El gobierno de Trump extiende por un año los beneficios del TPS a Honduras y Nicaragua

La decisión anunciada por el Departamento de Seguridad Nacional extiende hasta el 4 de enero del 2021 la validez de los beneficios del programa que ampara de la deportación a miles de indocumentados. Una medida similar ya había sido anunciada esta semana para El Salvador.

Jorge Cancino
Por:
Jorge Cancino.
Ahora, al igual que los salvadoreños, el estatus temporal y el permiso de trabajo para los amparados bajo del programa se extenderá hasta el 4 de enero de 2021. Sin embargo, para los activistas que luchan por un estatus permanente el anuncio no es necesariamente una victoria. La administración Trump dejó claro que la extensión de los beneficios es solo válida mientras los frenos judiciales se mantengan en efecto.
Video Cerca de 58,000 hondureños y nicaragüenses se beneficiarán con la extensión por un año del TPS

Estados Unidos anunció este viernes que extenderá por un año, hasta el 4 de enero del 2021, los beneficios del Estatus de Protección Temporal (TPS) a los miles de inmigrantes indocumentados de Honduras y Nicaragua, como ya había anunciado previamente esta semana para El Salvador.

La medida ampara a unos 56,000 hondureños, 2,500 nicaraguenses y cerca de 198,000 salvadoreños, quienes además reciben un permiso de trabajo temporal.

PUBLICIDAD

La extensión de estos beneficios por un año también incluye a Haití, Nepal y Sudán, de acuerdo con una notificación del Departamento de Seguridad Nacional (DHS en inglés). La decisión amplía así la validez de las autorizaciones de empleo (EAD), documento que prueba el estatus legal de permanencia de los beneficiarios del programa.

El futuro de los TPS aún está en manos de los tribunales

“Es una tremenda noticia, pero hay que prestar detalle a lo que dice el gobierno, que solamente está extendiendo los beneficios del programa”, advierte Alex Gálvez, un abogado de inmigración que ejerce en Los Ángeles, California. “Se enfoca mucho en esto el gobierno. No se trata de una extensión en sí del programa, porque el gobierno no reconoce que en los países favorecidos se mantienen las condiciones que generaron la protección”, agrega.

"El gobierno también advierte que los TPS están sujetos a lo que resuelvan las cortes. Esto puede cambiar en cualquier momento. Por eso solo extiende los beneficios y no el programa en sí, porque todo puede cambiar. El futuro de los programas están en manos de los tribunales de justicia”, indicó.

En marzo el gobierno de Donald Trump había dejado en suspenso la cancelación del TPS de Honduras y puso el destino del programa humanitario en manos de los tribunales de justicia. El TPS de Honduras fue cancelado por DHS el 4 de mayo de 2018 y concedió una última extensión hasta el 5 de enero de 2020.

En el caso de los nicaragüenses, el programa había sido cancelado el 6 de noviembre de 2017. El beneficio había sido otorgado a ambos países en 1999 tras el paso del huracán Mitch por las costas centroamericanas.

PUBLICIDAD

El TPS de El Salvador, por su parte, fue cancelado en enero del año pasado. El gobierno les dio en esa ocasión hasta el mes de septiembre de 2019 como plazo para abandonar el país o buscar una salida legal a su situación. En el caso de ese país, el programa fue activado por primera vez en marzo de 2001 como parte de la respuesta humanitaria del gobierno federal estadounidense a los terremotos del 13 de enero y 13 de febrero que ese año azotaron al país centroamericano.

En octubre del 2018 un juez bloqueó la decisión del gobierno de acabar con el TPS, asegurando que podría causar "un daño irreparable y grandes adversidades" a los beneficiarios. El fallo firmado por el juez de distrito Edward Chen, en San Francisco, liberó de la deportación a esos más de 300,000 inmigrantes originarios de El Salvador, Haití, Nicaragua y Sudán. La medida no incluyó a Honduras porque ese país no participó en la demanda.

