El miércoles 23 de julio de 2025, la directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, acusó al expresidente Barack Obama de “fabricar un falso informe” para dar a entender que Rusia intentó ayudar a Donald Trump en las elecciones de 2016.
Cómo Gabbard confunde informes y conclusiones al acusar a Obama de una “conspiración traicionera” contra Trump
Las supuestas nuevas pruebas en contra del expresidente Obama parecen basarse en conclusiones de investigaciones que la oficina de Gabbard confunde. Ningún jefe de inteligencia había acusado antes a un expresidente de conspirar o de planear un “golpe de Estado” contra otro mandatario. En el camino del debate sobre la presunta injerencia rusa en las elecciones de 2016, Gabbard refresca viejas teorías conspirativas.


Gabbard dijo, en una inesperada aparición en la sala de prensa de la Casa Blanca, que “hay evidencia irrefutable que detalla cómo el presidente Obama y su equipo de seguridad nacional dirigieron la creación de una evaluación de la comunidad de inteligencia que sabían que era falsa”.
Pero lo que presentó Gabbard no es evidencia nueva, pues sale del informe de 2020 que aprobaron los republicanos del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes y que aunque estaba clasificado hasta ahora era del conocimiento de congresistas y la comunidad de inteligencia.
De hecho, sobre el llamado 'Rusiagate', que consumió buena parte de la primera presidencia de Trump, hubo cuatro informes: dos en 2019 ( uno de ellos publicado por el fiscal especial y exdirector del FBI, Robert Mueller y el otro de un organismo interno del Departamento de Justicia); uno bipartidista del Senado en 2020 y uno en 2023, redactado por el fiscal especial John Durham (designado por Trump).
Todos analizaron pruebas sobre la influencia de Rusia en las elecciones presidenciales de 2016, ganadas por Trump frente a Hillary Clinton, y las supuestas irregularidades cometidas por el FBI, la CIA y funcionarios demócratas en las investigaciones del caso.
Esas investigaciones concluyeron, o aceptaron, que Rusia emprendió una campaña para interferir en las elecciones mediante el uso de redes sociales y material pirateado.
La investigación en la Cámara de Representantes y realizada por aliados de Trump, también coincidió en que Rusia llevó a cabo una campaña de interferencia electoral, pero afirmó que el propósito era sembrar el caos en Estados Unidos en lugar de impulsar a Trump. Varios informes critican las acciones de funcionarios de la administración Obama, en particular del FBI, pero ninguno cuestiona las conclusiones fundamentales de que Moscú intentó interferir en las elecciones.
¿Quieres verificar algo? Envíalo a nuestro chat de WhatsApp +1 (305) 447-2910 o pincha aquí:
En la misma declaración, desde la sala de prensa de la Casa Blanca, la directora de Inteligencia Nacional revivió el “ Obamagate”, que ha promovido Trump para señalar un supuesto complot en su contra por parte de lo que llama el "Estados profundo", y el “ Rusiagate”. Ambas calificadas como teorías conspirativas.
En elDetector te explicamos lo que sabemos:
Gabbard no presentó nada nuevo
“El asunto que planteo no es partidista. Concierne a todos los estadounidenses. La información que publicamos hoy demuestra claramente que en 2016 hubo una conspiración traicionera perpetrada por funcionarios al más alto nivel de nuestro gobierno. Su objetivo era subvertir la voluntad del pueblo estadounidense y perpetrar lo que, en esencia, fue un golpe de Estado que duró años, con el fin de intentar usurpar al presidente [Trump] y evitar que cumpliera el mandato que le confirió el pueblo estadounidense”, s e lee en un comunicado, del 18 de julio de 2025, en la página web de la Oficina de la Directora de Inteligencia Nacional.
Tulsi Gabbard también dijo el 20 de julio de 2025 en Fox News: “Tenemos la evidencia para poder avanzar y lograr justicia, sí, para procesar y acusar a los responsables", completando la declaración que había publicado dos días antes en la web de su oficina.
Las supuestas nuevas pruebas en contra del expresidente Obama parecen basarse en conclusiones de investigaciones que la oficina de Gabbard confunde, de acuerdo a la explicación de FactCheck.org, aliado de elDetector:
Por un lado, los servicios de inteligencia señalaron que sí hubo una campaña de influencia rusa para favorecer la candidatura republicana y por otro, concluyeron, después de las elecciones, que Rusia no atacó digitalmente el sistema electoral estadounidense para manipular los votos. Eso está recogido también en el informe de los republicanos en la Cámara de Representantes desclasificado esta semana.
