Comerciantes de la Placita Olvera preocupados por disminución de clientes debido a la presencia de indigentes

La falta de baños y el aumento de personas desamparadas en el lugar ha afectado los negocios. Comerciantes exigen cambios a la administración local.

Por:
Univision
"Muchas compañías han optado por no traer más a sus turistas, lo que ha causado bajas ventas", asegura Manny Paz, quien además manifiesta que la presencia de desamparados en la plaza ha contribuido a "un alto nivel del crimen". Este jueves, comerciantes y representantes de la ciudad se reunieron para discutir el problema.
Video Comerciantes de la Placita Olvera dicen que ha disminuido el flujo de clientes por la presencia de indigentes

La Placita Olvera, conocida como el lugar donde nació la ciudad de Los Ángeles y que es considerada un patrimonio histórico, ha cambiado su rostro debido a la cantidad de indigentes de la zona que cada vez más permanecen en sus alrededores, aseguran comerciantes de la zona que han manifestado su preocupación por la disminución de clientes que llegan a sus negocios.

"Muchas compañías han optado por no traer más a sus turistas, lo que ha causado bajas ventas", asegura Manny Paz, comerciante de la Placita Olvera, quien además manifiesta que la presencia de desamparados en la plaza ha contribuido a que muchos "comerciantes dejaran sus lugares de trabajo debido un alto nivel del crimen".

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El señor Manny Paz ha sido uno de los comerciantes de la placita Olvera durante las últimas tres décadas y asegura que la actual administración ha afectado negativamente la imagen del lugar.

"La calle Olvera ha venido sufriendo deterioros durante los últimos siete años. Cuando nosotros hemos presentado quejas de lo que está mal, los mismos administradores lo usan en contra de uno, amenazando que nos van a cancelar el contrato", dijo Paz.

Para discutir este problema y buscar soluciones, la Junta de la Comisión de los Comerciantes de la Placita Olvera y los representantes de la ciudad se reunieron este jueves.

Uno de los temas que más aquejan a los comerciantes es la falta de baños en lugares públicos: “los baños debajo del kiosko son un foco de asaltos”, explica Paz.

Ante estos señalamientos Univision 34 habló con el administrador del centro histórico Chris Espinoza quien anunció su renuncia no sin antes defender su gestión. "En un mes estaremos haciendo la reapertura de los baños completamente renovados", dijo Espinoza. Además dijo "sabemos que el problema de los indigentes es un gran reto para nosotros y la ciudad de Los Ángeles. Estamos tratando de hacer lo mejor para los visitantes y los comerciantes".

Sin embargo, algunas personas que visitan la Placita Olvera asguran que el alto costo de las comidas, la falta de estacionamientos y el aumento de los precios de las artesanías ha influido en la disminución de clientes del lugar.

"El buscar estacionamiento es un dolor de cabeza, la comida no esta buena y los precios de las artesanías están super caras y no hay tanto entretenimiento solo el dj y los viejitos bailando deberían tener mas cosas que hacer y tendran más visitantes", escribió Carly-Yazmin Alvarado a Univision 34.

