Opositores al supremacismo toman las calles de Washington: "Ni nazis, ni racistas, ni ahora, ni nunca"

Calles abarrotadas de agentes, patrullas y más seguridad de lo corriente se vio en la capital durante la protesta supremacista que fue superada en número por la de sus opositores. El presidente Trump aseguró que condenaba "todo tipo de racismo".

Por:
Univision
Un pequeño grupo de supremacistas blancos llegaron a la capital estadounidense para el mitin de extrema derecha "Unite the Right", mientras cientos de opositores se agruparon para protestar su presencia en el distrito.
Video Video: Cientos protestan marcha supremacista blanca en Washington

Las calles de Washington DC se llenaron este domingo de cientos de opositores al supremacismo que confrontaron con palabras y superaron en número a los nacionalistas blancos que caminaron escoltados por la policía.

Ve en vivo las protestas en Washington

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Las manifestaciones no tomaron a la capital desprevenida. Con el recuerdo de un violento Charlottesville el 12 de agosto de 2017, las autoridades redoblaron la seguridad en las calles con patrullas, agentes a pie, en motos, bicicletas y con algunas vías cerradas desde temprano y hasta este domingo a las 8:00pm. Hace un año tres personas fallecieron en Virginia, una civil atropellada en medio de la protesta y dos policías.


La intención original de los supremacistas era regresar a Charlottesville, pero la ciudad no les concedió el permiso y por eso se fueron a la capital del país. Buscan reclamar por lo que el organizador Jason Kessler describe como “abusos contra los derechos civiles” supuestamente cometidos contra ellos hace un año.

Llamaron a su manifestación 'Unite the Right 2', como una continuación de lo que comenzaron en 2017.

Con el despliegue de seguridad visto desde temprano, según reportan medios locales, la policía buscó frenar un posible choque entre las dos movilizaciones. Pusieron incluso barricadas físicas y de policías para separar a ambos grupos en todo momento.

Desde las 8:00 am, la Policía del condado de Fairfax tuiteó que se esperaba mucha afluencia de pasajeros en la estación Vienna para el domingo. En las dos horas siguientes, comenzó a llenarse esa parada del metro donde había letreros con mensajes como: "Zona libre de odio" y "el odio no es bienvenido aquí", reporta el diario The Washington Post.

