A pesar de haber sido escupido, golpeado y rasguñado en la cara, Russell Miller no se arrepiente de la confrontación que tuvo con la exactriz de la serie Baywatch y 'playmate', Patricia Cornwall, durante un vuelo de la aerolínea Delta, el pasado 23 de diciembre. Es más, presume que sus nietos lo felicitaron por su acción.
Pasajero agredido por exactriz de Baywatch no se arrepiente de haberla confrontado en un vuelo de Delta
Russell Miller, de 69 años, asegura que se indignó porque Patricia Cornwall se comportó como una persona que se siente por encima de todos los demás: “Trata de usar lo que cree que es una posición de privilegio.”
El exgerente de farmacia de Seminole, Florida, le reclamó a Cornwall su comportamiento luego que la mujer de 51 años se comparara con la activista por los derechos civiles Rosa Parks. Esto, luego de que al regresar del baño la asistente de vuelo le pidiera que se sentara en otro lugar, mientras culminaba el servicio de bebidas y podía moverse para permitirle pasar.
En entrevista con el Daily Mail, Russell Miller reiteró que Patricia Cornwall se comportó como "una Karen”, como se le describe en tiempos recientes a personas que se sienten por encima de los demás y así actúan.
“Ella es una ‘Karen’, una mujer blanca, privilegiada, que no puede llevarse bien con nadie y trata de usar lo que cree que es una posición de privilegio y hacer que otras personas se sientan mal”, resumió Miller.
Órdenes de restricción en su contra
De acuerdo con el Daily Mail, el padrastro de la exporrista de los Raiders de la NFL pidió una orden de protección contra ella, desde julio de 2020, porque supuestamente amenazó con matar a su madre y a él.
Monica Cummings, la cuñada de Cornwall, también tiene una orden de protección contra ella, que data de diciembre de 2020, porque “tiene un historial de arrebatos violentos y comportamiento errático destructivo.”
El pasado 23 de diciembre, Patricia Cornwall fue arrestada tras discutir y agredir al pasajero Russell Miller, de 69 años, durante un vuelo de Tampa a Atlanta, de Delta Air Lines. Actualmente, la mujer se encuentra libre, bajo fianza.
Un año de prisión y 100 mil dólares de multa es el castigo máximo que podría tener la acusada.
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