Una mujer asegura que Trump la violó, es la número 16 que lo denuncia por agresión sexual. Él lo niega

Una decimosexta mujer dice que el presidente Donald Trump la atacó sexualmente hace 23 años, en lo que ella describe como una violación.

E. Jean Carroll, escritora y columnista de la revista Elle, detalla un encuentro con Trump en la década de 1990, cuando éste era un magnate de bienes raíces, estaba casado con su segunda esposa, Marla Maples, y Carroll era una reconocida escritora.

El encuentro comienza de manera amistosa, dice ella, cuando se topan de casualidad en la tienda por departamentos Bergdorf Goodman, pero rápidamente se torna violento.

La revista dice que logró corroborar la historia con dos amigas de Carroll a las que les contó del incidente en ese entonces.

Una de ellas, a quien Carroll describe como "periodista, escritora en revistas, corresponsal en los programas matutinos de televisión, autora de muchos libros" le dijo: "Te violó ¡Ve a la policía! Iré contigo. Vamos juntas". La otra amiga, también periodista, le dijo que se olvidara del tema, que Trump seguramente tenía "200 abogados" y la enterraría en demandas y papeleo.

Según New York Magazine Bergdorf Goodman no archivó grabaciones de las cámaras de seguridad que puedan corroborar esa historia.

Un alto funcionario de la Casa Blanca le dijo a New York Magazine en una declaración: "Esta es una historia completamente falsa y poco realista que se presenta 25 años después de la supuesta ocurrencia y fue creada simplemente para hacer que el presidente se vea mal". Esa ha sido la tónica de las respuestas que ha dado el cículo de Trump a las acusaciones previas.

Horas después en un comunicado escrito del propio presidente desmiente el testimonio de Carroll: "Nunca conocí a esta persona en mi vida. Ella está tratando de vender un nuevo libro, eso debería indicar la motivación. Debería ser vendido en la sección de ficción".

Además en un giro extraño, el presidente trata de establecer motivaciones políticas detrás de la denuncia: "Si alguien tiene información de que el Partido Demócrata está trabajando con la señora Carroll o con New York Magazine, notifíquenos tan pronto como sea posible".

También acota que no presenta ninguna prueba que corrobore la presunta violación sexual: "¿Fotos? ¿Cámaras de seguridad? ¿Video? ¿Reporte? ¿Ningún vendedor por allí? Quisiera agradecer a Bergdorf Goodman por confirmar que no tienen video de tal incidente porque nunca ocurrió", agrega la declaración del presidente.

La escritora se suma a otras 15 mujeres que han acusado a Trump de agresiones sexuales. Desde tocarlas, besarlas sin consentimiento, presionar sus genitales contra ellas, y hasta en al menos un caso, de violación. El presidente ha negado todas las acusaciones, ha llamado "mentirosas" a estas mujeres y asegura que son "noticias falsas".

Caroll dijo que no había hecho su acusación antes porque "recibir amenazas de muerte, que me saquen de mi casa, que no me tomen en serio, ser arrastrada por el barro... y unirme a las 15 mujeres que han presentado historias creíbles sobre cómo el hombre las agarró, acosó, menospreció, manoseó y las agredió, solo para ver cómo él le da la vuelta, lo niega, las amenaza y las ataca, nunca me sonó muy divertido”.

Entre quienes han acusado al hoy presidente está Summer Zervos, antigua concursante del reality show de Trump, 'The Apprentice', quien dice que él la besó contra su voluntad, manoseó sus senos y "presionaba sus genitales" contra ella. Kristin Anderson le dijo a The Washington Post que, también a principios de la década de 1990, Trump la tocó sin su consentimiento debajo de su minifalda, en la entrepierna y la vagina a través de la ropa interior.

El presidente, en una grabación que salió a la luz en octubre de 2016, a pocos días de las elecciones presidenciales, alardeó de que "agarraba" a las mujeres sin su consentimiento de sus genitales y "porque cuando eres una estrella te dejan hacerlo".

Ante una revelación que muchos temían que descarrilara sus opciones ante Hillary Clinton, Trump aceptó haberlo dicho y aseguró que era "simplemente una conversación de baño de hombres".