Un grupo de manifestantes se reunió en la plaza Freedom, en Washington, DC, antes de la llegada de la marcha de los supremacistas, llamada 'Unite the Right', a la plaza Lafayette este domingo 12 de agosto. 
<b><a href="https://www.univision.com/noticias/protestas/opositores-al-supremacismo-toman-las-calles-de-washington-ni-nazis-ni-racistas-ni-ahora-ni-nunca">Cientos de personas protestaron contra los supremacistas</a></b> que llegaron a la capital exigiendo "derechos civiles para los blancos". La marcha de los nacionalistas fue planificada por Jason Kessler, el mismo que organizó la del año pasado en Charlottesville, Virginia, donde murieron tres personas como consecuencia de la violencia que se generó.
<b>"Ni ahora, ni nunca", "ni nazis, ni KKK, ni racistas, de ninguna manera".</b> Estas son algunas de las pancartas que llevaron los manifestantes que se reunieron en la estación de metro Vienna/Fairfax antes de la llegada de los nacionalistas.
<b>La policía escoltó a los partidarios de la manifestación de nacionalistas blancos,</b> que se llevó a cabo el mismo día que se cumple el primer aniversario de las protestas de Charlottesville. Mientras ellos caminaban, los opositores les gritaban consignas de crítica al racismo.
Las autoridades informaron desde temprano que sus oficiales intentarían mantener separados a los manifestantes de ambas protestas. 
<b>Las armas fueron prohibidas por completo</b> cerca de la manifestación, incluso si las personas tienen permisos para portarlas.
Un joven sostiene dos banderas: una de "Acción antihomófoba" y otra de "Antifascistas Internacionales". Los detractores del supremacismo se reunieron en distintos puntos de Washington DC este domingo, entre ellos en la plaza Freedom.
Manifestantes anti-fascistas preparaban sus pancartas hechas en casa antes del mitin de los supremacistas blancos.
Los manifestantes portaban banderas y carteles antifascistas y un pequeño grupo coreaba "no KKK, no fascista USA" mientras caminaban por la plaza. Cada frase de los oradores energizados obtuvo una gran ovación de la multitud, acompañada de aplausos y tambores.
La contra-protesta planeó distintos eventos para el día, incluso alrededor de las plazas Farragut y McPherson. Las imágenes mostraron calles abarrotadas de manifestantes opositores al supremacismo, que superaron en número a los nacionalistas.
<b>Desde el sábado, el ambiente se calentó en Washington</b> ante la llegada de los supremacistas. Un grupo de personas se reunieron en una protesta organizada por Refuse Fascism frente a la Casa Blanca en preparación a la marcha del domingo 12 de agosto.
Con el despliegue de seguridad visto desde la mañana de este sábado, la policía buscaba frenar un posible choque entre las dos movilizaciones.
Decenas de opositores al racismo y fascismo se renunieron en la plaza Freedom para protestar la presencia de Jason Kessler y sus seguidores que buscan reunirse frente a la Casa Blanca, a tres cuadras al oeste.
El rap y el reguetón sonaron desde grandes altavoces en la plaza Freedom mientras cientos de contra manifestantes se congregaban bajo el calor abrasador a pocas cuadras de la plaza Lafayette. TRas la protesta de 2017 en Charlottesville, el presidente Donald Trump culpabilizó a ambos bandos de la violencia que se generó. Aunque desde el sábado condenó cualquier tipo de racismo, los manifestantes el domingo le dedicaron una pancarta: 
<b>"Trump es un traidor",</b> se lee en ella.
En distintas calles de Washington DC, se vieron carteles contra el KKK hechos por los opositores al supremacismo. 
<b>"Sin capuchas en mi bosque",</b> decían las pancartas con la imagen de una señal de prohibido sobrepuesta.
Cientos de manifestantes y activistas antirracistas continuaron llegando al centro de Washington el domingo temprano para hacer frente a la marcha de los supremacistas este domingo.
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Un grupo de manifestantes se reunió en la plaza Freedom, en Washington, DC, antes de la llegada de la marcha de los supremacistas, llamada 'Unite the Right', a la plaza Lafayette este domingo 12 de agosto. Cientos de personas protestaron contra los supremacistas que llegaron a la capital exigiendo "derechos civiles para los blancos". La marcha de los nacionalistas fue planificada por Jason Kessler, el mismo que organizó la del año pasado en Charlottesville, Virginia, donde murieron tres personas como consecuencia de la violencia que se generó.
Imagen Getty Images

Pasado el mediodía del domingo, cientos de opositores a los supremacistas coreaban a unos metros de la Casa Blanca que "el amor ganará", "la gente unida jamás será vencida" y "vergüenza". Mostraban pancartas con mensajes como "ni KKK, ni nazis, ni racistas. Ni ahora, ni nunca" o "hay que acabar con el supremacismo blanco". Se encontraban regados entre la plaza Lafayette, la Freedom y la Universidad George Washington. Muchos caminaron a los lados de la policía que escoltaba a los supremacistas y no ocultaron sus consignas de rechazo.

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Casi a las 2:00 pm se vio llegar al organizador de la protesta a un estacionamiento fuertemente resguardado por la policía. Jason Kessler aseguró a distintos medios presentes que es un "defensor de derechos civiles" y no un radical, que no apoya al Ku Klux Klan, y prometió que en Washington no se repetiría una escena como la de Charlottesville en 2017. "Lo ocurrido allá fue lamentable", dijo.

Mientras caminaba con banderas de Estados Unidos en su mano rodeado de una decena de personas hacia una estación de metro, le gritaban: "Jódete". La policía contuvo a sus opositores, que quisieron seguirle. En las imágenes de ese momento se vio a una persona arrestada.

Poco después se le vio caminar acompañado dentro de un espacio limitado por barandas de seguridad. Algunos de quienes lo acompañaban iban con la cara a medio tapar con pañuelos. Aseguraban sentir temor a ser acosados por su ideología.

"Condeno todo tipo de racismo"

El presidente Donald Trump, que hace un año culpó a opositores y seguidores del supremacismo de lo ocurrido en Charlottesville, condenó el sábado todo tipo de racismo. "Los disturbios en Charlottesville de hace un año causaron muertes insensatas y división. Debemos estar unidos como nación. Condeno todo tipo de racismo y acto de violencia. Paz para todos los estadounidenses", escribió en Twitter.

Tras los disturbios de agosto de 2017, la postura del presidente le costó duras críticas en las que le exigían condenar tajantemente la violencia que resultó durante la protesta.

