SANTA ANA, California. – Indignación entre la comunidad ha provocado un video viral que muestra el arresto con violencia de Narciso Barranco, padre de tres infantes de la Marina, por parte de al menos siete agentes federales el pasado fin de semana.
Indignación en Santa Ana por el arresto con violencia de Narciso Barranco por agentes federales
Narciso Barranco, paisajista y padre de tres infantes de la Marina de EE. UU. trabajaba a las afueras de un restaurante IHOP en Tustin cuando fue interceptado por agentes federales y arrestado con violencia.
El incidente ocurrió cuando Barranco, paisajista de 48 años, trabajaba en el área exterior de un restaurante IHOP en Tustin, y fue interceptado por hombres enmascarados y armados a bordo de vehículos sin distintivos, portando solo chalecos de la Patrulla Fronteriza.
Al percatarse de su presencia, el detenido entró en pánico y trató de huir, pero los agentes federales lo alcanzaron de inmediato, lo derribaron, presionaron su cabeza contra el concreto y se arrodillaron sobre su cuello mientras lo golpeaban repetidamente en el rostro.
Posteriormente a empujones y presionando un bastón sobre su nuca, lo obligaron a subir a la parte trasera de una camioneta Chevrolet de color claro sin emblemas, mientras personas en el lugar les pedían a los oficiales que detuvieran la agresión contra Barranco.
Padre de infantes de la Marina de Estados Unidos

Barranco, residente de Tustin, es padre de tres hijos que sirven o han servido en la Infantería de Marina de Estados Unidos. Su hijo mayor, Alejandro Barranco, es veterano de guerra en Afganistán. Los dos hijos menores están actualmente destinados en Camp Pendleton.
Alejandro se enteró del arresto de su padre a través de las redes sociales. Declaró que Narciso no tiene antecedentes penales y había iniciado el proceso para obtener su ciudadanía estadounidense. Durante el arresto, Barranco habría sufrido dislocación de hombro.
“Oficiales enmascarados y no identificados lo rociaron con gas pimienta y lo golpearon en la cara varias veces. Es un hombre bueno y trabajador. Crió a su familia aquí y se ha establecido aquí. Lo que todos vimos hoy fue repugnante y desgarrador”, declaró su familia.
Piden ayuda para evitar la deportación

La alcaldesa de Santa Ana, Valerie Amezcua, también se pronunció sobre el caso. Criticó la actuación de los agentes, calificando su proceder como inadecuado y exigiendo que las autoridades migratorias actúen conforme a la ley y con mayor transparencia.
Mientras tanto, Barranco permanece bajo custodia en un centro de detención en Los Ángeles. Su familia y equipo legal buscan detener un posible proceso de deportación. La campaña en GoFundMe ha recaudado más de $95,000 para costear su defensa legal.
“Historias como esta se repiten una y otra vez. Por favor, ayuden a la familia Barranco con todo lo que puedan para asegurar que reciba la asesoría legal adecuada. Su hijo, Alejandro Narcizo Barranco, está tratando de contactar a su padre”, se lee en la colecta.
Hasta el momento ninguna autoridad federal de migración ha hecho comentarios sobre el incidente.
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