Rescatan a tres niñas de Mesa que vivían en condiciones deplorables, pidiendo agua y comida a los vecinos

PHOENIX, Arizona - Las autoridades arrestaron a Katrina Johnson y Brandon Edwards esta semana por tres cargos de abuso infantil, después de que encontraran a sus tres hijas buscando comida y agua con los vecinos, pues en su casa las condiciones son deplorables.

Según las investigaciones, además del descuido en el que estaban, las niñas vivían en una casa llena de basura, con un inodoro “lleno hasta el borde con heces humanas”, sin agua corriente, ni comida en condiciones de ser ingerida.

Ante la policía, la pareja admitió que sabía que tenían a las niñas en condiciones negligentes y que habían estado gastando el dinero de la madre de Katrina en drogas, en lugar de alimentar a las pequeñas.

El 20 de febrero de este año, agentes de la Oficina del Sheriff del Condado de Maricopa (MCSO, en inglés) respondieron a un control de bienestar en la casa de la pareja, pues una persona reportó que las tres niñas iban a buscar agua y comida a la casa de los vecinos. Eso ocurrió en una vivienda cerca de la calle 96 y Broadway Road, al este de Ellsworth Road.

Entonces, los agentes acudieron y encontraron la casa llena de basura, por lo que llamaron a la Unidad de Víctimas Especiales de MCSO para investigar. Katrina Johnson entonces le dijo a los detectives que las menores estaban inscritas en una escuela en línea y que se bañaban varias veces a la semana en casa de la madre de Brandon Edwards.

Él, por su parte, declaró que Katrina educaba en el hogar a las menores.

Fuera del sistema escolar, aunque sus padres decían lo contrario

Pero la investigación encontró que las niñas habían sido expulsadas de su escuela en línea.

Los investigadores obtuvieron una orden de registro para poder fotografiar la casa por fuera y por dentro. Encontraron “ cantidades excesivas de basura” por toda la casa, además de las condiciones ya mencionadas.

Entrevistadas por autoridades, las dos niñas mayores dijeron que iban a la escuela en línea y tenían comida en casa.

Sin embargo, la menor dijo que a menudo tenía hambre porque Brandon Edwards y Katrina Johnson no podían permitirse comprar comida, y por eso su hermana mayor pedía alimentos y agua a los vecinos.

Registros del Departamento de Educación de Arizona mostraron que dos de las niñas estuvieron inscritas en algún momento en la escuela y fueron dadas de baja por excesivas ausencias, pero la tercera jamás lo estuvo.

Recibían dinero para necesidades que no fueron cubiertas

Katrina Johnson alegó que el suministro de agua estaba cortado por “multas preexistentes” en la casa, aunque la ciudad de Mesa no se imponen multas contra una propiedad.

Brandon Edwards, por su parte, les dijo a los investigadores que trabajó durante 20 años en Club Red, en Mesa, pero el Departamento de Seguridad Económica de Arizona no tiene en su poder información de empleo sobre él. Katrina, en cambio, aparece como desempleada desde 2020.

La madre de Katrina Johnson dijo a los investigadores que le estuvo enviando miles de dólares a su hija para pagar el alquiler, las reparaciones del automóvil, servicios públicos y comida.

Las niñas tenían bajo peso cuando fueron llevadas ante las autoridades.

La investigación arrojó que la pareja había rechazado una oferta de la madre de Brandon Edwards, para que las niñas se quedaran con ella en su casa.

La pareja enfrenta tres delitos graves de abuso infantil y tres cargos de contribuir a la dependencia de un menor. Su audiencia ante la corte está programada para agosto.

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