La Asociación del Rifle asegura que ha impulsado controles a la venta de armas pero los hechos dicen lo contrario

Solo este año, la NRA apoyó restituir las armas de fuego a veteranos con trastornos mentales y respaldó la anulación de una medida de Obama que intentaba evitar que gente con dichos problemas accediera a ellas.

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Por:
Lucía Cohen.
Aunque no existe un registro centralizado, se estima que en EEUU hay más armas que habitantes.
Aunque no existe un registro centralizado, se estima que en EEUU hay más armas que habitantes.
Imagen Scott Olson/Getty Images

El director ejecutivo de la Asociación Nacional del Rifle (NRA), Chris Cox, afirmó esta semana en una entrevista con el canal de noticias Fox News que su organización ha trabajado para incluir todo registro de enfermedad mental y antecedentes criminales en los controles para vender armas de fuego.

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Pero eso no es cierto. La realidad es que, en términos generales, la NRA tiene una larga trayectoria oponiéndose a la revisión de antecedentes para la venta de armas. Por ejemplo, en febrero de este año la NRA apoyó una ley con la que el gobierno de Donald Trump anuló una medida que intentaba evitar que la gente con trastornos mentales accediera a las armas.

La regla, introducida por el expresidente Barack Obama, establecía que el Sistema de Seguridad Social debía enviar la lista de personas con trastornos mentales al Sistema Nacional de Chequeo de Antecedentes Criminales (NICS) del FBI, encargado de los controles previos para la obtención de armas de fuego.

En el mismo programa de Fox, el ejecutivo de la NRA defendió la postura de la organización y del presidente Trump, al decir que ese trámite les negaba a los ciudadanos mayores sus derecho a portar armas, garantizado en la Segunda Enmienda de la Constitución de EEUU.


La medida de Obama se fundamenta en las leyes de Seguridad Social y de Seguridad de Ingreso Suplementario (SSI) para determinar a las personas que se incluyen en el listado de enfermedades mentales.

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Dichas leyes consideran con "deficiencia mental" a toda persona que presente un reclamo basado en esa discapacidad, que tenga un diagnóstico de impedimento mental, sea mayor de 18 años y menor a la edad de retiro y que reciba sus beneficios a través de un tercero, porque es mentalmente incapaz de gestionar los pagos.

Lucha de larga data

La oposición de la NRA a la revisión de problemas mentales o antecedentes criminales es de larga data.

“La NRA ha hecho prácticamente lo contrario a lo que afirma Cox", advierte el catedrático de la Universidad del Estado de Nueva York y autor de 5 libros sobre control de armas, Robert Spitzer, quien destaca que la agrupación se opuso a la Ley Brady que creó el proceso nacional de revisión de antecedentes en 1993.

Desde entonces, la oposición ha sido permanente. "La NRA se opuso al financiamiento apropiado de dichos programas, luchó en contra de los esfuerzos estatales de agrandar o mejorar sus procesos de revisión de antecedentes y apoyó los esfuerzos para eliminar esos datos en lugar de guardarlos para su posterior análisis”, explicó Spitzer a Univision Noticias.

El académico agregó que la NRA suele abogar para que se cumplan las leyes existentes en lugar de promulgar nuevas, mientras que "trabaja con diligencia para coartar la aplicación más efectiva de esas mismas normas".

Hay varios ejemplos recientes que lo demuestran, como el intento frustrado de controlar la venta privada de armas en Maine, a lo cual la agrupación se opuso.

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En Nevada, la NRA invirtió 6,5 millones de dólares, según Bloomberg, para evitar el aumento de controles que, si bien fue aprobado, todavía no ha sido implementado por las autoridades estatales.

"La NRA trabaja activamente para tratar de restituir las armas a la gente que las ha perdido por razones de salud mental, incluso habiendo dudas importantes respecto a si esas personas deberían tener este derecho restituido”, explica Spitzer.