“El informe, redactado y revisado únicamente por (representantes) republicanos, cuestionó el proceso analítico detrás de la conclusión de que el presidente ruso, Vladimir Putin, prefería a Trump sobre Hillary Clinton, pero no cuestionó el hallazgo más amplio de que Rusia interfirió en las elecciones de 2016 para perjudicar a Clinton. Tampoco ofrece ninguna evidencia de conducta criminal por parte de Obama o sus altos funcionarios, a pesar de las afirmaciones de Gabbard de una ‘conspiración traicionera’”, resume Axios.
El informe elaborado por el Comité de Inteligencia del Senado en 2020 señaló que Rusia sí interfirió a favor de Trump, y sus hallazgos, al contrario del reporte republicano en la Cámara Baja, concluyeron que la investigación de las agencias de inteligencia fue “sólida y apolítica”. El senador republicano por Carolina del Norte, Richard Burr, quien presidía el comité, dijo que “la comisión no halló razones para discrepar con la comunidad de inteligencia”.
Uno de los miembros del comité bipartidista en el Senado de 2020 fue el entonces senador Marco Rubio.
Nuestro aliado FactCheck.org recoge las declaraciones del ahora secretario de Estado: “Durante los últimos tres años, el Comité de Inteligencia del Senado llevó a cabo una investigación bipartidista y exhaustiva sobre los esfuerzos de Rusia para influir en las elecciones de 2016 y socavar nuestra democracia”.
Nada concluyente en lo presentado por Gabbard
No hay nada concluyente, o distinto, en lo dicho por Gabbard. Todo gira en torno a la desclasificación del informe validado solamente por el sector republicano en la Cámara de Representantes, que no concluyó algo diferente a lo que otras investigaciones habían dicho.
Pero, ahora el gobierno al que pertenece Rubio está presentando conclusiones diferentes, aunque basado en los mismos materiales.
En su comparecencia ante los medios, la directora de Inteligencia Nacional no supo responder a la prensa si el presidente Obama había cometido un delito, por lo que agregó que remitió las evidencias al FBI.
Horas más tarde, la oficina de la fiscal general, Pam Bondi, anunció la conformación de “equipo especial” para evaluar la evidencia del despacho de Gabbard.
“Intentaron [Obama y los demócratas] manipular las elecciones y los atraparon. Y debería haber consecuencias muy severas por ello ¿saben? [...] es hora de [...] perseguir a la gente”, dijo Trump en un encuentro ante la prensa con el presidente de Filipinas, el pasado 22 de julio de 2025. ( min. 11:03 a 11:31).
The Washington Post explica que cualquier intento de procesar al expresidente Obama, quien no fue señalado ni siquiera en el informe del fiscal especial John Durham, en 2023, enfrentaría “formidables obstáculos legales”.
El fallo de la Corte Suprema sobre la inmunidad presidencial, que favoreció al presidente Trump en sus casos judiciales, pudiese ser invocado, en el supuesto de que se formalice una denuncia contra el exmandatario demócrata.
Por su parte, la oficina privada del expresidente Obama calificó de “débil distracción” las acusaciones hechas por Trump y por Gabbard.
Univision Noticias resume las más recientes semanas de la gestión Trump (julio 2025) como una serie de acciones que el presidente y su círculo más cercano hacen para evadir hablar del caso Epstein; al tiempo que analistas como Todd Belt, profesor de la Universidad George Washington, consideran que las acusaciones de Trump a Obama son parte de una estrategia más amplia de distracción, pero que “también cumplen otra función: presentar al presidente como víctima de la traición demócrata”.
Lee aquí cómo escogemos y asignamos nuestras etiquetas en elDetector.
elDetector opera de forma independiente con el financiamiento de instituciones que puedes ver aquí y que no tienen ningún poder de decisión sobre nuestro contenido. Nuestra línea editorial es autónoma.
¿Viste algún error o imprecisión? Escríbenos a eldetector@univision.net o a través de nuestra cuenta de X (Twitter) @eldetectoruni. Tras verificar tu solicitud, haremos la corrección que corresponda en un plazo no mayor de 48 horas.
Lee aquí nuestra metodología y política de corrección. Seguimos el Código de Principios de la International Fact-Checking Network (IFCN), que puedes ver aquí traducido al español. Escribe a la IFCN llenando este formulario si consideras que no estamos cumpliendo ese código.
Envíanos al chat de WhatsApp +1 (305) 447-2910 lo que quieras que verifiquemos:









