Un segundo objeto interestelar visita nuestro sistema solar y anima a los científicos a viajar hacia él

Un cometa descubierto por un astrónomo amateur en Crimea ha entusiasmado a los científicos a estudiarlo. Se trata del segundo visitante de este tipo descubierto después de 'Oumuamua' que fue visto en 2017. Entre las propuestas se encuentra enviar una nave espacial al objeto para estudiar el material que han recolectado a lo largo de su viaje interestelar.

Por:
Univision
El cometa C/2006 P1 McNaught fotografiado al atardecer sobre el puerto de Sydney el 16 de enero de 2007 en Sydney, Australia.
El cometa C/2006 P1 McNaught fotografiado al atardecer sobre el puerto de Sydney el 16 de enero de 2007 en Sydney, Australia.
Imagen John Pryke/Getty Images

Fue la semana pasada cuando el Minor Planet Center, el Centro de Planetas Menores en la Universidad de Harvard (MPC) anunció que los astrónomos habían descubierto el segundo objeto interestelar registrado. Se trata del cometa C/2019 Q4 (Borisov) descubierto el 30 de agosto en Crimea por Gennady Borisov, un astrónomo aficionado.

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El MPC confirmó que tiene una órbita hiperbólica, lo que significa que viaja con suficiente velocidad para escapar de la gravedad y señala que dicho objeto no se originó en el sistema solar, por lo que su descubrimiento esta animando a los astrónomos a estudiarlo por tratarse de un visitante interestelar.

Es el segundo visitante de este tipo descubierto después de ' Oumuamua' que fue visto en 2017, pero es el primer cometa.

Los investigadores han comenzado a encontrar diferencias entre los objetos. El Oumuamua medía cerca de 600 pies (unos 170 metros), pero el C-2019 Q4 tiene entre 6,500 y 52,400 pies (2 y 16 kilómetros) de diámetro, según las observaciones iniciales, además cuenta con una cola borrosa, una característica de los cometas y que no fue observada en el Oumuamua.

Al confirmarse de manera oficial el origen interestelar del nuevo objeto C-2019 Q4 (Borisov), el nombre del cometa deberá ser cambiado para comenzar con 2I, lo que indicaría que se trata del segundo objeto descubierto que proviene fuera del sistema solar.

Actualmente el Borisov se encuentra muy cerca del sol lo que dificulta las condiciones para su observación.

Según las imágenes que los astrónomos lograron captar del Oumuamua no mostraron una actividad comentaria, por lo que están casi seguros de que se trató de un asteroide.

Los cometas y los asteroides son dos objetos espaciales diferentes. Un asteroide está compuesto de roca y metal mientras los cometas están compuestos de hielo y polvo. Se tratan de restos de materiales que dieron lugar a planetas gigantes y que nunca se incorporaron a ellos.

La atracción por el cometa C-2019 Q4

La alegría de los astrónomos por el cometa C-2019 Q4 (Borisov) nace debido a que dicho objeto podrá ser estudiado por lo menos durante un año. El próximo 8 de diciembre el cometa pasará por el punto más cercano al sol.

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Según los astrónomos, este cometa estará por mucho más tiempo en nuestro sistema solar lo que permitirá a los investigadores realizar estudios más completos.

Muchos objetos similares pasan a través de nuestro sistema solar de forma regular y muchos de ellos permanecen, por lo que los científicos creen que los objetos interestelares podrían proporcionar datos únicos sobre otros sistemas estelares y sus planetas sin tener que volar hacia ellos.

Estos objetos que viajan han recogido material a lo largo de su camino por lo que su composición y características de su superficie pueden decirnos mucho sobre lo que existe fuera de nuestra galaxia.

Cuando la órbita de un cometa pasa por nuestro sistema solar, parte del hielo y del gas del cometa son calentados por el Sol expandiéndose hasta formar una nube alrededor del centro sólido, según lo explica la NASA.

Un cometa puede tener un núcleo de unos pocos pies de diámetro mientras que la nube que se llama "coma" puede tener miles de pies de diámetro. Y esa es la razón por la cual la cola de polvo y gas de un cometa siempre apunta lejos del Sol, incluso cuando el cometa se aleja del mismo.

La foto del visitante interestelar

Los astrónomos del Telescopio Gemini North en Hawaii capturaron la imagen del C-2019 Q4 (Borisov) durante la noche del 10 de septiembre y muestra una cola pronunciada, un indicador de la desgasificación, una característica de un cometa.

Imagen compuesta en dos colores del Observatorio Géminis de C/2019 Q4 (Borisov) que es el primer cometa interestelar jamás identificado.
Imagen compuesta en dos colores del Observatorio Géminis de C/2019 Q4 (Borisov) que es el primer cometa interestelar jamás identificado.
Imagen <i>Gemini Observatory/NSF/AURA </i>

Ahora que el C/2019 Q4 (Borisov) ha sido detectado, los investigadores en todo el mundo están haciendo propuestas para poder reunirse con él.

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Un grupo de científicos de la Initiative for Interstellar Studies (i4is) en Reino Unido, evaluaron la viabilidad de enviar una misión a este cometa interestelar utilizando tecnología existente y tienen varias opciones.

Algunas de ellas incluyen enviar una nave espacial al encuentro con el objeto interestelar como un tipo de vehículo de lanzamiento óptimo de la NASA o el Falcon Heavy de SpaceX.

Los investigadores determinaron que la humanidad tiene la capacidad de reunirse con un objeto interestelar utilizando la tecnología existente por lo que han creado una misión que puede hacer que eso ocurra.

"Nuestros resultados muestran que tanto para'Oumuamua como para C/2019 Q4 (Borisov), ya tenemos la tecnología para visitar estos objetos", dijo el Dr. Andreas M. Hein, director ejecutivo de la junta directiva de i4is al Universe Today.

No es la primera vez que i4is propone enviar una nave espacial para encontrarse con un objeto interestelar. En 2017, el Dr. Hein y otros investigadores elaboraron un documento titulado Proyecto Lyra: Envío de una nave espacial a 1I/'Oumuamua (antes A/2017 U1) el asteroide interestelar el cual se llevó a cabo con la ayuda de la compañía de prospección de asteroides Asteroid Initiatives LLC.

Los telescopios del futuro serán capaces de detectar a los objetos interestelares con mayor anticipación para poder enviar una nave espacial en una misión de encuentro.

"Así tenemos la tecnología para hacerlo y con el descubrimiento de C/2019 Q4 (Borisov) también sabemos que probablemente tengamos muchas oportunidades de volar a un objeto así", dijo Dr. Hein.

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Imagen Anadolu Agency/Getty Images
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