A sus 32 años de edad, tiene como visión implementar más tecnología en el lugar, pues asegura que las redes sociales son "súper importantes para el crecimiento de los negocios". Nació en Tampico, Tamaulipas, a los 7 años llegó a EEUU, posteriormente se graduó de la universidad y ha trabajado con organizaciones que fomentan la participación cívica.
Video La historia de Dulce Vásquez, una mexicoamericana que es la nueva comisionada de la Placita Olvera
En California se estima una población de casi 120,000 personas que viven en las calles. A pesar de que el año pasado la ciudad de Los Ángeles creó espacios habitacionales para dar cabida a 9,000 indigentes, el número de personas sin techo en este condado tuvo un repunte en 2017.
James Harris, de 54 años, veterano de guerra que durante las últimas trés décadas ha padecido sida. Luego de que su medicamento dejó de surtir efecto, cayó en depresión y fue desalojado. Dice sentirse como una persona insignificante, vulnerable, pero que lucha por sobrevivir.
Skid Row, en el centro de Los Ángeles, es la zona de mayor concentración de indigentes en Estados Unidos. Ahí habitan casi la mitad de los más de 34,000 que hay en la ciudad.
Moi Williams, de 59 años, desde hace cuatro años vive en las calles de la ciudad, las cuales, dice, son cómodas para dormir. "No molesto a nadie, nadie me molesta".
James Williams, de 50 años, quien ha sido ‘homeless’ por las últimas dos décadas, fue dejado por un taxi en este túnel del centro de Los Ángeles luego de que fue dado de alta del hospital en el que estuvo internado durante la última semana de agosto debido a problemas respiratorios. Dice que no quiere ir a un refugio porque hay demasiadas personas.
Jorge Ortega, de 40 años, empezó a vivir en las calles hace 10 años, cuando perdió su trabajo en el Aeropuerto de Los Ángeles (LAX). Tiene un hijo que vive en Washington, quien no sabe que su padre es un indigente que vive en Skid Row.
Portando una gorra con el lema presidencial de Donald Trump 'Make America Great Again', Nathanael Baisley, de 38 años, viaja en un autobús de Los Ángeles a Santa Mónica para pasar la noche en la playa.
Indigentes hacen fila para el desayuno que ofrece la Iglesia de Nuestra Señora Reina de los Ángeles en la Placita Olvera de Los Ángeles.
Bernadette Ortiz, de 34 años, recientemente dio a luz a su quinto hijo, del cual se embarazó en la carpa donde vive con su prometido en San José, California.
Una joven mujer que vive en las calles de Skid Row se tambalea sobre una caja luego de haberse inyectado una dósis de heroína.
Dolores Epps, de 41 años, es madre de una niña de 9 y un adolescente de 15, con quienes ha vivido en refugios para desamparados durante cinco años tras perder su trabajo en una estética, y dice que aún sigue cortando el pelo. "Pero no se los corto a todos, solo a las personas que están limpias".
Un hombre con enfermedad mental habla consigo mismo mientras se acurruca en una acera de Skid Row. Se estima que el 40% de los indigentes padece algún tipo de trastorno mental severo o es adicto a las drogas.
John Ruiz, de 9 años, vive con sus papás y cuatro hermanos en una casa rodante en Mountain View pues sus padres ya no pudieron pagar la renta de un apartamento. El censo de indigentes en el condado de Los Ángeles indica que hay 5,091 menores de edad viviendo en las calles.
Un indigente duerme frente a una estación de la Policía de Los Ángeles (LAPD) en Skid Row.
Bennie Sayee Koffa, de 66 años, es originario de Liberia y llegó a Estados Unidos en 1990 debido a la guerra civil en ese país africano. Terminó en la indigencia en las calles de Seattle, Washington.
Un hombre pasa frente al mural 'Africa Wings' (alas de África) que pintó la artista Colette Miller en Skid Row tras la muerte de un indigente baleado por agentes del LAPD.
Un paramédico examina a un drogadicto que estaba inconsciente en una acera de Skid Row junto a una jeringa con la que aparentemente se inyectó heroína.
"La vivienda aquí está fuera de control, por eso tenemos muchas personas en las calles. No hay a dónde ir", dice Tammy Stephen, de 54 años, quien vive en el Camp Second Chance, un campamento para indigentes en Seattle.
Dos drogadictos alucinan en una acera de Skid Row apestosa a orines.
En medio de una acera de Skid Row, D. J. Meek, de 40 años, se inyecta una dosis de heroína luego de haber fumado 'crystal meth'.
Una mujer con trastorno mental se coloca frente a la cámara mientras detrás de ella un hombre pide limosna en Skid Row.
Indigentes hacen fila para recibir comida en uno de los tantos albergues que hay en Skid Row.
La sobrepoblación de indigentes en Skid Row obliga a dormir hasta en el patio del refugio Midnight Mission.
Una pieza de pan en el suelo frente a Korey Epps, de 44 años, quien tiene una pierna amputada debido a una infección que contrajo al estar encerrado en una cárcel de Seattle.
Daniel Shawn, de 48 años, instala su carpa en una calle, al frente con la panorámica de uno de los rascacielos de Los Ángeles.
Una mujer come un caldo de pollo mientras otros indigentes hacen fila para recibir alimento.
Un indigente de Skid Row camina cargando bolsas de plástico con sus pertencias.
Una carpa de indigentes fue levantada sobre una acera de Skid Row frente a la tienda Lucky Ave en el centro de Los Ángeles.
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En California se estima una población de casi 120,000 personas que viven en las calles. A pesar de que el año pasado la ciudad de Los Ángeles creó espacios habitacionales para dar cabida a 9,000 indigentes, el número de personas sin techo en este condado tuvo un repunte en 2017.
Imagen AP Photo/Jae C. Hong