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Este domingo, el exgobernador demócrata de Virginia Terry McAuliffe dijo en una entrevista con CNN que el mandatario "falló" en su reacción de aquel momento para mostrar un liderazgo moral.

El sábado, más clara aún en su postura fue la hija del mandatario Ivanka Trump. En su cuenta de Twitter, aseguró el sábado por la noche que en Charlottesville se vio una "fea exhibición de odio, racismo, intolerancia y violencia". Agregó que "mientras los estadounidenses estemos bendecidos por vivir en una nación que protege las libertades, la libertad de expresión y la diversidad de opinión, no hay espacio para el supremacismo blanco, el racismo y el neo-nacismo en nuestro maravilloso país".

Cerró sus tuits asegurando que en lugar de odio y racismo, las comunidades se fortalezcan "para ayudar a cada estadounidense a alcanzar su máximo potencial".

Este sábado, mientras manifestantes antifascistas realizaban una marcha pacífica en Charlottesville, un grupo numeroso de personas vestidas de negro dejó flores en un memorial en honor a Heather Heyer, la víctima de los incidentes del año pasado. Ayer, igual que este domingo en Washington, se vivió una tensa calma.


Y este domingo volvieron a las calles. Con un despliegue de seguridad similar al de Washington, los opositores al nacionalismo blanco rechazaron lo ocurrido en sus calles en 2017. Se reunieron a una milla del mismo lugar en el que murió Heyer arrollada por un vehículo el año pasado.

El vehículo embistió contra la multitud -intencionalmente, según los testigos- que se oponían a una marcha de la derecha radical estadounidense, integrada por supremacistas blancos, y varios viandantes salieron despedidos, con un balance de una mujer muerta y una veintena de heridos.
Algunos sectores del Ku Klux Klan (KKK) y la derecha alternativa o Alt Right, expresaron su apoyo al presidente Trump durante la campaña electoral. El mandatario fue criticado por su respuesta, considerada tibia por algunos legisladores.
El Fiscal general Jeff Sessions rechazó estos "hechos de intolerancia racial y odio", que consideró traicionan valores fundamentales de Estados Unidos y aseguró que el peso de la justicia caerá contra los responsables de la violencia.
Trum fue criticado por condenar 
<b><a href="http://www.univision.com/noticias/incidentes-de-odio/donald-trump-condena-la-violencia-de-todos-los-lados-y-evita-senalar-directamente-a-los-grupos-supremacistas"> la "violencia de todos los lados"</a></b> y evitar rechazar directamente a los grupos de la ultra-derecha. Incluso miembros de su Partido republicano consideraron que su respuesta fue insuficiente y debería condenar a los supremacistas.
El veterano senador Orrin Hatch de Utah, twiteó "Debemos llamar al diablo por su nombre. Mi hermano no dio su vida luchando contra Hitler por sus ideas nazis para que sean aceptadas aquí en casa".
A última hora de la noche del sábado las autoridades estadounidenses acusaron formalmente de asesinato en segundo grado a James Alex Fields Jr., de 20 años y natural de Ohio, como presunto autor del atropello.
El senador republicano Ted Cruz, que fue rival de Donald Trump en las primarias del partido las pasadas elecciones, llamó a investigar el hecho como un "acto de terrorismo doméstico".
Las autoridades habían preparado un dispositivo de seguridad ante la posible llegada de entre 2,000 y 6,000 personas para participar en las protestas.
Centenares de personas llegaron a Charlottesville para participar o protestar contra la marcha "Unir a la derecha", ya un día antes estallando los primeros enfrenamientos cuando un grupo de supremacistas atravesó el campus de la universidad de Virginia portando antorchas.
Los manifestantes anti-racistas llevaban banderas del movimiento Black Lives Matter (Las vidas negras importan) y cantabn consignas contra el racismo :"No Nazis, no KKK, no fascist USA", según recoge AFP.
Entre los supremacistas se veían banderas Confederadas, consideradas símbolo de racismo por muchos estadounidenses, mientras que otros levantaban sus brazos haciendo el saludo nazi.
"Marchábamos por la calle cuando un automóvil, una berlina negra o gris, se nos lanzó encima, golpeó a todo el mundo. Luego retrocedió y nos volvió a embestir", relató a AFP un testigo.
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El vehículo embistió contra la multitud -intencionalmente, según los testigos- que se oponían a una marcha de la derecha radical estadounidense, integrada por supremacistas blancos, y varios viandantes salieron despedidos, con un balance de una mujer muerta y una veintena de heridos.
Imagen AP Photo
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