De hecho, la asociación apoyó un proyecto de ley, aprobado en marzo en la Cámara de Representantes, que le facilitaría el acceso a las armas a veteranos con trastornos mentales.

Esta propuesta generó la protesta de miembros de la Coalición de Veteranos por el Sentido Común, que la llamaron una "legislación irresponsable y peligrosa" y pidieron a los líderes del Congreso oponerse a ella.

Los veteranos suelen enfrentar trastornos de estrés postraumático, depresión y son especialmente vulnerables a quitarse la vida. "Permitirles tener un acceso ilimitado a las armas solo aumenta el riesgo o peligro de suicidio”, concluye Spitzer.

Algunos agentes se pusieron a cubierto detrás de sus patrullas mientras otros armados con rifles de asalto corrieron hacia el sitio donde se registró el tiroteo.
Algunos de los asistentes ayudaron a las personas que fueron impactados por las balas mientras escuchaban a un grupo de música country.
El tiroteo ocurrió cerca del Mandalay Bay Hotel and Casino de Las Vegas.
Fanáticos de la música country que asistieron al festival, atienden a una de las víctimas que resultó herida en el mortal tiroteo.
Los asistentes a un festival de música country huyeron despavoridos al escuchar las múltiples detonaciones.
Escenas de pánico y desesperación se vivieron tras escucharse las ráfagas en el festival de música country en Las Vegas.
La policía dijo que uno de los sospechosos de la balacera en el festival de música fue "abatido".
Desde el primer momento que se reportó la balacera, la policía de Las Vegas activó la búsqueda del atacante.
Agentes de policía advierten a peatones que se pongan a cubierto en las inmediaciones del lugar del tiroteo.
Algunos de los asistentes al festival de música country vieron destellos de luz desde un piso alto del hotel y luego escucharon las ráfagas de un arma automática.
La policía descartó que hubiese más de un tirador y cree que el ataque fue obra de un "lobo solitario".
El tiroteo de Las Vegas se ha convertido en el más mortal en la historia reciente de EEUU.
Los agentes de la policía especial se desplegaron por toda la zona mientras se mantuvo la búsqueda del atacante.
Los cuerpos de tres víctimas mortales del tiroteo masivo en un festival de música country.
Una mujer, junto a una camilla, espera asistencia sentada en una vereda a pocos metros del lugar del ataque en Las Vegas.
Un agente de la Polcía de Las Vegas llega al lugar de la escena del tiroteo donde murieron al menos 50 personas y más de 200 resultaron heridas.
Las autoridades policíacas de Las Vegas creen que se trató de un solo atacante, que actuó por cuenta propia.
El pistolero, un hombre de 64 años, murió en la habitación del hotel desde donde hizo los disparos.
La zona de la masacre permanece cercada por la policía.
El tiroteo se registró poco después de las 10 PM (hora de Las Vegas) y duró al menos dos minutos.
Los disparon provocaron la estampida de miles de asistentes al concierto de música country en Las Vegas
Policías registran a un hombre en las cercanías del lugar del tiroteo poco antes de la medianoche del domingo.
Los heridos en el tiroteo de Las Vegas fueron llevados a varios hospitales unicados cerca del lugar de la masacre.
Un agente de la policía de Las Vegas habla por teléfono en el lugar de la masacre. Detrás de él yace el cuerpo de una de las víctimas cubierto por una manta de color blanco.
Decenas de carros de bomberos y ambulancias llegaron al lugar de la masacre.
El cantante de música country, Jason Aldean, actuaba sobre el escenario en el momento del mortal tiroteo.
Desolación después del ataque.
La mùsica country está de luto en Estados Unidos.
En esta imagen se ven las ventanas rotas del piso 32 del hotel Mandalay Bay, sitio desde el cual el atacante, identificado como Stephen Paddock, de 64 años, abrió fuego contra la multitud.
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Algunos agentes se pusieron a cubierto detrás de sus patrullas mientras otros armados con rifles de asalto corrieron hacia el sitio donde se registró el tiroteo.
Imagen David Becker / Getty Images
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