Mira también:

Un agente de la nueva Patrulla Fronteriza de El Salvador inspecciona un tramo del río La Paz en La Hachadura, un punto fronterizo con Guatemala, el 12 de septiembre de 2019. El Salvador desplegó un contingente de 800 policías y 300 oficiales de migración para reforzar las principales fronteras del país, prevenir el tráfico ilegal de personas y combatir al crimen transnacional.
La nueva fuerza inició operaciones en La Hachadura, a unas 78 millas al oeste de la capital San Salvador, una de las principales rutas que utilizaron el año pasado miles de centroamericanos para formar multitudinarias caravanas hacia el norte.
La nueva Patrulla Fronteriza salvadoreña 
<b><a href="https://www.univision.com/noticias/inmigracion/el-salvador-firma-acuerdo-con-eeuu-para-combatir-la-migracion-irregular-pero-no-sera-tercer-pais-seguro" target="_blank">es parte de un acuerdo con firmado </a></b>entre el secretario interino de Seguridad Nacional de EEUU, Kevin McAleenan, y el presidente salvadoreño, Nayib Bukele.
El acuerdo entre EEUU y El Salvador no incluye que este se convierta en un ‘tercer país seguro’ para los solicitantes de asilo. México llegó en junio a un acuerdo similar con EEUU y desplegó al menos 15,000 hombres de la recién creada Guardia Nacional en sus fronteras norte y sur para detener la migración.
Guatemala y Honduras sí aceptaron la propuesta de EEUU de convertirse en un ‘tercer país seguro’ para los solicitantes de asilo. Esto significa que EEUU podrá rechazar conceder asilo a una persona que haya pasado por estos países y canalizar que la solicitud sea aceptada por estos terceros países, que teóricamente pueden garantizar la seguridad del solicitante.
McAleenan ha viajado varias veces a la región en los últimos meses en la búsqueda de medidas que ayuden a frenar la migración irregular hacia su país. El ministro de Justicia y Seguridad Pública de El Salvador, Rogelio Rivas (en la fotografía), explicó que esta fuerza buscará golpear las estructuras criminales que trafican personas y grupos violentos que fuerzan a la población a migrar.
El día de la firma del acuerdo a finales de agosto McAleenan aseguró que la cifra de salvadoreños que ha llegado a la frontera sur de EEUU se ha reducido significativamente: “en mayo más de 16,000 y ahora estamos en agosto con 6,000 (...). Es un progreso significativo en términos de la migración forzada desde El Salvador”, manifestó.
Dos hombres en una carreta tirada por bueyes se cruzan con la nueva patrulla fronteriza en la frontera entre el Salvador y Guatemala. Según un convenio centroamericano de libre movilidad, conocido como CA-4, suscrito en 2006 por Guatemala, El Salvador, Honduras y Nicaragua, los ciudadanos mayores de edad de los países firmantes pueden circular sin restricciones y sólo portando sus documentos de identidad nacional.
Bukele señaló que las medidas inmediatas que van a aplicar para combatir la migración irregular luego de la firma del convenio con EEUU son las mismas que han estado implementando desde que asumió el poder el 1 de junio.
Un oficial de la nueva fuerza salvadoreña frente a un helicóptero, parte de las herramientas para detener la migración. Según el gobierno de El Salvador, desde el primero de junio han capturado de 159 traficantes de personas y han rescatado a 362 niños y adolescentes. Además casi 500 personas vinculadas con otros delitos en la frontera han sido apresadas.
1 / 10
Un agente de la nueva Patrulla Fronteriza de El Salvador inspecciona un tramo del río La Paz en La Hachadura, un punto fronterizo con Guatemala, el 12 de septiembre de 2019. El Salvador desplegó un contingente de 800 policías y 300 oficiales de migración para reforzar las principales fronteras del país, prevenir el tráfico ilegal de personas y combatir al crimen transnacional.
Imagen Moises Castillo/AP
En alianza con
civicScienceLogo