fernández, quienes enfrentaron juicios separados, habrían declarado a las autoridades que al niño “le gustaba golpearse a sí mismo, que era gay y que quería matarse”. La investigación determinó que el niño también 
<a href="https://www.univision.com/los-angeles/kmex/noticias/juicios/juicio-por-la-muerte-de-gabrielito-tenia-arena-para-gato-en-el-estomago-y-habia-cientos-de-manchas-de-sangre-en-la-casa">había sido obligado a comer heces de gato.</a>
Isauro Aguirre y Pearl Sinthia Fernández durante la audiencia de sentencia el jueves 7 de junio de 2018 en Palmdale, California. Fernández, quien se declaró culpable de asesinato de su hijo en febrero, fue condenada a cadena perpetua. Aguirre fue hallado culpable de homicidio en primer grado el pasado 15 de noviembre y sentenciado a muerte.
Luego de leer la sentencia, el juez George Lomeli calificó el crimen como "horrendo, inhumano y peor que el demonio". "Espero que piense sobre el dolor que causó a este niño y que te torture", añadió. La fiscal de distrito del condado de Los Ángeles, Jackie Lacey, aseguró que "este caso demostró cómo el mal no solamente puede infligir un daño duradero a quienes amaron a Gabriel, sino también a nuestra sociedad".
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Gabrielito falleció después ser agredido y abusado por los responsables de su custodia. Pearl Sinthia Fernández, de 35 años de edad y madre del pequeño, fue sentenciada a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional. Isauro Aguirre, un exguardia de seguridad de 37 años y novio de la madre, fue sentenciado a muerte por el juez de la Corte Superior del condado de Los Ángeles.
Imagen Univision


Si el caso contra los trabajadores sociales hubiera pasado a juicio y los acusados hubieran sido condenados, podrían haber enfrentado más de 10 años de prisión.

Pero el lunes, un panel de tres jueces del Tribunal de Apelaciones del 2° Distrito emitió una opinión ordenando a un tribunal inferior desestimar los cargos contra los
trabajadores sociales. En una opinión de 2-1, el panel concluyó que no había causa probable para detener a los cuatro acusados de abuso infantil y falsificación de documentos.

" Concluimos que los peticionarios nunca tuvieron el deber requerido de controlar a los abusadores y no tuvieron cuidado o custodia de Gabriel a los efectos del Código Penal sección 273a, subdivisión (a). Llegamos a la conclusión de que los peticionarios no eran oficiales en el sentido de Código de Gobierno sección 6200", escribió el juez Francis Rothschild.

"Por lo tanto, no hay causa probable para retenerlos por cargos de violar esas leyes y el tribunal de primera instancia debería haber otorgado las mociones para desestimar", agregó Rothschild.

Hasta el momento se desconoce si la oficina del fiscal de distrito del condado de Los Ángeles planea apelar la decisión del tribunal de apelaciones o continuar con el caso.